·~Nueva Vida~·

"Gatos peculiares"

Mochi se encontraba a unos cuando metros del enorme árbol de Sakuras, caminando con preocupación, su cola estaba levantada y erizada, este se detuvo frente al árbol para sentarse y luego mirar hacia el horizonte para luego preguntarse a sí mismo:

—¡¿Cómo es que llegaron aquí?¡—Se una preguntaba una y otra vez para luego agregar—El muchacho ni siquiera recuerda algo aun.

En ese momento otra presencia se detuvo frente a él, se trataba de Kuro el gato de Kata, el cual lo observó un momento al igual que Mochi lo observaba a es, ambos moviendo sus colas de un lado al otro, el felino negro por fin rompió el silencio.

—¿No eres un gato normal verdad?—Preguntó con un tono desinteresado y flojo.

—Así es Kuro, no soy un gato normal—Contestó Mochi con tranquilidad—Y por lo que veo tu tampoco lo eres y comienza a tener sentido porque llegaron aquí.

—Lo único que sé, es que ese vampiro me buscaba a mí—Dijo en un bostezo— ¿pero porque te buscaban a ti?

—Creo que cada uno tiene una misión, yo cuido de ese chico, pero él no tiene ni idea, piensa que soy un gato parlante y ya—Comento sin contestar la pregunta de Kuro.

—Una diferencia entre tú y yo—Dijo este para luego acostarse— Kata si sabes quién soy y lo que soy.

—¿Lo sabe, en verdad lo sabe?—Agregó sorprendió Mochi.

—¿Porque crees que actuó de esa forma cuando el vampiro apareció?—Bostezo un poco para luego agregar— tuvo suerte de que Belkia no la reconociera.

—Kuro si Kata es consciente de todo debo hablar con ella—Agregó rápidamente ignorando el comentario de Kuro— Dile que debo hablar con ella lo más pronto posible.

—Está bien, dime cuando y yo se lo comentare, con un poco de suerte su agenda no estará tan ocupada—Tras terminar de decir estas palabras se levantó comenzando a caminar— Vamos camina ella no puede estar mucho tiempo separada de mi—Dijo con voz monótona.

—Los espero esta noche, en el callejón que queda al norte en la división de camino—Se levantó para seguir al pequeño gato—Soy un gato puedo ir y venir como si nada.

Caminaron unos cuanto minutos y encontraron a los dos humanos, Kata estaba sentada debajo de un árbol tomando un poco de agua, mientras que Haku seguí buscando por los alrededores al notar a los dos felinos llegar, este los acaricio un poco a ambos y les dio una galleta a cada uno.

—Gracias por encontrarlo Kuro—Agradeció Haku—Pero no tenias que morder a Kata.

Kuro solo tomó la galleta con la boca y se fue caminando para acostarse en las piernas de Kata como si nada, mientras que Haku tomaba a su gato en brazos.

—Claro Kuro actúa como si no hubiera pasado nada—La voz de Kata sonaba algo molesta.

Kuro soltó un maullido mientras comía su galleta, luego de eso Kata lo metió en su maletín dejando la cabeza del felino fuera para que pudiera respirar y se levantó más tranquila, acariciando a Mochi.

—No nos asustes de ese modo—Le dijo esta al siamés para luego mirar a Haku— Ya me tengo que ir, ten cuidado al volver a casa, nos vemos otro día—Y antes de que este pudiera contestar se fue corriendo.

Este se despidió con la mano mientras miraba a la chica alejarse de él, luego su mirada cayó en el gato que sostenía en brazos

—Bueno Mochi Regresemos a casa—Dijo al empezar a caminar—¿Eso que paso tenía algo que ver contigo?

Mochi no contesto y solo lesbio la mirada

***

Kuro se encontraba en la cama acostado en una almohada más grande que su pequeño cuerpo de gato, mientras que frente a él se encontraba Kata, la cual tenía los brazos cruzados y una mirada seria, algo que no le importaba mucho a el felino en realidad, este noto el pañuelo el cual adornaba la mano de la chica, cubriendo la mordida que le había provocado.