Tu Karma

capítulo 19

Resentimiento

Santiago:

Lo malo de esperar que vengan a recogerte después de un largo viaje, es ver a tu alrededor y empezar a recordar porque te fuiste desde un principio. Los recuerdos caen como bombas una tras otra. Tratas de poner en una balanza lo bueno y lo malo que has vivido, pero en mi lugar, son más malos recuerdos. Ya empieza a caer la noche y ella todavía no aparece. ¿Sera que me va a dejar esperando? Conociendo su temperamento debe estar maldiciéndome en este momento, y hablando del diablo la veo estacionar el auto sin la más mínima precaución. Si hubiera un agente de tránsito cerca de seguro le hubiera puesto una multa, y conociéndola como la conozco me subo lo más pronto al auto, porque es capaz de dejarme botado en el aeropuerto.

Observo que está malhumorada, ya que sus fosas nasales se abren y se cierran al respirar agitadamente, sus manos aprietan con fuerza el volante, y su mirada fija en la calle como si yo no estuviera a su lado. De seguro tenía una cita, lo intuyo por el maquillaje y el vestido sexy que lleva puesto.

Llevamos ya un buen tramo de camino y ella no pronuncia ni una sola palabra. Tendré que romper el hielo así mis palabras la ponga de peor genio.

-- Giovanna no voy al hotel. Nos vamos a la inauguración de la discoteca que te indique. Recuerda que ... --- No me deja terminar la oración, porque frena sin avisar y de una forma tan brutal que, si no hubiera tenido el cinturón de seguridad puesto, habría salido disparado por el parabrisas. Pero eso no es lo peor, me mira como si me fuera a fulminar, si las miradas mataran yo ya estuviera muerto en este preciso momento.

--YO TENGO VIDA PROPIA PRIMO. --comienza a gritar Giovanna --. Me sacaste de una cita para venirte a ver al aeropuerto, cuando tú tienes chófer, pero no conforme con eso ahora me dices que tenemos que ir a la inauguración de esa mierda de discoteca. -- comienza a golpear el timón del auto. Dejo que se desahogue un momento, porque conozco sus rabietas y sé que pronto se le pasará.

-- Yo sabía que algo te tramabas cuando regalaste esos benditos pases de cortesía. Si tantas ganas tienes de verla, anda tú solo. No me involucres en tus sandeces.

---No hay un doble sentido en mis acciones. Solo quiero ver la inauguración ya que nosotros también somos accionistas--- la interrumpo.

--- ¡Me crees tan idiota! Crees que no me daría cuenta que justo a ellos le diste los pases. Estaré un poco loca, pero no soy estúpida, así que vete a la mierda. --- empieza otra vez a conducir, ahora muerde su labio inferior del coraje. Tendré que calmarla, ya hace mucho tiempo que no tiene una crisis y no quiero que vuelva a tener otra por mi culpa.

--- Clark vendrá para la inauguración del hotel en la playa—Es la mejor carta que tengo para bajarle los humos. Noto como sus facciones cambian poco a poco, se va calmando y por un momento parece que quiere sonreír.

--¿Cuándo viene? --- pregunta secamente.

-- Dentro de unas semanas. Me aseguró que estaría antes de la inauguración del hotel, además piensa quedarse por un tiempo--Vuelve a frenar sin precaución en media calle, y a ella no le importa para nada la situación.

-- ¿Cuánto tiempo se piensa quedar el infeliz de Clark? ¿Acaso ya encontró a la zorra que buscaba?

-- Vuelve a manejar-- le sugiero. Ella alza una ceja y vuelve arrancar el auto.

--- Se quedará hasta que termine su libro. La editorial lo está presionando ya que tiene una fecha límite para entregarlo, y sobre la mujer que busca, aún no la encuentra.

--- No entiendo ¿Cómo un hombre en sus cabales puede creer en el amor a primera vista? solo estuvo con ella una maldita noche. Debió haber sido muy buena en la cama para no olvidarla.