Capítulo Dos: El Encuentro

107 41 17
                                    

Daniela:

Me arregló y voy a buscar a mi amiga karina, siempre la molesto porque el color de su piel, es más oscura que la mía, es mi amiga y solo yo tengo el derecho de molestarla o hacerle bromas.

Karina tiene un hermano llamado Orlando, es un niño conflictivo y busca pleito ;pero cuida de Karina y la protege de cualquier otro niño dentro del orfanato. Ellos fueron alejados de su madre a los ochos años por servicio social, ya que ella era alcohólica y drogadicta, dejaba a sus hijos abandonados por días.
Los vecinos se cansaron de su proceder y llamaron a la policía, los trajeron a este orfanato y corrieron con suerte porque no los separaron.
Entro al comedor buscando a mi amiga. El lugar con grandes mesas color café oscuro y sillas de plástico blancas que el gobierno dona cada año. Posee una sola entrada y salida para que las monjas puedan vigilar a los niños y controlar que no huyan o se vallan a otro lugar del orfanato.

Localizó a karina en medio del comedor y doy zancadas largas para llegar rápido a ella.

--¿Lista para el plan.? ---Le pregunto a karina dándole una de mis mejores sonrisa

--Dani, ¿No tienes miedo que nos castiguen otra vez? --- dice karina con una mirada de tristeza, esperando que cambie de opinión

---¡Ah entiendo! --- le contesto de manera burlona ---ya te arrepentiste ¡Eres una cobarde!. Le diré a Orlando que ya te cansaste de el ---- karina abre los ojos sorprendida por mis palabras y la miro con una actitud de burla

---¿Así que deseas ser adoptada?
---¿Quieres unos padres que te lean un cuento ;y te den un beso de buenas noches? ¡Verdad!

La tomo del brazo y la zarandeo, como tratando de despertarla de un absurdo sueño.

---¿Qué crees que van adoptarlo a los dos?  No ,serán separados y nunca volverás a ver a tu hermano ----
Le doy un pequeño golpe en la frente, esperando que despierte con mis duras palabras

Karina esta a punto de llorar, porque le he dado donde más le duele su hermano
----¡Esta bien lo haré! dice karina con firmeza

<<Sabía que lo haría >>

Salimos del comedor y en la única puerta que existe se encuentra la hermana Caridad, nos observa detenidamente, especial a mi.

---Espero que no tengan nada planeado niñas, ustedes pueden tener una nueva familia ---comenta la hermana Caridad

----Esta es mi familia hermana --- le respondo

---Siempre seremos tu familia Daniela, ustedes serían un complemento muy importante para parejas que buscan dar amor y felicidad --- expresa la hermana ---Así que  no hagan de las suyas vale --- y nos da una sonrisa y un beso en la mejillas

---No se preocupe hermana, nos portaremos de maravilla ---- le digo con una sonrisa pícara
La hermana Caridad nos observa con algo de duda, pero siempre tiene la esperanza que entendamos que todo lo que hace es por nuestro bien

---Bueno vayan y que Dios las bendiga y las ayude a encontrar una hermosa familia --- dice la hermana y nos deja seguir nuestro camino

<<Como puede ser tan ingenua la hermanita >>pensé

Corrimos por el pasillo y antes de llegar a la entrada de adopciones, nos dimos instrucciones de desviarnos por el patio trasero la una y la otra iría en la parte de enfrente.
Llegó a la parte de enfrente miro al orfanato

<<Está es mi casa ahora >>
<<Y no puedo perder lo que considero mi familia >>

Agarró un poco de lodo y empiezo a enbarrarlo en mi ropa y rostro, río de la caras que podrán cuando me vean. Veo a corta distancia un auto detenerse y observó que un señor baja de el con un niño que tiene la cabeza agachada, su contextura es delgada y lleva el brazo enyesado, alza la vista y a pesar de los lentes que lleva puesto se nota su tristeza.
Parece que el niño quiere llorar, lo observo un momento y me da lástima y quiero acercarme y decirle....
'' Que todo va a estar bien, aquí seremos su nueva familia "

<<Me acercaré >>

Escucho mi nombre varias veces, giro y me doy cuenta que es karina llamándome...

<<Me olvide la reunión que tonta que soy >>

Me doy un golpecito en la frente y salgo corriendo al encuentro con karina.
Pero desde lejos mientras corro doy un pequeño giro a mi cabeza, sin que nadie lo note, observó al chico que acaba de llegar al orfanato.

Tu KarmaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora