Libro 2. Sexo, Sudor & Lagrimas (Yaoi/Gay)

19

Evan

Ya habían pasado meses, habíamos tenido decepción tras decepción, en ninguna de las ubicaciones que nos daban estaba Jeremy.

El amo Jared se volvía loco cuando entrábamos a las casas y no se encontraba allí. Civil que encontrábamos con vida solo hacia una pregunta, no recibía respuestas les daba un tiro y el que sigue, al verlo ya no sentía náuseas cuando la sangre brotaba de sus cuerpos, ni mucho menos sentía miedo a la hora de ejecutar a alguien por órdenes de mis amos.

- Vámonos - El amo Jared pasó por mi lado y yo le seguí.

Hoy era el último día en que disfrutaría de la nena en casa, al terminar el día viajaría con el amo Shun con el propósito de encontrarle una familia a Skylar.

- ¿Estás bien? - La voz de Jared rompió el cómodo silencio.

- Si - El me miró por un segundo y sonrió volviendo su vista al frente.

- Sabes que podrás verla cuando tengas tiempo.

- Lo sé.

Volvimos a sumirnos en el silencio. Después de pensarlo por varios minutos creo que no soy el único que va a extrañar a la bebé, todos en casa la consentían y cuidaban de ella cuando la tenían cerca, el amo Jared era quien más se había apegado a la niña, según él era su escape de la realidad.

Por otro lado el señor Ares se encargaba de cuidar a la bebé cuando salía a trabajar con Jared, algunos dicen que abandonaba sus responsabilidades como cabecilla para mantener a Sky contenta.

- ¿Crees que el amo Shun vuelva a desvariar? - Pregunté al amo en un susurro, él se alzó de hombros.

- No lo sé, todo puede pasar.

El amo Shun era diferente, él no era alguien que convivía abiertamente con la bebé, se mantenía lo más alejado posible de ella pero ciertamente tenía sus ratos, cuando Sky no podía dormir y se la pasaba llorando la sacaba sin cuidado alguno de la cuna y se la llevaba por horas, cuando regresaba la bebe dormía profundamente.

Un día por curiosidad le seguí y la llevo al arsenal, él le hablaba con suavidad explicándole las diferentes tipos de armas que tenía, cuáles eran sus favoritas y alguna que otra historia, cuando el amo Shun le hablaba a Sky era completamente diferente, perecía una persona normal sin trastornos mentales.

El amo Shon era un caso total mente distinto, el repudiaba a la niña con todo su ser, no podía estar cerca de ella que le causaba incertidumbre y le ponía de malas.

Al llegar a casa el señor Ares nos esperaba con la niña en brazos, en cuanto me vio comenzó a llorar y a extender sus brazos hacia mí, me negué a tomarla en brazos porque mi ropa estaba cubierta de sangre.

- Los esperaremos en la sala - Asentí despidiéndome de Skylar con un movimiento de manos.

Camine hasta mi habitación para quitarme la ropa y tirarla en una bolsa negra, tome una ducha rápida, me vestí con ropa como y fui a la sala.

- ¿Y Shun? - Pregunte al no verle en la sala.

- En un momento viene, dijo que tenía un par de llamadas que hacer antes de partir.

- Entiendo - Tome asiento y Skylar corrió hacia a mí en una andadera - Hola bebé.

Sky contesto con un balbuceo, acaricié su escaso cabello rubio y la tome en mis brazos, bese su frente y su manita.

- ¿Estás listo para partir? - La voz de Shun interrumpió nuestro cálido momento.

- ¿Ahora?