Decir que estaba asustado era poco, desde hace algunos meses había caído en la cuenta de que no sabia que estaba haciendo, me sentía aislado, débil, inútil y sin ganas, aun así nadie lograba sacarme la sonrisa socarrona de mi rostro cada vez que salia de nuevo. Cada día era menos impactante mi aparición, Liam se las estaba arreglando para salir adelante y como no iba a hacerlo, tenia cientos de personas a su alrededor que lo querían y apoyaban de una manera firme y casi heroica, lo digo de esa forma porque sabia que no era fácil, lidiar con un trastorno, lidiar conmigo no era fácil y el hecho de que hubiese tanta gente ahí soportándolo, aun mas que eso, sosteniéndolo era un acto heroico.
No quería admitirlo, me rehusaba a hacerlo, pero lo sabia, yo siempre supe que Liam me había creado para soportar lo que el no pudo de niño y eso solo me había orillado a hacerlo peor, el idiota pensaba que no merecía ese sufriendo así que me encargue de darle uno nuevo, el mismo, es decir yo. Sin embargo la triste verdad de todo eso era que...
Yo no tenia espacio en su vida.
Ni en la suya, ni en la de nadie.
Poner en palabras un enfermedad mental es algo complejo, sabes que lo que pasa no esta pasando realmente, esta todo en tu mente y sin embargo lo sientes y te afecta, hasta que se supera o no, pero ese es otro detalle.
Yo podía ver, escuchar, tocar y hablar, podía sentir genuina mente cosas y eso era real, pero paradojicamente yo no lo era, apenas si Liam tomaba una pastilla yo me iba, Eso me hacia una persona real? Podría tener derecho a algo? Podría tener derecho a una vida? La respuesta estaba a debate. Nunca fui otra cosa que problemas, solo atentando con el sufrimiento y ahora luego d varios años quería menos, quería nunca haber tenido que pasar por esto.
—Viste las noticias?
Gemma llego conmigo dándome una cerveza mientras nos sentábamos en silencio en el patio de su casa, era de noche y aparentemente estaba sola o no estaríamos tan expuestos.
—Una chica local murió, no?
Gemma asintió con tristeza.
—Era amiga de Liam.
Dijo con un tono extraño, parecido a tristeza, preocupación y quizá culpa.
—Una lastima— Ella asintió de nuevo y yo di un sorbo a mi cerveza.
—Hay mucha gente loca en el mundo en estos días.
—A que te refieres?
Gemma pensó un poco y luego saco su celular donde busco algo que no le tomo mucho tiempo encontrar, la pantalla se ilumino en mi cara y comencé a leer el articulo, ya me era familiar, hace un par de años se había extendido una noticia bastante trágica, una joven había muerto en un tiroteo ocasionado por su misma madre que le disparo sin piedad alguna y días mas tarde el padre había desaparecido y luego encontrado muerto en un bosque, se desconocía el culpable pues la madre se había suicidado una vez que mato a la hija, fue un caso bastante extraño que por algún motivo a Gemma y a mi nos intrigaba, probablemente por el hecho de que cuando la policía llego a donde había surgido el tiroteo el novio de la chica muerta se rehusaba a abandonar el cadáver de la chica, una imagen bastante desgarradora así como conmovedora, se rumoreaba que la chica tenia ataques de pánico a causa de su esquizofrenia y el pobre chico la ayudaba en lo que podía, con el caso del atentando de la madre uno podría decir que la chica no era en realidad la que estaba loca.
—Se averiguo algo del asesino del padre o del chico?
—No, nunca se supo nada del asesino y en cuanto al chico parece que entro a un hospital psiquiátrico.
—El tener amor y luego perderle de una manera tan horrible enloquece a cualquiera.
—Si algo aprendí de esa historia es que a veces a quienes señalan como locos no lo son realmente. Esa pobre chica y su novio pudieron vivir tranquilos de no ser por esa horrible mujer que los separo de la peor manera, fue culpa suya cada gota de sangre que se derramo solo por no quererlos juntos.
La rabia y el dolor en su voz me mantuvo alerta, porque esos podríamos ser nosotros aunque de una manera ligeramente distinta. El dolor de Gemma era algo que había notado al mismo tiempo que mis ganas de morir aumentaron, sentía que le estaba arruinando la vida también a ella, solo esperaba que cuando yo me fuera ella pudiera seguir.
—Están haciéndote desaparecer, te están matando Liam.
Ella me miro con ojos llorosos y lo único que hacer fue abrazarla, el contacto con su piel y la mía quemaba, al igual que cada vez que me llama por ese nombre, por que...tampoco era mio cierto? Nada lo era.
—Ellos solo hacen lo correcto
—Liam por favor no...
—Lo siento, solo no quiero complicar las cosas. Estoy tan cansado.
—De que hablas? Oh Dios estás llorando.
—Es solo que...no soy una persona Gemma.
—Liam tú...
—No! Déjame terminar. No soy una persona pero en estos últimos años me he sentido como una y tengo miedo Gemm.
—Liam...
—Todo el tiempo me digo a mi mismo que no tengo que interesarme, que no me preocupo por ti porque se que voy a dejarte en cualquier momento...pero me siento tan solo, y por más que se y me lo repito todo el tiempo de que no existo la verdad es que...pienso en ti todo el tiempo y quiero tener una vida, quiero lo que Liam tiene y poder decirte que te amo pero está tan mal al mismo tiempo que quiero morirme justo ahora. Lo siento Gemma no puedo quedarme.
Esa fue la ultima vez que la vi con ese brillo esperanzado.
"Tu eres a la que yo quiero hasta que muera solo"
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Mi mente se mezcla con demasiadas novelas que tengo en mente y que escribo continuamente pero que no publico porque pues nadie las lee y eso es muy sad.
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Mental Hospital |Liam payne y tu| TERMINADA #Libro 1
Fiksi PenggemarCuando la señorita _________ Cred llego al instituto mental Towers para trabajar no estaba conciente de lo que le esperaba tras esas puertas soldadas. ''Aqui estan las personas con las que nadie querria encontrarse jamas'' No, y no estaba preparada...