Capitulo 33

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--¿Estas viendo lo mismo que yo?--pregunto Jackson, con una mota aguda en la voz.

Rose se volteo para ver a que se refería el chico, aunque ya suponía de que se podría tratar. Casi sonrió al ver a Scorpius y Albus riendo, del otro lado de la mesa de Slytherin, demasiado juntos como para suponer que eran solo amigos. Puso los ojos en blanco, sintiéndose asqueada cuando Scorpius rodeo al otro chico con su brazo, y volvió a mirar a Jackson, sin poder evitar su expresión de disgusto y enojo.

--Si, lo vi esta mañana, de hecho.

--¿Y no piensas hacer nada?--pregunto el chico, subiendo un poco el tono de voz. Las personas mas cercanas observaron de reojo, sin atreverse a ver de frente para no enfrentar la ira de ninguno de los dos chicos, pero Rose, que lo había notado, decidió ignorarlo.

--No--contesto, enfadada ante la falta de respeto por parte de Jackson--, por ahora--susurro, aun mas bajo, aunque lo suficientemente alto como para que el chico lo escuche.

--¿Y que planeas hacer?--Rose puso los ojos en blanco ante las irritantes preguntas del chico--. No es como si pudieras obligar a Scorpius a estar contigo para siempre, o a seguir juntándose con nosotros, esa rata...--tomo una bocana de aire, demostrando, con una sola mirada en su dirección, toda el enfado que sentía hacia Albus--, ese estúpido de Potter le lavo el cerebro.

--No podemos obligar a Scorpius a volver con nosotros--repitió Rose, al mismo tiempo en que una sonrisa malévola se extendía por su rostro--, pero si podemos forzar a Albus para que termine con el.

(...)

Albus sonrió a Scorpius, aunque un escalofrío le recorrió la columna al observar de reojo al resto del equipo de Quidditch de Slytherin. Al verlos allí, tan imponentes y musculosos, con miradas rudas, Albus se sintió muy pequeño y una voz, aquella incesante voz que siempre solía tirarlo a abajo, susurro que no lo lograría, que jamás podría llegar a estar al nivel de un buen buscador.

--No--dijo Scorpius, sacándolo de su ensimismamiento. Lo tomo de la mano con fuerza, al mismo tiempo que llevaba su otra mano, la izquierda, a su mejilla. Albus, casi de manera inconsciente, se apoyo en el tacto. Luego, avergonzado y con la cara mas que roja, se aparto, aunque no paso mucho tiempo hasta que Scorpius volvió a atraerlo hacia el--, deja de pensar esas cosas.

Sorprendido, Albus lo miro.

--¿Como puedes saber en que estoy pensando?--dijo, tal vez con un poco mas de rudeza de lo normal.

--Por que reconozco esa mirada--susurro Scorpius en respuesta, ignorando su seca pregunta y acercándolo todavía mas--, siempre pones esa mirada cuando estas pensando en algo malo, sobretodo si es algo malo de ti. Algo que, probablemente, tampoco es cierto.

Albus se mordió el labio con fuerza (Scorpius uso toda su fuerza de autocontrol para no desviar su mirada hacia ellos) y volvió a mirar al otro a los ojos, luciendo terriblemente angustiado:--No voy a lograrlo--murmuro, Scorpius sacudió la cabeza, acariciando con suavidad su mejilla, pero Albus continuo, ignorando la clara contrariedad de su amigo--. Mira a esos tipos; son gigantes, y yo...

--Tu--interrumpió Scorpius--eres del tamaño perfecto de un buscador. Ahora, deja de pensar que no lo lograras. Eres capaz de hacer todo lo que te propongas, Albus, solo tienes que creer en ti.

Albus miro a su novio; sus ojos mostraban lo decidido que estaba y eso lo reconforto muchísimo. Inspiro con fuerza, intentando tranquilizarse e intento sonreír.

--¡Scorpius!--ambos se sobresaltaron, separándose. Uno de los integrantes del equipo de había acercado hacia ellos. Albus noto, con sorpresa, que les estaba sonriendo a ambos amablemente. Se fijo en el con mas atención y noto que jamás lo había visto antes con Jackson o Rose--. Ya llegaron todos los candidatos. El equipo se pregunta cuando comenzaran las pruebas.

No hay razón-- SCORBUSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora