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Evan

Pase la lengua por mis labios remojándolos un poco, el amo Shun me había preguntado sobre mi pasado y yo... Recordaba algunas cosas pero la gran mayoría de ellas me eran imposible de recordar.

- ¿Y? - Pregunto mi amo alzando una ceja.

- Bueno yo no recuerdo muchas cosas, solo sé que tenía una familia muy bonita de cuatro integrantes, recuerdo que éramos felices, no teníamos mucho dinero pero vivíamos bien, la felicidad reinaba en nuestro hogar - Él asintió antes de volver a hablar.

- ¿Sabes cómo se llamaban los integrantes de tu familia? - Me lo pensé unos minutos tratando de recordar al tardar demasiado mi amo volvió a hablar - Tu nombre, ¿Recuerdas tu antiguo nombre?

- Yo me llamo Evan Pierce amo, ese es mi nombre - Dije muy seguro.

- Te creo. ¿Recuerdas algo antes de que llegaras aquí?

- Yo... Mis recuerdos no son claros amo pero, ¿Por qué pregunta? - El amo Shun no dijo nada durante unos segundos.

- Porque no es justo que Shon te hiciera esto Evan.

- Mi amo no me ha hecho nada, mi amo me quiere por eso me salvo así que por favor te pido que no hables mal de él en mi presencia - Shun se rio de mis palabras.

- A ese idiota no le importas Evan, tu solo eres un escudo, una marioneta que él maneja a su antojo, no eres nada sin tus recuerdos.

- Puedo construir unos nuevos y así...

- Lo importante está en el pasado, lo que yo deseo que tu encuentres se encuentra en tu niñez, en tu pubertad y parte de tu adolescencia, lo que Shon te hizo es cruel, inhumano, cello tus recuerdos para que tu no puedas accesar a ellos, por tanto no sabes quién eres ni tampoco sabes a dónde quieres ir pero no me explico que fue lo que pudo pasar contigo, él no podría entrar a tu cabeza si tu no le das el acceso a ella, ¿Qué te orillo a hacer tal cosa, Evan? ¿Qué pudo ser tan grave como para que estuvieras dispuesto a renunciar a lo que eras? - Me quede pensativo, medite las palabras que había dicho el amo Shun.

- No lo sé - Murmure.

- ¿Qué paso con tu familia?

- Se separó amo.

- ¿Quieres verlos algún día?

- El amo Shon dijo que me regresaría con mi familia si yo le ayudo a encontrar a ese chico, ya sabes, al que el señor Ares quiere conseguir - Explique llamando su atención.

- Tu familia Evan, no existe lazos más fuertes que los que la familia te brinda, si tu deseo por volver a verlos se convierte en una ambición esa ambición te dará la fuerza que necesitas para prevalecer ante cualquiera, si quieres ganarle a Mazikeen has lo que te digo - Asentí un par de veces con una duda rodante en mi cabeza.

- ¿Cuál es tu ambición amo?

- Y tenías que preguntar - Murmuro con fastidio - ¿Ves este dibujo? - Me mostro el retrato que tenía en sus manos - Yo lo hice, él fue el primer amante de John, se podría decir que era mi madre.

- ¿Cómo se llama?

- No lo sé... Nunca lo conocí, además él está muerto. Desde pequeño soñaba con su rostro, siempre creí que era el de John pero me equivocaba - Dejo el retrato en la mesita de noche y aprovecho para recostar su cabeza sobre mis piernas.

- ¿Puedo acariciar tu cabello? - Él asintió. Pase mis dedos por su cabello sorprendentemente era muy suave - Cuéntame de tu pasado amo.

- No hay mucho que contar - Me alce de hombros, quería saber más de él - Viví con la perra de Sayra hasta los quince años. John me abandono con ella cuando era un bebe, conforme crecía empezaba a sentir un gran vacío en mi pecho, mi padre jamás me visito y era frustrante para mí porque yo sabía que mis hermanos pasaban mucho tiempo con mi papá y para mí nunca estuvo, al llegar a los trece años empezó el verdadero reto, Mazikeen inicio con mi entrenamiento, paso un año y ella dedujo que yo era inservible. Y ciertamente era verdad, era débil, un inútil. Shon había sido entrenado por alguien más, en un área totalmente distinta y pasó el reto, Jared fue entrenado un año antes que yo y en seis meses paso la prueba que Mazikeen le puso. Como castigo se me fueron arrebatados todos mis juguetes, mis pertenencias, lo único que pude rescatar fueron una libreta y un lápiz, estuve encerrado en una habitación verdaderamente grande, donde solo había una cama y un gran ventanal.

Libro 2. Sexo, Sudor & Lagrimas (Yaoi/Gay)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora