Change Love ·

Capítulo 2 · ¿Y si te provocó?

- ¡Ese hijo de puta!- grite entrando a mi habitación cerrando la puerta fuertemente detrás de mi.

-¡Hey! ¿que sucede? - interrogó Abby preocupada mientras abría y cerraba la puerta mucho mas calamada que yo.

-¿Sabes quien es el hijo de los Parks?- pregunté furiosa tomando una almohada entre mis manos, Abby nego lentamente con la cabeza -¡Tovias!- grite aventando la almohada al suelo.

-Okay Nicole, no quiero arruinarte tu rabieta, pero ¿Quién diablos es Tovias?

Suspire, en verdad había sido muy estupido, ella estaba completamente agenta de la situación.

-El estúpido buenorro con el que tropecé- expliqué,  inmediatamente mi amiga abrió los ojos como platos al identificar al susodicho.

-Joder- espetó- el es el, el, el...- no podía completar una oración coherente. -¿Que te dijo?

-Se presentó como el mezquino, el idiota se estaba burlando de mi.

-Oh...-

-¿Oh? ¿Solo "Oh"?

-Oye tranquila,  no se que decirte, estas undida en la mierda, eso es todo lo que sé

-Gracias...- me deje caer en la cama- si ese gran idiota abre su puta boca yo terminaré en un internado de monjas, los señores Parks no dejaran que nadie insulte a su... princeso.

Abby abrió paso a grandes carcajadas que puedo jurar, se escucharon en todo el corredor.

-¿Y si hablas con el?- pregunto secándose  diminutas lágrimas que caían por su risa.

-Oh... claro, nuestra relación será tan buena que seré como su hermana menor- irónice

-No seas dramática Cox- se acercó lentamente a la cama- si estas por las buenas con el te quedas, si estas por las malas dile 'Hola' a las monjas - se burló

-¡Entendí!

-¿Ocurre algo?- interrumpio mi hermano asomando su cabeza tímidamente por la puerta blanca de mi habitación.

-Hola Ashton- Abby comenzó a enredar un mechón de su cabello rubio con su dedo índice.

-¿Que hay?- asintió mi hermano como saludo.

-¿Necesitas algo?- interrumpi su meloso momento.

-Mmm... si, Amelia quiere que bajen, Martín esta por dar unas palabras a los invitados.

Asentí con la cabeza y al ver como mi hermano no se movía,  caminé y pasé aun lado de el dejandolo con Abby.

Me abrí espacio entre la multitud hasta llegar al frente de todo. Logré apreciar a los señores Parks arriba de las escaleras principales, cada uno sonrientes con una copa de champagne en sus manos.

Gire mi cabeza disimuladamente buscando al baboso idiota con el que tenía que llevarme bien.

-¿Buscas algo?- escuché la voz masculina que a pesar de que solo la escuché un par de veces, ya me sabía de memoria.

Levanté mi mentón cobrando un poco mas de postura y me giré a ver al chico que estaba aun lado mio. ¿Por que diablos no lo habia notado a mi lado?

-No, solo observaba a los presentes- utilicé las palabras mas maduras que se me ocurrieron. Si le tenía que agradar al idiota, tendría que aparentar ser como el.

-Llegas tarde- indicó lo obvio mirando hacía sus padres mientras se llevaba su copa de champagne a la boca - supongo que es usual en los adolescentes.