Yeriel.
— Taehyung eres peor que Jimin, llevo esperando mucho tiempo. ¿En qué te demoras tanto? —pregunté al ingresar a su dormitorio.
Ahí estaba. Parado frente a su cama, sobre ella habían dos... tres chaquetas y un abrigo, el las miraba detenidamente; una era de cuero las otras dos eran tipo bomber y el abrigo era de un color oscuro. Parecía estar indeciso al querer elegir una de las tres.
— No sé que ponerme —dijo apenado.
— Son sólo chaquetas Taehyung —caminé hacia su lado y miré las prendas, luego lo miré a el para examinar su atuendo. Tomé el abrigo y se lo entregué—. Ponte ese y ya.
Taehyung se colocó el abrigo y se fué a mirar al espejo. Sonrió.
— Kyaah~ hobbit no tienes tan mal sentido de la moda. Hasta tú te ves bien —cuando dijo lo último sus mejillas se tornaron de un color rosa, entonces rascó su nuca—. D-digo... Esto, no te veas tan fea.
— ¿Gracias? —no sé si tomar eso como un cumplido pero encogí mis hombros. Aunque también podria ser por lástima.
Ambos salimos de la habitación, Taehyung fué a abrir la puerta mientras yo iba en busca de mi bolso que dejé en el sofá de la sala junto con un Yeontan durmiendo tranquilamente. Lo miré con ternura y acaricié su pelaje, era muy peludito.
Escuché un carraspeo proveniente de Kim, quién esperaba en la puerta a que saliera. Así que colgué el bolso en mi hombro y caminé hacia él.
Cuando salimos del edificio, el castaño comenzó a explicar detalladamente las cosas que tenía que responder si los familiares de él me hacían preguntas. Eran cosas simples, como por ejemplo el día en el que nos conocimos y desde cuándo estábamos de novios.
— Mis tías suelen ser muy descaradas, hacen preguntas de todo tipo así que no te sientas presionada o por lo menos no demuestres estarlo por que a ellas les gusta provocar eso —explica mientras yo asentía a cada cosa que daba por entendido.
— ¿Y que hay de las demostraciones de afecto? —pregunté derrepente a lo que él se quedó callado por un buen rato— ¿Taehyung?
— ¿Ah?
— Te estaba preguntando algo —dije, esperando a una respuesta del castaño.
— Ah si, eso —recordó, lo miré con incredulidad ya que no le creía. Lo más probable es que se puso nervioso con la pregunta que le hice—. No creo que sea necesario así que no.
— Bien.
Taehyung siguió contando cosas acerca de su familia. Lo raro de esto, es que nunca nombró a sus padres, probablemente no estarán presentes en la cena.
Mientras seguía hablando de sus familiares, esperabamos un taxi para que el camino fuera menos largo de lo que se estaba haciendo. Sobretodo a mi, que los tacones que usaba me estaban lastimando mis pies, y la verdad es que hace años que no usaba ese tipo de calzado. Sólo por el simple hecho de que mis pies quedaban adoloridos y más de una vez se me han hecho heridas por hacer uso de ellos.
Ya habíamos tomado el taxi y el viaje se hizo más corto por suerte. Cuando llegamos al lugar quedé algo —bastante— sorprendida.
No era una casa, ni "la" casa. Era una especie de mansión que al verla estaba sin palabras.
Estábamos en frente de ella. Taehyung se notaba algo nervioso y al parecer no había emoción alguna por ver a sus familiares, lo digo porque conozco esa expresión y porque quizás siente lo mismo que sentí yo las veces que habían reuniones con la gente de mi papá.
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ET IRIS (Taehyung) (sin editar)
Fanfiction⚠️advertencia:esta historia la escribí en mi adolescencia ⚠️