Gemí de dolor cuando comencé a despertar gracias al dolor en mi cuerpo, gruñí leve y miré a mi alrededor aunque me costara por tener que acostumbrarme la vista.
- ¿Huh? - Traté de moverme y romper las cadenas en mis muñecas y tobillos que me mantenían en la silla en la que estaba sentada; mi cuerpo se sentía muy pesado y débil... no podía romperlas.
Menos porque eran de plata, así que me estaba quemando y debilitando más.
Mi cuerpo estaba cubierto de heridas, rápidamente recordé el accidente y a mi mente llegó Jake. Quería verlo... quería saber si estaba bien o al menos vivo, lo quería conmigo... lo necesitaba...
"Él vendrá, estoy segura..."
"Eso espero... en nuestro estado no creo que podamos hacer mucho..."
"Pero aguantaremos, podemos hacerlo"
Me sobresalté y presté atención al momento de escuchar la puerta abriéndose, creando un chillido aturdidor. Entonces entra un hombre con una sonrisa muy ancha que... realmente me dió miedo, pero no iba a demostrarlo.
- Finalmente has despertado - Se acerca a mi.
Sonríe e intenta acariciar mi mejilla mientras yo trato de apartar mi cabeza mientras lo miro con asco.
- No me toques - Murmuré entre dientes y usando mi voz de Alpha y Luna. Pero aquello le causa risa.
- Creo que... no estás en condiciones para hablarme de esa forma - Aún así se aparta un paso.
- ¿Qué es lo que quieres? - Pregunté.
- Pues verás... se ha corrido un rumor... nos ha llegado información valiosa sobre que tú estás conectada con la Diosa Luna... así que... queremos comunicarnos con ella -
¿Cómo es que ellos se enteraron? Pero... ¿Qué es aquello que quieren hablar con ella?
- No sé de qué hablas - Negué gruñiendo.
- No hace falta que lo niegues, lo sabemos... porque te vimos usando tus poderes con mis hombres -
- ¿Tus hombres... ? ¡¿Sacrificáste a los tuyos por eso?! -
- Fue por un bien mayor... pero eso no es lo importante - Agarra mi cuello repentinamente y me hace levantar la cabeza un poco - Vas a ayudarnos a contactar con ella así quieras o no -
- ¿Por qué crees que voy a ayudarlos? Malditas sanguijuelas - Él sonríe, cosa que consigue alertarme más.
- ¿No matar a tu Mate es suficiente incentivo para ti? - Abrí los ojos de par en par.
- ¿Lo... tienen? -
- Es muy obvia la respuesta, preciosa -
- Mentira... no podrían atraparlo... -
- Oh, pero es tan fácil cuando... ya está inconsciente por el accidente, así como fue facil contigo... -
- No intentes engañarme, vampiro - Intenté levantarme mientras gruñía pero claramente no pude.
- ¿Quieres correr el riesgo de perderlo? Ayúdanos y lo dejaremos vivo, no intentes contactarlo, hay una barrera aquí, puesta por una bruja, que no lo permite; perderás tu tiempo -
- Quiero verlo -
- Hm... Nah... prefiero no arriesgarme, tal vez tengas un plan ya en mente -
- ¡Quiero verlo! - Rugí. Él retrocede un paso y los otros se preparan por si yo consigo librarme. Él aclara su garganta.
- No lo verás, pero si no cooperas él morirá y tú no podrás detenernos -
Tiene que ser mentira... ellos solo quieren extorcionarme para que los ayude sin trucos... pero... ¿Y si es verdad? ¿Y si realmente lo tienen? No pude saber que sucedió con él.
No quiero arriesgarme a que lo maten por mi culpa...
Aflojé todo mi cuerpo y bajé la cabeza rendida. No tenía más opción.
- Bien... los ayudaré... Aunque no sé como hacerlo - Respondí.
- Tenemos tiempo para averiguarlo, pero más te vale hacerlo rápido -
- Los ayudaré, pero a mi Mate lo dejan libre -
- Eso dependerá de ti, cuando consigamos lo que queremos... lo dejaré libre -
Me mordí mi labio inferior y este comenzó a sangrar ligeramente por aquella acción.
- Está bien... -
Aquel vampiro sonríe ampliamente, mira a su hombres quienes sonreían igual que él.
- Genial... los lobos no son tan estupidos después de todo, si saben lo que les conviene - Me da palmadas en la cabeza pero yo gruñí - Nos vemos luego, pero mejor que comiences a averiguar cómo contactar con la Diosa -
Ellos salen de la celda mientras él ríe, yo chillé una vez estando sola y dejé que un par de lágrimas rodaran por mi rostro hasta caer en mi regazo, apreté los puños pero levanté la cabeza.
- Jake... -
Volví a chillar y esta vez comencé a sollozar, no podía conectar con él... seguramente por la barrera que había mencionado, ¿Entonces es verdad... ? ¿También es verdad que lo tienen?
Narra Jake
- ¡La seguirán buscando, nadie dejará de buscar hasta que aparezca! ¡Encuéntrenla! -
Todos mis hombres se movían frenéticos ante mis órdenes, pero también porque para ellos también era importante encontrar a su Luna.
No puede ser que no haya ni un maldito rastro de ella.
Gruñí frustrado, pero entonces miré a la luna. Me concentré en su resplandor y recordé aquello que Vanessa me había dicho, sobre estar conecta con nuestra Diosa.
¿Ella lo sabrá? ¿Nos podría ayudar?
Volví la mirada a todos lados pero se me ocurrió una idea que podria servirnos.
- ¡Tyler! - Enseguida apareció a mi lado - Acompáñame, iremos a ver a Nadia -
- Si, Alpha - Responde enseguida y comprendiendo mi plan - ¿Pero está seguro? ¿Nos querrá ayudar? -
- Tenemos que intentar, sería probablemente nuestra única opción para encontrarla -
Él asiente. Ambos nos transformamos y corrimos rápidamente hacia el escondite y casa de aquella bruja. Una de las más antiguas y sobretodo, poderosa.
Espero y nos ayude.
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MÍA, SOLO MÍA
Manusia Serigala¿Alguna vez... se preguntaron quién o qué creó a la madre y Diosa de todos los Licántropos: La Diosa Luna? Pues yo, Vanessa Wolf, sería la primera de mi generación y desde hace diez mil años... que sabrá sobre eso. Pero... ¿Qué tenía todo eso que ve...
