Cap. 4 "No vayas a romperme"

89 16 3
                                    

Billie

¡Rayos! ¿Así se siente estar en tu primera cita? Qué aún ni siquiera sucede, y ya te trae los pelos de punta...

Eres una tonta emocional, Billie... Sólo es una "cita de amigos", ¡qué más se podría dar entre una chica rara que canta y el chico lindo y famoso por el que todas mueren.

Ah, sin contar que también ahora es un rockstar.

¡Basta, Billie... sé sólo tú misma y ya!

Y eso es lo que hago, me visto con una blusa negra que dice "Let happen", unos leggins color grises deportivos y para rematar, mi campera reversible lila.

-Creo que así estoy bien. Dentro de todo, no es la ropa que hay en mi armario que más llame la atención -reflexiono al recordar que me encantan los colores fuertes como el amarillo, naranja, rojo, verde y el azul... ¡Sip! Esa soy yo.

No puedo creer lo rápido que pasaron los días, hoy ya es sábado, y me encuentro sentada en una banca alejada en la plaza Montreal.
Son las 15:25 hs. ¡Sí, ya lo sé! La hora que habíamos acordado era a las 15 en punto, y la verdad es que yo estuve lista desde mucho antes, pero igual llegué tarde para no parecer "desesperada", y al contrario de lo que creí saber, la jugada me salió mal, porque a esta altura es más que probable que Finn haya venido y se haya ido al cansarse de esperar casi media hora a que yo llegara... o peor aún, tal vez ni siquiera haya venido.
Comienzo a rendirme y a perder la esperanza de verlo, cuando mi celular suena con un nuevo mensaje, es Finn, mi rostro se ilumina como por arte de magia.

Chico Sapo: 15:30 hs
¡Perdón, perdón! Ya estoy aquí... Es que tuve una entrevista de último momento de la que no podía zafarme.
Ya te fuiste, ¿cierto? :,(

Ese emoji de carita triste con lágrimas me hace sonreír como una boba. Por supuesto, me pongo feliz al ver que Finn sí tiene la intención de venir a la cita.
No tardo en contestar para decirle exactamente en qué lugar de la plaza me encuentro.

Después de unos minutos que parecieron eternos, diviso una figura que se acerca a mí corriendo a toda prisa. Esa figura es inconfundible, con su cabello rizado característico, unos jeans perfectamente rasgados y una playera negra que lo hace ver sexy como el maldito infierno en el que ardería ahora mismo con gusto...

¡Detente, Billie Eilish! ¿Adónde fue a parar tu imaginación ahora?


Finn

Después de buscarla como loco, ahí la veo, sentada, mirando para todos lados en busca de algo... o de alguien, ¿será de mí? No sé, pero esa idea me hace sonreír mientras corro agitado hacia ella.

-¡Al fin te encontré! -suelto como si hubiese encontrado un tesoro.

-¡Hecho! Eres bueno encontrando cosas...

-¡¿Cómo que "cosas"?! -sueno "ofendido" -. Tú no eres una cosa, señorita Pirate. -Me siento a su lado con diversión.

-¿Cómo me llamaste, Skata? -Me sorprendo que se sepa mi segundo nombre.

-¿Así que no soy el único que merodea a altas horas de la noche en Wikipedia?

-Técnicamente, esta mañana lo he hecho, pero veo que tú... no pudiste esperar para saber la "biografia y obra de mi vida".

>>¡Por favor, no comiences a llamarme "Pirate"... tú no! -bromea con algo de verdad en lo último que dice.

-Tranquila, Billie... Mientras tú no me llames "Skata", todo irá bien.

-¡Claro! Ahora compartimos además del amor por la música, los nombres raros que eligieron nuestros padres. -expira mostrando una genuina sonrisa que cautivaría a cualquiera, como a mí ahora.

-Supongo que en ese tiempo estaban de moda nombres como esos -agrego condescendiente.

-¿Tan raros como esos? No lo creo. Son únicos... Y los "bendecidos" con ellos somos tal vez sólo tú y yo.

-¿Qué edad tienes, Billie? -pregunto cambiando de tema.

-Si no me equívoco... -piensa falsamente -, creo que rondo los 16, pronta a cumplir 17 el 18 de Diciembre próximo.

-¡Wow! Yo cumplo unos días después, específicamente, el 23 -digo con asombro.

Al parecer, tenemos más cosas en común de las que creíamos.

-¿Cuántos? -pregunta ¿seria?

-¿Cuántos qué? -Vuelvo a preguntar ahora yo, confundido.

-¿Cuántos años cumplirás?

-Amm... ¿16? -Me siento como en un juicio o algo parecido -. ¿Hay algo mal con eso? -reacciono alarmado.

-Quitando el hecho de que soy mayor que tú... ¡No, ninguno! -responde con sarcasmo.

-Ni que fueran 10 años... ¡Sólo es un año! -Trato de sonar despreocupado. ¿En serio este podría llegar a ser un problema para nosotros?

-Bueno... -No suena muy convencida de lo que va a decir -...¡Pero piensa! Cuando tú tengas 17, ¡yo tendré 18!

-Y... ¿Eso es un crimen o qué? -digo sin poder evitar reír. ¿En serio ese es el problema?

-Lo es, Finn -dice, lamentándose.

-Ni que fuéramos a ser novios luego...

- No debiste decir eso -me da un ligero golpe en el brazo.

-Bueno... al menos que tú quieras. -Me da otro golpe, esta vez más fuerte que casi me tira del banco.

-Eres un estúpido, Wolfhard. -Se levanta dispuesta a irse, pero la detengo a tiempo para impedírselo.

-¿En serio te enojarás por esa estupidez?

>>¡Vamos, Billie! No lo echemos a perder por nada.

-Okay, "W"... Pero jura que no vas a romperme -insiste con seriedad y ¿miedo?

-¿A qué te refieres con eso de "romperte"?

-¡Por Dios, Wolfhard! Sólo prométeme que no me harás daño y ya. -señala firme y dura a la vez. Pero, ¿a qué se refiere con que voy a hacerle daño?

-Te lo prometo -le digo con total sinceridad, pero aún confundido por la actitud extraña que ha tomado conmigo.

Creo que tendré que trabajar en entender esta nueva faceta vulnerable de Billie, sin lastimar su corazón en el camino.

Stranger Love (Libro 1, Saga Strangers)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora