Parte 4

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Se levantó a las seis, la rutina de dos años ya le obligaba a no seguir en cama más tarde de la hora establecida. Se dirigió al baño para asearse, una vez listo salió de la habitación y busco ropa para el día. En la cama una persona se acomodaba.

Una vez en la cocina empezó a pelar frutas para hacer un batido, saco huevos, pimientos y un poco de jamón para hacer un omelette. Ya con eso listo, preparó un pocillo de avena con yogur y arándanos, para finalizar preparó algunos waffles con mantequilla de maní.

Colocó todo en una bandeja, agrego un jarrón delgado donde colocó una flor simple, un vaso de jugo recién exprimido y un poco de miel además del servicio y unas cuantas servilletas. Con eso listo se dirigió a la habitación para despertar a Steve.

Llevaba tres meses viviendo con el alfa en un departamento, conservaba en su cuello el collar que le dio su padre por lo que no corre ningún peligro de que fuera marcado antes de tiempo o por un tercero.

En un principio el convivir juntos era difícil, cada uno tenía mañas, sus rutinas, sus gustos y el tener que compartir su tiempo e intimidad con otro era... molesto, por decirlo de alguna forma.

Conoció a Steve con las visitas que hacía en casa de Howard. Se veía como el alfa perfecto, sin olvidar esa apariencia musculosa de hombre rubio con ojos azules, todo un partido para la vista. Era educado, amable, se preocupa por sus conocidos, pero también actuaba como un alfa, por lo que ejercía cierta presión en el omega y lo debía tratar como tal.

Aquello molestaba a Tony, porque creía que en el fondo algo ocultaba Steve, era... demasiado perfecto. Si había un molde desde donde se hacían los alfas, claramente Steve Rogers fue el primero, con el pasar de unas dos semanas supo lo que el rubio ocultaba.

Era temperamental, sus ideas eran propias, no compartía todo lo que su padre pensaba y estaba muy al pendiente de un amigo omega, siendo que el omega que todos sabían sería de Steve, era el propio Anthony Stark.

¿Entonces porque la preocupación por Bucky? ¿Por qué traerlo a la casa cuando este discutía con su familia? ¿Por qué inmiscuirse en la familia de Barnes?

¿Por qué tener ideas tan contrarias con el propio Tony? ¿Por qué siempre compararlo con Bucky?

Eso último era lo que más cabreaba al omega, ser comparado con otro. Constantemente Steve mencionaba que "debía ser más como Bucky", que "Bucky no hubiera hecho aquello", "Bucky no se equivocaba", "Bucky respetaba a un alfa", "eso no lo pensaba Bucky", "Bucky sabía manejar mejor la casa", "Bucky sabía cómo tratar y complacer a un alfa".

¿Eso lo sabes por experiencia propia?, era lo que hubiera deseado preguntar a Steve aquel día, pero sabía como respondería el rubio estando molesto. Como todo un alfa con el derecho de hacer lo que quisiera con su omega, con el derecho de educarlo como mejor le pareciera, lo que significaba solo una palabra y un actuar para todos los alfa, golpes.

Era complicado convivir con dos personas. Por un lado ese alfa perfecto que era conocido fuera de las puertas de su casa y sobre todo en presencia de su padre, aquella versión de Steve que lo trataba simplemente como un omega, ni siquiera como un ser humano; la otra versión era el propio Steve, aquella persona con errores y equivocaciones, que pensaba fuera de la caja de cristal algunas veces y que tenía una extraña obsesión con su amigo, aquel que al parecer y sin darse cuenta había escogido a James Bucky Barnes como su omega.

Era a la conclusión que llegó una tarde de lluvia mientras veía a Steve junto a Bucky a través de la ventana. Cómo cuidaba al omega de la lluvia y lo iba a dejar en auto a su casa, no soportaba tener que enviarlo por transporte público ya que algo podría pasarle, después de todo Bucky era un omega no marcado que tampoco presentaba collar, pero si tenía la masa muscular y fuerza para defenderse, contrario a Tony que era un poco más débil. Otra razón para no soportar a Barnes en su casa.

Si bien Barnes se comportaba como un omega "perfecto", estaba sin marcar, tenía su misma edad y estaba estudiando. No era en la universidad, pero estaba haciendo algo, algo que a cualquier otro omega le era negado.

¡¿Por qué?!

Era malditamente injusto.

Era mucho más inteligente, quería revolucionar el mundo con sus ideas, pero las puertas le eran negada... Pero claro, Bucky no tenía ningún maldito problema de hacer algo más con su vida y no solo tener que sobrevivir en una maldita casa.

¿Debía comportarse como aquel omega? ¿Convertirse en lo que su padre esperaba, en lo que cualquier alfa desearía tener?

¿Eso... no sería rebajarse?

No deseaba ser como el resto de los omegas, sino que estos sean tratados igual que los alfas, pero aquellas ideas solo le trajeron castigos por lo que no las volvió a mencionar frente a su padre y prefirió callar a mencionar aquello a Steve.

Ocultaba tantas cosas en su interior.

[...]

Tony observó su reflejo en el espejo del baño, estaba cansado de todo. De ser un omega, de su apellido, tener que vivir con Steve, tener que representar un papel, ser una marioneta.

Sus brazos presentaban algunos moretones, claramente de las manos de Steve al intentar hacer entrar en razón de que como un omega, solo debía preocuparse de la casa, no tener ninguna libertad. Agradecía que no lo golpeara como su padre.

Aún recordaba la vez que despertó en el hospital, jamás vio a Howard Stark tan preocupado de su propio hijo. Cuando llegó el médico a la habitación y le explicó su estado, entendió a qué se debía la preocupación de su padre.

Con las heridas internas que le provocó casi lo deja infértil.

Desde aquella vez su padre lo golpeaba menos, pero el dolor seguía allí presente. Latiendo de debajo de la piel algunas veces.

Ya no era necesario que lo agrediera físicamente, ya su mente era capaz de revivir cada dolor, cada golpe, cada fractura, como le faltaba el aire en algunos momentos y esa sensación de claustrofobia al ver solo sombras negras antes de desmayarse.

Acumulo un poco de agua en sus manos y luego la llevó hasta su rostro, necesitaba despertar y dejar de dar vueltas en aquellos pensamientos tan deprimentes que no le servían de nada.

Ya no sentía que su vida valiera la pena.

En un principio esperaba contar con Steve para que le pudiera ayudar o al menos comprender cómo se sentía, pero se dio cuenta que estaba completamente solo.

Ya ni a Bruce tenía, el beta tuvo empezó a viajar para ejercer como "médico" en países donde se le necesitara, más por ser un desconocido más que el querer ayudar. Entendía las razones de Bruce, desde la vez de Betty ha tenido bastantes recaídas que ya algunas personas lo empezaban a considerar peligroso.

Lamentaba haber perdido contacto con su amigo este último año, le hubiera encantado ayudar para hacerlo cambiar de parecer respecto de irse del país, también se arrepentía de no haberlo podido despedir aquella tarde cuando se presentó en casa de su padre.

Ese día tanto Steve como su suegro estaban presentes por lo que el alfa habló con el beta en representación del omega y tomando el mando de la relación que empezaría a tener con el omega.

No sabia que hacer con su vida y la rutina presente en la que estaba insertado cada día lo empezaba a destruir de a poco, su cordura se estaba viendo afectada.

Deseaba volver a los tiempos en donde era un niño y su madre le daba todo lo que podía dentro de lo posible, el cómo construyó a dum-e el cual quizás estaría en alguna chatarrería gracias a su padre.

Pero al recordar a su madre se sentía pésimo por la situación actual en la que estaba, ella no lo crió para esto. Quería que se convirtiera en alguien grande, alguien que marcara una diferencia, ¿pero cómo?

Apoyó los codos en el mueble y oculto su rostro entre sus manos. Estaba intentando retener algunos sollozos, no de tristeza sino de impotencia con su situación. No sabía cómo podía cambiarla, no tenía apoyo de ninguna parte.

Anthony Stark se encontraba solo y perdido.

Eres mi omegaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora