No sabía si era seguro estar en ese lugar él solo. Seguramente no lo era. Definitivamente no lo era. Pero había dejado algunas de sus cosas en la habitación que Harry utilizaba en las criptas. Si es que a eso se le podía llamar habitación. El pequeño cuartucho de cuatro por cuatro metros, quizá menos, le había servido de cobijo por ese día y la noche anterior. Lamentablemente no había otro lugar en el que hubiese podido quedarse y tampoco había podido regresar a su casa. Harry se había quedado ahí, con Louis en medio de su celo.
Tomando en cuenta eso, no era nada seguro acercarse.
A Liam le gustaban sus extremidades justo en donde las tenía.
Las criptas, el lugar en donde se llevaban a cabo todas las peleas, era una enorme estructura subterránea; como un pequeño barrio debajo de la tierra. Un lugar que en ese momento bullía con un montón de personas yendo y viniendo, preocupadas por las apuestas... por su dinero. Algunos preocupados por sus vidas. Liam no creía estar en la mira de nadie, pero sabía que no le costaba nada ser precavido.
Harry acababa de llamarlo para decirle que se encontrarían con el padre de Louis, después de las peleas de esa noche. Y si Liam había estado pensando en largarse de ese lugar para pasar la noche en cualquier otro lugar, se había tenido que olvidar de esa idea por un momento. Tenía que quedarse. Harry no le había explicado muy bien para qué se llevaría a cabo aquella reunión, porque, de hecho, ni siquiera él mismo lo sabía. Había un asunto acerca de la hermana de Louis que debían resolver. La muchacha había desaparecido y por lo que sabían, era el mismo padre de Louis quien la tenía. La idea de hacer un trato justo con Mark, a Liam le parecía realmente inverosímil.
No le quedaba más que esperar, en todo caso.
Se tumbó en el viejo colchón de aquella cama destartalada y volteó una vez más hacia la puerta metálica que lo separaba del exterior. Había cerrado con llave ambos cerrojos y se había asegurado de ello más de una vez. No creía que un escritorio fuese a servir de mucho, pero, aun así, había colocado el mueble de madera, como una incipiente barrera, detrás de la puerta. No creía estar siendo exagerado, sabía que aquel era un lugar peligroso y que probablemente nadie ahí abajo, era digno de confianza. Encerrarse y pasar desapercibido hasta que Harry y los demás alfas llegaran, parecía ser lo mejor.
Se sentía intranquilo y no estaba seguro de la razón de su desasosiego, pero desde que había despertado aquella mañana, había tenido una sensación molesta rondando en su pecho. Probablemente haber pasado la noche en aquel desagradable lugar, era la razón de su molestia. Liam nunca había sido un hombre de presentimientos.
Se removió con incomodidad, mientras observaba una vez más su reloj de pulsera. Todavía faltaban un par de horas para que Harry y los gemelos Weiss, llegaran a las criptas. Liam había pensado en irse a esperar a otro lugar; uno menos peligroso. La idea de tener que atravesar el bosque que rodeaba las criptas, en medio de la noche, no le resultaba para nada atractiva.
Cerró los ojos por unos segundos y repasó en su memoria las cosas que habían sucedido en los meses pasados. No le gustaba quejarse acerca de la vida que le había tocado vivir, pero realmente estaría mintiendo si dijera que dicha vida había sido buena. Sus días y los de Harry, habían sido una mierda la mayoría de las veces, pero probablemente nada se comparaba a el caos que había caído sobre ellos en los meses pasados.
Liam seguía sin comprender cómo habían llegado a aquella situación. Antes, jamás se hubiese imaginado que iba a presenciar más de una pelea en aquel lugar. Y ahí estaban. Harry ahora era un peleador. Ambos estaban envueltos en un montón de mierda que no llegaban a comprender. Habían hecho alianzas con un grupo de rebeldes que hasta hacía unos meses, se suponía, eran el enemigo. Se habían convertido sin quererlo en el objetivo de uno de los hombres más poderosos de aquella ciudad.
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ABYSSO: La ciudad amurallada (Libro 1 saga CIUDADES MALDITAS)
FanfictionAbysso es una ciudad aislada, decadente y consumida por la violencia. Con una sociedad dividida injustamente por un sádico rango de castas, ha sido liderada desde hace años, por los miembros de una asamblea de dictadores. El líder de La Asamblea es...