"¿En dónde estoy?, Esa voz me parece conocida, ¿Cómo llegué aquí?"
Me levanté, me acomodé como pude, mi cuerpo se sentía pesado, no estaba seguro de quién era esa voz, pero estoy seguro que es de alguien conocida, era una voz femenina, su tono melodioso, el aire es mucho más suave, "¿Acaso estoy muerto?", no reconozco el lugar, no sé en dónde me encuentro, pero mi curiosidad me ganó y preferí seguir caminando, mi cuerpo se tornó más liviano, "Esto no es normal", pensé.
Caminé y caminé, sin rumbo alguno, hasta que...
"Ten más cuidado por donde caminas", escuché.
Era ella, "¿Claudia?", pregunté.
"Hola Farid, me alegro de encontrarte", me respondió.
Yo: "¿Sabes en dónde estamos?"
Claudia: "¿Este lugar? No lo sé, tú dímelo".
Yo: "Esto se está poniendo muy confuso, ¿Qué hacemos aquí?"
Claudia: "Relájate, todo está bien".
De pronto todo se quedó en silencio, hasta que un fuerte sonido nos alarmó.
Parecía el de una bala, el escenario había cambiado, estábamos en la calle en la que nos conocimos sin querer, ella me abrazó fuertemente y me dijo: "No me dejes sola, por favor".
Esto estaba muy confuso, "¿Ahora que hago?", me pregunté.
Me di la vuelta, un tipo encapuchado me tumbó al suelo con un golpe y me disparó.
Lo último que escuché fue el grito desgarrador que soltó Claudia.
Noté que mi sangre corría por el lugar.
No podía moverme, todo estaba poniéndose oscuro.
De repente, "¡Farid, despierta, se te hace tarde para ir a la escuela!"
No tengo idea sobre a qué hora me quedé dormido, pero ese era el grito de mi madre de cada mañana, el reloj marcaba las 7:30 am. Definitivamente, hoy llegaré tarde.
No me dió tiempo de desayunar, alisté mis cosas, hace unas horas pude hacerlo pero se me pasó por alto, y salí corriendo de mi casa.
La secundaria queda a casi media hora de donde vivo, no tenía tiempo que perder, me subí a un vehículo y partí, olvidé despedirme de mi familia, "los encontraré más tarde", me dije.
En el camino me puse a pensar sobre aquel sueño, "¿Qué significaba?"
Tal vez nada, no le dí tanta importancia.
Entré a la institución y volví a la rutina de siempre, los mismos profesores, mismos amigos, y sólo esperaba que tocara el timbre que anuncie el recreo.
Llegó lo esperado, me reuní con mis amigos, que por cierto somos un grupo de 8, Enrique, José, Jesús, Carlos, Patricio, Jair, Julio y yo, obviamente.
Nombres comunes, bueno, es una escuela pública, ¿qué más pueden esperar?, cada uno de ellos aún no saben ni que estudiar para su futuro.
¿Y yo?
En realidad lo de tatuador es poco, después de que me desanimaran mis padres, pensé en ser escritor, pero estoy casi seguro que no sirvo para eso, pensé en ser periodista, pero para qué, si mi país está hundido en la corrupción, trataría de renovar el contenido de los noticieros, desenmascaría a todos los criminales en el poder, pero si lo lograra, me tendrían bajo tierra en este instante, pensé en alguna carrera de ingeniería, pero los números no son lo mío, hay tantas opciones y tantas dificultades que se presentan cuando quieres elegir una de ellas.
Hora de salida, la misma rutina, despedida de puños, el aburrido retorno a mi hogar, pero esta vez con un sentimiento raro y una interrogante en mi cabeza...
"¿Qué estará haciendo Claudia?"
Saludé a mi familia, me encerré en mi habitación y pensé en llamarla, tenía nervios, "¿Qué le diría?, ¿Qué me diría?, ¿Estará bien que la llame?".
Otra vez entré en confusión, pero esta vez dejé mi timidez a un lado y me armé de valor, la llamé pero me dirigía a la casilla de voz, su celular estaba apagado, no insistí, seguro estaba ocupada, dejé mi celular a un lado, me cambié y volví a la sala a comer con mi familia, por cierto, moría de hambre.
Terminamos de comer, me levanté de la mesa, corrí a lavarme los dientes y salí a caminar de nuevo, con la tonta ilusión de encontrarla otra vez.
Pasé por el mismo lugar en el que nos habíamos visto ayer, pero no había nadie, seguí caminando un poco más y no había nada, decidí ir al parque que quedaba cerca, sin pensar que la encontraría sentada en una de las bancas, sola, con la mirada triste, me acerqué y empezamos a hablar.
ESTÁS LEYENDO
¿Esto es amor?
Teen FictionUna relación formada a partir de los escombros de la historia de la vida de una joven llena de angustias y problemas, con alguien que apenas conocía sobre el amor.