Dulce justicia y una hazaña escalofriante

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Narra Noelia

Han pasado tres días desde Markud se ha unido a nuestro pequeño grupo, las cosas han resultado bastante bien, y a pesar de que hemos logrado evitar que Marina no termine con las demás vidas del Markud con sus desmedidas muestras de afecto, pero aparte de eso formamos en poco tiempo un fuerte vinculo, jugando y disfrutando la vida, incluso cuando hacemos pequeños recados como "deber" de nuestro grupo, aunque en su mayoría consistió en ayudar a barrer entradas de casas, lo cual siempre he odiado hacer tanto en Hasia como en la Tierra.

Y durante estos días posteriores a nuestra visita a ese sitio bajo tierra me acorde de aquella misteriosa arma que Rusty halló y le pedí que dejará verla, lo cual hizo. Una vez la tuve en mis manos pude notar que emanaba de ella algo, muy seguramente mana, debía de ser un Sheruan, pero por algún motivo no lo podía definir completamente como tal, pero si ese era el caso, que se supone que es? y hablando de eso he querido revisar los tapices anuria que hallamos bajo el suelo pero Rusty no desea revelar donde los oculto, algo que también les prohibió hacer al resto, alegando que los veríamos "en el momento más optimo".

Me desperté, y por algún motivo me sentí de muy buen animo, principalmente porque no volví a tener esa pesadilla luego de varios días, por lo que pude tener un muy revitalizante sueño.

Levantándome de golpe de la cama fui a toda marcha hacia el comedor a desayunar, y con los ánimos que tengo lo hice poco antes de que Elena viniese como de costumbre a despertarme, y justo me tope con ella en el corredor hacia las escaleras.

-Oh señorita Campbell, precisamente iba a verla -Comento Elena levemente sorprendida.

-Ha! es que me desperté tan animada que decidí levantarme antes y ahorrarte un poco las molestias -Dije jovialmente.

Elena solo rió por mi comentario.

-Gracias señorita pero sabe bien que no es ninguna molestia para mi, dejando eso de lado mejor vaya abajo que su  desayuno se esta enfriando -Dijo sonriendo.

-Ok~!

(...)

Mientras desayunaba me fije en Elena quién note que se encontraba cerca mio, aunque suele hacer eso a diario, esta vez esta ya creo empezando a invadir mi espacio personal. Eso me hizo volver a mi mente su inusual reacción que tuvo cuando me dio esa pesadilla, voy a tratar de aclarar esa duda ahora.

-Amm, Elena....

-Si? que necesita señorita?

-Nada, es que quisiera saber.... porque reaccionaste exactamente de esa manera tan "extrema" cuando grite por mi pesadilla"?

Apenas oyó mi pregunta, su rostro perdió su color, empezó a sudar, parecía estar en shock o algo cercano a eso.

-Te encuentras bien Elena? -Pregunte incomoda y preocupadamente.

-Huh!? Ah por supuesto! es solo que su pregunta me tomo un poco por sorpresa. Nada más actué así p-porque... usted sabe que si algo malo le pasara su madre se enfurecería muchísimo conmigo y el resto -Respondió muy nerviosa.

Es una gran sirvienta pero una como actriz arrasaría con los Premios Razzies (Premio a lo peor del cine)

-Eso lo se bien, pero pare-

-Por favor alto señorita!

-....!?

-Si en el algún lugar de su corazón me tiene una mera pizca de respeto ya no me pregunte más al respecto por favor! -Sollozo suplicando.

Nunca antes había visto a Elena así, tal parece que me estoy metiendo en algo demasiado fuerte y doloroso para ella, lo mejor será ya no indagar más en el tema, al menos hasta que este dispuesta a hablar de eso algún día.

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⏰ Última actualización: Apr 07, 2019 ⏰

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