Recuerdo que...
Todo empezó por un sueño...
Un sueño que resultó ser una pesadilla...
Y a veces quisiera rendirme...
Pero sé que él me quiere con vida...
Y es ahí cuando recuerdo que debo seguir...
Para ser esclava de mis sentimientos...
Ya q...
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POV. Lectora.
Pasaron varios meses desde la ida de Vanko, y poco a poco me sentía más calmada y a veces me preocupaba hasta el punto de tomar una copa de vino para hundirme en la culpa y en mi miserable vida.
Llegaba hablar con mis camaradas, reíamos y todo, aunque la situación actual de Parladis estaba mal, y se estaba buscando la alianza de varios gobiernos.
Y sobre mi situación, mejoro en todo sentido, bueno, eso creo, porque empece a socializar más, y obedecer mejor las órdenes que me daban e incluso hablaba más con los superiores por el hecho de ser de afuera, ayudaba con lo que podía.
Justo ahora me encuentro afuera del cuartel, viendo como Ymir subía al carruaje que la llevaría a la capital, decidió pasar lo que le queda de vida con Historia.
Me acerqué unos pasos para verla de cerca, algunos también estaban, para despedirse de ella, Sasha, Connie, Jean, etc, y de todos ellos yo estaba al fondo, viéndola, sacudiendo la mano en despedida, y ella me vio, y yo sonreí.
—¡Ey! ¡Linda! —me llamo y yo atenta la miré—. Sigue con tu deber y no metas la pata.
—Eso haré, y cumple tu sueño—dije entre risas, porque Ymir sabía a que me refería.
—Claro que me casaré con ella —De alguna forma me sorprendió que lo dijera frente a todos, pero me sentía calmada y confiada de que lo haría.
Ella ingresó, y el carruaje avanzo, lo más seguro era que ya no la vería otra vez. Pero era una buena causa, ella finalmente sería feliz con Historia, quizás la Reina lo tomé como broma, pero Ymir no lo ve así.
Con calma, me fui del lugar para ir a la oficina de Erwin, había como tipo reunión, y mientras subía las escaleras acomodaba mi flequillo detrás de la oreja, mi cabello creció, y era molesto.
Toque la puerta para pasar a la oficina, y justo abrió el comandante, pedí permiso e ingrese.
—Pasa, pasa, Linda —comento Hanji quien estaba de pie cerca de la ventana—, llegaste un poco antes que de costumbre.
—Eso creo —respondí rápidamente y me percaté que faltaba el capitán, Moblit y Eren. —¿y los demás?
—Ya llegarán.
Asentí con la cabeza y me dirigí al lugar que siempre me siento cuando hay reunión, pero Hanji se abalanzó en mí he hizo que cambiara de rumbo hacia la ventana, apuntando hacia un grupo de personas, eran los chicos que se despidieron de Ymir.
—Como van creciendo, pasaron de ser niños a adultos —comento la peli castaña, por un momento quede con la cara de “wtf” pero al verla algo llego a mi pecho, en su rostro se podía ver tristeza con algo de nostalgia—. Perdieron la vida tranquila y juguetona que merecían.
—Lo sé —añadí después de soltar un suspiro pesado—. Sus vidas tranquilas fueron arrebatadas por los conflictos del pasado.
—La tuya también, y de muchos niños más lo sera si no cambiamos nada.
