My precious princess - Justin Bieber ~Spanish Version

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Nezhter

Arrastro mis dedos sobre los tatuajes del brazo de papi.

—Vamos a prepararte para ir a la cama —me pasa los dedos por el pelo.

—¿Qué? —me quejo cuando me pone en mi cuna—. Quiero a papi —me tiembla el labio.

Él sonríe suavemente, acariciando mi mejilla.

—Papi va a ponerse al día con algo de trabajo, babygirl. Pero te veré en la mañana, ¿de acuerdo? Jacey y yo queremos llevarte de compras mañana —me besa la frente.

Me acuesto y me acurruco en mi manta mullida.

—¿Dada? —se da vuelta para mirarme desde la puerta—. Te amo mucho —murmuro.

Una sonrisa cubre su rostro.

—Te amo mucho más, bebé —se ríe antes de cerrar la puerta.

Jason

—¿Puedes despertar a Nezther por mí? —Justin pregunta. Asiento y camino hacia las escaleras—. No querrá levantarse así que asegúrate de abrazarla por unos minutos. Y si está gruñona, dale abrazos adicionales, ¿de acuerdo?

—Sí, señor —digo y camino escaleras arriba. Abro la puerta de Nezther—. Oh, Nessie —canto mientras tiro hacia abajo la barra de su cuna.

Ella gime en respuesta. La levanto, sosteniéndola contra mí.

—Quiero papi —se queja.

—¿No soy lo suficientemente bueno para ti? —intento sonar herido.

—Amo a mi Jacey —besa mi mejilla y luego la pellizca—. Pero quiero un baño —dice y arruga su nariz adorablemente.

Beso su frente.

—Bien, princesa. Vamos a buscarlo.

Cuando llegamos a la cocina, Nessie salta de mí. Ella corre hacia Justin y lo abraza fuertemente.

—Hola, cariño —sonríe mientras la gira—. ¿Qué pasa?

Ella hace manos graciosas, queriendo ser levantada.

—Yo necesito baño —susurra en voz alta. Justin se ríe y asiente.

—Está bien, cariño. Ve al baño. Estaré arriba en un minuto —le da unas palmaditas en el trasero antes de que ella salga corriendo—. Eso fue extraño —se encoge de hombros.

Levanto una ceja hacia él.

—¿Por qué? La has visto desnuda desde el incidente —me apoyo en el mostrador.

—A ella no le gusta que la toque —admite—. Solo cuando quiere que le ponga crema, pero aparte de eso, ella hace todo por sí misma.

—¿Cómo está con todo el asunto del corte? —pregunto, tal vez lo estoy empujando al preguntarlo.

Lo miro mientras su cuerpo se tensa.

—Ella um... Realmente no hemos hablado de eso —murmura.

—Han pasado dos días. Creo que debes asegurarte de que está bien, de que no va a volver a hacerlo —sugiero.

Él sacude la cabeza.

—No estoy hablando de eso en este momento.

Justin

—¿Bebé? —me aclaro la garganta mientras lavo la espalda de Nessie.

—¿Sí papi? —ella responde.

Sonrío suavemente.

—¿Cómo te sientes, mi delicada flor? —muevo la esponja sobre sus hombros.

Ella se encoge de hombros mientras mueve el pez de goma por el borde.

—Me siento un poco triste —admite y asiento así ella no pueda verme.

Creo que estamos llegando a algún lado.

—¿Y por qué princesa? —empiezo a enjuagar su cuerpo.

Ella espera hasta que una toalla está envuelta alrededor de ella y me enfrenta.

—Bueno —comienza mientras froto una loción en su suave piel—. Sé que estás sufriendo y no hay nada que pueda hacer —se queja—. Y estás estresado. Eso hace que Nessie se sienta mal porque no entiende por qué no le dices.

Beso su frente.

—Lo siento, princesa —le susurro—. ¿Qué tal esto? Cuando volvamos del centro comercial, papi y Jacey te contarán todo. ¿Cómo suena eso, bebé?

Una sonrisa pequeña, pero victoriosa, toma sus labios.

—¡Eso suena muy bien! —exclama y besa mis labios varias veces—. ¿Podemos coincidir? —ella se muerde el labio.

Beso su nariz.

—¡Por supuesto! Vamos a ver qué podemos encontrar —le saco el labio inferior de los dientes—. Estoy pensando en cortarme el pelo —le digo mientras abrazo su cintura. Ella jadea.

—¿Qué? ¿Cómo puedes pensar eso?— ella pasa sus dedos por mi cabello. Puedo notar cómo algo hace clic en ella. Se muerde el labio—. No puedo esperar hasta la próxima semana —suspira.

Frunzo mis cejas mientras ella se aleja.

—Bebé... — no digo nada más porque ella me corta.

—¿Esto coincide? —sostiene jeans grises y una camisa azul clara. Me mira y asiento—. ¿Puedes ponerme la crema?

Asiento de nuevo. Froto suavemente el sanador de cicatrices por todo su cuerpo y luego beso sus labios cuando termino.

—YO... —De nuevo, ella no me permite terminar.

—Pronto ad andare quando siete (Lista para irse cuando tú lo estés).

—¿Hablas italiano? —pregunto rápidamente. Ella asiente.

—Yeppers. Ahora vamos.

xxx

Leslie.