Polos Opuestos

~15

La tormenta comenzaba a azotar las ventanas de la sala.

Pame se encontraba hecha un ovillo en uno de los sillones, los chicos todavía no habían llegado y ya era de noche.

Tampoco sabía a donde había ido Andy por lo que se encontraba sola rodeada de los terribles truenos y relámpagos que alumbraban la estancia cada que caían en la distancia.

A Pame jamás en la vida y tenemos que recalcar que nunca ha podido disfrutar una tormenta, suena ilógico para ella, ¿cuál es el encanto de que tiemble el edificio y se quede a oscuras? Pura charlateria.

Otro trueno sonó y se hizo aun más chiquita sobre uno de los cojines.

Se intentó distraer con algún programa que estuviera pasando por la televisión, trataba de comunicarse con su amiga y de vez en cuando lanzaba fugaces miradas a la puerta.

Espero que nos les haya pasado nada-pensó.

De repente y como si fuera a morir las luces se apagaron. Ahora si estaba asustada. Incluso podía sentir el llanto subirsele a la garganta.

La puerta se abrió pero ella ya no escuchaba nada, no quería hacerlo, se mantenía con los ojos cerrados hasta que supiera que la electricidad estaba de vuelta.

Sintió como unas manos tibias se posaban sobre las suyas, no había notado que presionaban fuertemente sus oídos.

-Pame, tranquila, estoy aquí.

El tiempo se detuvo por unos minutos.

Abrió sólo un poco sus ojos, ahí estaba Ken, arrodillado frente a ella, totalmente empapado de pies a cabeza y lo peor, a centímetros de su cara.

-Oye, mirame, estoy frente tuya, no pasa nada- le dijo, la poca luz que se colaba por los ventanales le dejaba ver que el realmente estaba preocupado por ella.

Su instinto era abrazarlo, no quería estar sola y más si una estúpida tormenta caía fuera. Ken, a pesar de estar cubierto por agua de pies a cabeza, le correspondió el abrazo.

-Sólo es una tormenta, no hay nadie ni nada que te pueda hacer daño- Pame asintió levemente la cabeza- mientras yo esté aquí.

Se separaron y Ken le brindó una de las mas cálidas sonrisas que pudo haber visto. Tenía esa aura y energia de hacer sentir bien a todos los que le rodean.

-Gracias.

Los demás se habían dedicado a ver la pequeña escena que se montaron.

-Creo saber el porque no hay electricidad, tenemos un fusible quemado- Decía Hongbin desde la parte trasera de la cocina justo donde estaba la caja de medidores.

-Tenemos debajo del lavabo, debe de haber ahí unos cuantos- Hakyeon había ido por toallas para secar a los chicos.

Cuando todos ya se encontraban secos y calmados se reunieron en la sala para tomar algo caliente, si se enfermaban el lanzamiento quedaría atrasado y nadie quería eso.

-Comenzó a caer un diluvio justo cuando doblabamos la esquina, bajamos rápido pero aun así, nos mojamos todos- comentaba Hyuk.

-Lo importante es que ya están aquí, ¿porqué Taek no está con ustedes?- Pame había preparado un delicioso chocolate caliente para todos y ella se dedicaba a servirlo en las tazas.

-Se quedó en la empresa, ya es tarde,no debe tardar o puede ser que también este esperando a que baje la lluvia.

Unos minutos de silencio hasta que Hakyeon se dio cuenta de la ausencia de otra de sus hijos.