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Las llamadas insistentes de Hakyeon hicieron que los dos pararan de grabar. Andy reviso su celular, más de 15 llamadas perdidas e incontables mensajes aparecieron en su pantalla, abrió uno de ellos y lo leyó en voz alta.

-"¿Donde carambas estás a éstas horas Andrea?- lo leyó y una risita se le colo por los labios.- Al parecer le preocupamos.

Taekwoon estaba inmerso en la pantalla, navegaba por las letras que Andy tenía escritas en los documentos, eran letras con un trasfondo muy impactante, le gustaban e inconscientemente se la imaginaba cantándolas.

-Taek, creo que deberíamos de irnos.- Al escuchar eso se dio la media vuelta y miro a Andy quien observaba su celular algo preocupada.

-¿Porqué lo dices? ¿Hay algo malo?

-Los mensajes de Hakyeon dicen que cae una tormenta fuerte y que no vamos a poder salir del edificio si quiera, ya es tarde y si nos esperamos nos arriesgaríamos a salir de madrugada, si algo te pasa no me lo perdonaría- dicho esto comenzó a guardar sus cosas con suma rapidez, desconecto todo, empaco su violín y se coloco de nuevo la sudadera que traía.

Leo sin saber que hacer opto por lo mismo, apagó todo el equipo y se puso el abrigo que estaba detrás del respaldo de la silla.

Le preocupo

Bajaron por el elevador y se sorprendieron al ya no ver a nadie en la recepción, detrás de la puerta de cristal se veía una gran cascada cayendo y llenando las calles a su tope, parecía una película de terror. 

-Dime por favor que traes algún paraguas en tu mochila- Leo estaba petrificado, no le gustaba mojarse y las lagunas y ríos que surcaban la avenida subían sin parar. Andy negó con la cabeza y se acerco a la puerta de cristal, la abrió solo unos centímetros, la gran ventisca helada le cubrió la cara y le congeló los labios.

-Bueno, tenemos dos opciones, correr al dormitorio o quedarnos a dormir en la empresa.- Taekwoon no sabia que decidir, de verdad no quería mojarse pero si alguien se enteraba que durmieron ahí les iría mal, y eso significaba regaño para Andy.

-Tendremos que correr- dice no muy seguro. Respira profundo y se abriga aun mas para no mojarse tanto.

Andy lo vio unos segundos para después decir.- Tranquilo, la lluvia no es mala, ven.- le extendió la mano y el con gusto la toco, estaba tibia.

Abrieron la puerta juntos, la calle era un caos. La gente se cubría con sus paraguas y corrían, se refugiaban en el primer techo que encontraban mientras que ellos ni si quiera un paraguas traían.

Taekwoon sujeto más fuerte la mano de Andy y ella al notarlo le devolvió el gesto.

-Estamos a unos veinte minutos caminando a paso rápido, tranquilo nos detendremos cuando veamos algún techo.- Leo asintió y juntos comenzaron a caminar.

La lluvia no tardó en empaparlos por completo, junto con el viento que azotaba les calaba los huesos y hacia tiritar sus labios.

Leo caminaba a paso largo y poco a poco empezó a dejar a Andy atrás gracias a sus largas piernas, diviso en la cercanía un techo fuera de una librería y no dudó en pararse ahí. Intentó quitarse la mayoría de agua que surcaba sus prendas.

Cuando se acordó de su amiga.

Volteó por donde había venido y la vio caminando mojada y temblando de frío.

No supo cuando ni como pero salió corriendo hacia ella, la tomó del brazo y la jaló lo mas rápido que pudo debajo del techo.

-Deberías caminar más aprisa.- Leo tenía la mala fama de regañar y aprender a sus compañeros y ahora lo estaba haciendo con ella.

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