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Drake

Mis ojos se abrieron hasta no poder más, Shon había llegado a la sala y ni siquiera supe cuándo, pase saliva, él no tenía un buen semblante... Más bien, su cara estaba deformada a causa de la ira.

- ¿No creen que abrieron la boca de más?

Robert ni se inmuto pero Zach ya era otra historia, pude notar que su cuerpo se tensó al instante, temblaba ligeramente pero sin llegar a hacer tan evidente.

- En especial lo digo por ti, ya que no perteneces a nosotros, pequeño traidor - La piel de mi cuello se erizo, su voz era escalofriante. Ahora entendía por qué Zach había empezado a temblar.

- Si así fuera, ¿A ti qué? - Pregunto Robert de la misma forma que Shon - No es como si la historia familiar te importara.

- Puede ser pero no me fio de cualquiera, Robert tu eres un punto y aparte, pero él que está a tu lado no tiene derecho a hablar de las cosas referentes a nuestra familia ni mucho menos cuando se habla de Vicktor - Comento Shon entrecerrado los ojos.

- ¿Te molesta? A ti ni siquiera te importa Vicktor, nunca te has molestado en saber quién era ni cuanto te quería - Habló Zach frunciendo el ceño. Ahora tendía a mirar de un lado a otro para poder leer sus reacciones.

- En eso tienes razón, Vicktor nunca me ha importado ni nunca lo ara, una persona como él jamás tendría lugar en mi vida, prefirió morir y dejarnos solos que huir con nosotros, si tan sólo hubiera sido un poco más egoísta en ese sentido fuera perfecto pero la verdad es que le odio porque abandonó la oportunidad de estar con nosotros, de vernos crecer, fue débil y el serlo demuestra lo estúpido que fue - Esa fue la gota que derramó el vaso para Zach, una pequeña vena resaltaba sobre su frente - ¿Qué? Es la verdad, perrito faldero.

Zach se había plantado frente a Shon tomándolo por el cuello. Abrí los ojos con sorpresa y me apresure a levantarme del sillón, ya que, podía notar como a lo largo del brazo derecho de Aarón se remarcaban sus venas al aplicar la fuerza suficiente como para cortarle la respiración total a Shon, empecé a preocuparme, nadie hacia nada y yo sinceramente no podría parar una pelea entre ellos dos.

- Aarón, suéltalo - Ordeno Robert con voz severa pero a la vez, tranquilo.

- No lo are, él... - Contestó sin apartar la mirada de Shon.

- ¡Aarón! - La voz de Robert retumbo en mis oídos.

- Pe-Pero... - Contestó el nombrado disminuyendo la fuerza con la que apretaba el cuello de Shon.

- Su-el-ta-lo - Robert separo la palabra en silabas haciendo su voz aún más intimidante. Zach relajo totalmente su agarre hasta liberarlo por completo - Ven aquí.

Zach sin negarse se dio la vuelta sumiso, obediente como fiel cachorro, tenía la intención de volver con Robert más se quedó a mitad del camino y después se desplomó a peso muerto, sus rodillas habían golpeado con el suelo más el resto de su cuerpo había quedado suspendido gracias al agarre de Robert.

- Ty pochti ubivayesh' sebya, dorogaya - Robert suspiro levantando el cuerpo de Zach. Si no fuera por Robert, Zach ahora mismo se estuviera desangrado sobre la alfombra ya que, su cabeza se hubiera golpeado en la esquina de la mesa de centro.

- Por un momento creí que iba a morir - Murmuró Shon toqueteando su cuello mientras respiraba lentamente.

- Créeme, si le vuelves a poner una mano encima a Aarón desearas a ver muerto en sus manos porque yo... Me encargaré de darte una muerte lenta y dolorosa si eso vuelve a pasar - Murmuro amenazante, por segunda vez en la noche temía por la vida de Shon.

Libro 2. Sexo, Sudor & Lagrimas (Yaoi/Gay)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora