La Nueva Reencarnación

El relato de un visitante

En lo que parecía que iba ser una noche pacífica para nuestro/a protagonista, repentinamente se vio completamente interrumpido por la inesperada visita de un desconocido personaje que insistía en querer ver hablar con Noelia, quien podría ser este sujeto misterioso?

Narra Noelia

Me frote los ojos varias veces, simplemente no podía creer lo que estaba viendo, el misterioso visitante que dice conocerme y apareció ante mi puerta, es un.... gato humanoide!

Tiene el pelaje naranja con rayas blancas, viste un atuendo que me recuerda a un noble europeo antiguo de color anaranjado intenso y usa también en sus patas traseras zapatos negros, su cara era más humana que animal debo decir, entonces, refinadamente me dijo:

-Buenas noches, se que esta hora no es la más adecuada para una visita, pero debido a contratiempos solo pude llegar a esta hora, ya que en verdad deseo charlar con usted en persona, y si no es molestia podría pasar entonces pero si no quiere, le doy mi palabra de que nunca más sabrá de nuevo de mi, que dice?

-.....

No sabía quien era, habla de manera muy educada y suave, incluso creo que si utilizara las palabras adecuadas podría convencer a cualquiera. Pero sigo sin entender de donde me conoce, de haberlo conocido, aunque haya sido por pocos momentos hacía mucho, se que lo recordaría, pero inexplicablemente sentía que podía confiar en él, con más razón debo de averiguar su identidad para así esclarecer todas mis dudas.

-Entonces señorita.... lo conoce o no?- Pregunto Elena preocupada y aparentemente queriendo sacar algo de su bolsillo, no quería saber que era sinceramente.

-Ah!, si, si, verá, fue hace mucho cuando durante una de mis salidas con mi madre en que nos chocamos entre si, momento en que tras disculparnos mutuamente entablamos una breve pero agradable conversación, en la que antes de irme le dije que podía visitarme cuando pudiera- Dije nerviosamente tratando de sonar convincente.

Elena parecía tener dudas de acerca de mi historia, ella repentinamente solo suspiro, y la expresión de duda en su rostro cambió a una más relajada, lo que tome como una buena señal, supuse que me creería ya que hasta este momento nunca le he dado motivos para desconfiar en mi y mi palabra, detesto en verdad aprovecharme así de la confianza que otros tienen hacia mi pero a veces es necesario.

Por lo que ella dijo con cierta resignación:

-Ok, en ese caso- Mirando al chico gato- puede pasar entonces sr.....?

-Markuv, Markud Beckster- Dijo él mientras hace una leve reverencia.

Elena se puso al parecer algo sorprendida no solo por el hecho de que este gato tuviera nombre si no también un apellido, y la verdad es que yo igual.

-Si, sr. Beckster, puede pasar- Dijo mientras hace le da la bienvenida con el brazo.

Él entro, Elena trato de simular una sonrisa pero era difícil, ella no sabía que especie era este gato humanoide y menos de lo que era capaz de pero su confianza ante hacía su ama era mayor que esa incertidumbre que la molestaba, por lo que, siguiente su protocolo habitual para las visitas, incluso las inesperadas, diciendo educadamente:

-Entonces, señorita Noelia, quiere tener su charla con el joven Markud aquí en la sala o en la sala de descanso y reunión para invitados?

Yo la mire, y me quede en silencio por unos segundos, normalmente hubiera escogido la sala para algo así, pero supuse que no podía arriesgarme de que lo que íbamos a hablar pudiera ser escuchado y recordé que los muros de la biblioteca son los bastante gruesos para evitar que el sonido de dentro no salga al exterior, era la opción más lógica.