Un amor complicado

22

Busco como loco a Alex pero no la encuentro, en los salones, en las canchas y casi entro a los baños de mujeres. Ansel me ayuda pero al encontrarnos en un pasillo no tenemos nada.

-Tengo que encontrarla, necesito encontrarla.

Él asiente y entonces volvemos a la búsqueda; voy por debajo de las gradas y por encima, en cada salón, voy al teatro y a los vestidores. No la encuentro y no responde las llamadas ¿Porqué haría eso? Primero darme la carta y después desaparecer. Me siento en primera fila y le marco una vez más; desde el teléfono eschuco el primer tono, pero no es lo único que escucho. La canción Don't Stop de 5SOS se escucha a todo volumen por todo el auditorio.

Busco de quien proviene pero cuando cuelgo la canción cesa. Vuelvo a llamar y la misma canción se escucha.

-Alex sé que estás aquí -hablo después de volver a colgar-, Alex sal o te encontraré. No tienes porqué esconderte.

No obtengo respuesta pero sigo caminando. Me tiro al piso y comienzo a "Gatear" o más bien a arrastrarme pecho tierra, el auditorio está oscuro pero logro distinguir una persona algo agachada detrás de la última fila, la encontré.

Comienzo a cantar Perfect, la canción que canté la primera vez que fuimos a un baile juntos. Ella se para y le quito la ridícula peluca marrón que tiene en su cabeza, a la mitad de la canción le quito una bufanda que trae envuelta en su cuello y antes de finalizar la canción le quito los lentes y me los pongo, son falsos.

Sé que es el momento correcto para besarla así que sin más la beso, una de mis manos se coloca en su cuello y mi pulgar acaricia parte de su mejiila con delicadeza. Sus brazos rodean mi cuello y pasa sus dedos por las hebras de mi cabello, lo que provoca que una corriente recorra mi cuerpo; sus labios se sienten suaves y eso me vuelve loco. Finalizo el beso, no quería pero tengo que hacerlo.

Suena el timbre indicando que hay que ir a nuestros salones.

-Hay que irnos -pronuncia.

Sus labios tiemblan, ambos nos alejamos unos centímetros. Había tirado la bufanda y la peluca así que me agacho para recogerlas y las extiendo para que las tome.

-Creo que esto es tuyo -sonrío de lado.

-Gr-gracias. Me voy, hablamos luego.

Y sale corriendo.

-Necesito preguntarte algo.

Grito pero creo que ya no me escucha. Salgo del auditorio y antes de entrar al salón que me toca paso a mi casillero por unos cuantos cuadernos.
Toco la puerta, la maestra ya inició la clase.

-Perdone maestra, se me hizo tarde.

-Mendes, no es esta tu clase.

-¿Ah? Hoy es Lunes.

-Mendes hoy es Jueves.

-Oh, yo sabía eso y le quería jugar una broma -contesto avergonzado- y se la creyó.

-Tal vez estás enamorado, una chica especial...

-Tiene razón, estoy enamorado y es de alguien preciosa. Me voy.

Los pasillos ya están casi vacíos y yo olvidé a que clase tenía que ir así que vuelvo a mi casillero para revisar a que clase debo ir pero de todos modos tal vez ya no me dejen entrar.

-Mendes -esa voz- ¿Porqué no está en su clase?

-Director Medina.

(...)

-Ethan Mendes ya no volveré por más que quieras, el director que está es un sustituto en lo que llega el director Higenton.