Capitulo 25-Sin ti

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Aitana
Y ya habían pasado tres semanas, nuestras vacaciones de navidad habían terminado, tocaba volver a la universidad.
No he vuelto a hablar con Luis, me mando un wathsapp pidiéndome perdón, pero que no podía estar con nadie ahora, que si confiaba en él le esperara, no le conteste, no sé si quiero esperarle, no sé si puedo esperarle sin saber a qué espero.
En nochevieja me líe con Vicente, mi ex, pero no llegamos a nada, solo cuatro morreos tontos, pero la verdad que creo que fue por rencor más que por ganas.
No bebí más que una copa de cava, que no me gusta y me fui a casa, la verdad que no tenía ganas de salir.

Y ahora toca la vuelta a la realidad, a la uní, a mi nuevo hogar, con Amaia, a nuestra habitación.

Cepeda
Hoy vuelvo a Madrid, la operación salió genial, parece que le han dejado todo limpio y está más animada al verme bien, o intentar aparentar que me iba bien todo.
He estado todo el tiempo con ella, solo salí en nochevieja un rato con mis amigos a ahogar mis penas en roncolas.

Aitana
He dormido bastante bien, echaba mucho de menos a Amaia, y hemos dormido juntas en una cama de 90, apretaditas pero genial.

Ahora estamos en la universidad, en el descanso de las 10:00.
En la máquina del café:

-Aiti cógete uno anda que no has desayunado nada
-No de verdad que no tengo hambre
-Estas muy pálida, ¿Te encuentras bien de verdad?

Antes de que me diera tiempo a contestar estoy corriendo hacia el baño a vomitar, Amaia va detrás mío y me sujeta el pelo

-Aitana estas mala, o te debió de sentar algo mal ayer o algo, vamos a la resi anda.

Nos vamos a la residencia y me acuesto después de beber agua, la que Amaia me ha obligado a beber

Me despierto a la hora de comer y como pan y poco más, no tengo hambre.

-Aitana, ¿Cuanto tiempo llevas comiendo así?
-No se, Estas navidades no he comido mucho la verdad, pero ahora tengo la tripa muy revuelta, no me apetece nada de verdad
-Vamos a ir al médico
-Que no Amaia que estoy bien de verdad
-Aitana vamos a ir o llamo a tus padres
-Vale, vale

En la habitación por la tarde;

-Aiti no me quedan tampones, ¿me dejas?
-Si toma

Cojo la caja y veo que está sin abrir

-Aitana no me asustes, ¿y esa cara?
-Amaia, tengo esta caja sin abrir desde finales de noviembre
-Ay dios Aitana no puede ser
-Amaia ¿que hago?
-Voy a comprarte un test de embarazo, ves bebiendo agua para mear más
-Amaia tengo mucho miedo
-Tranquila, vuelvo enseguida
-Vale

Me quedo estática sentada en el suelo, llorando, mirándome la tripa que incluso está más delgada que de normal, no puede ser, no puede ser, no tengo relaciones desde hace un mes, me abría dado cuenta antes, será que por no comer se me ha retrasado la regla, no puedo estar...

Amaia llega pasados 10 minutos, llega con la respiración entrecortada de correr y con cara de asombro y preocupación aún.

-Ven que te acompaño a mear al baño

Vamos y meo en el cacharro ese, después volvemos a la habitación y lo dejo en el escritorio mientras nos sentamos en la cama a esperar a que pasen esos dos minutos que se nos antojan eternos

1 minuto...

Me tiembla la pierna

2 minutos

Pita la alarma que había puesto

-Amaia míralo tú porfavor

Lo coge, no puedo describir la cara que pone

-Aitana... estás embarazada

Boom, no me lo esperaba, quería pensar con todas mis fuerzas que no podía ser.

-Aiti tranquila, puedes abortar y no pasaría nada
-Amaia no sé si sería capaz de abortar, este... este bebé no es solo mío, tiene un padre, y aunque sea un gilipollas creo que debería decírselo
-Mira vamos a ir al hospital por urgencias a que te hagan una ecografia para aclararlo todo, y de paso si está allí te ayudo a hablar con él y si no pues ya veremos lo que hacemos.
-Gracias Amayi
-Te quiero mucho Aitana

Vamos de camino al hospital en taxi, voy mirando por la ventana pensando en todo, en que he hecho y en que voy a hacer, cuando me voy a desabrochar el cinturón me sorprendo con mi mano derecha sobre mi vientre, me resbala una lagrima por la mejilla, no sé si voy a poder deshacerme de él.

Amaia paga al taxista y entramos corriendo al hospital, me atienden en seguida, y más al ser tan joven e ir asustada

Me tumbo en la camilla, me ponen un gel helado y me pasan el ecografo, Amaia está a mi lado.

-Mira bonita, esa bolita es tu bebé, estás embarazada de 5 o 6 semanas, voy a ponerte el latido

Esa bolita, es mi bolita
Cuando empieza a soñar el latido sonrió inconscientemente, tengo una cosita viva dentro de mi, con ganas de vivir, y no me siento capaz de quitárselas

Oímos la puerta abrirse rápidamente, giró la cabeza y veo a Luis, con su uniforme de enfermero, el pelo más largo de lo normal y las mismas ojeras que la última vez que lo vi, mira a la pantalla y después me mira confundido

-Aiti, te espero fuera, lo siento por avisarle-Me susurra Amaia y sale junto a la enfermera que me ha hecho la ecografia, mientras la imagen de mi bolita sigue en la pantalla-

-Aitana ¿Que significa esto?
-Luis yo...
-¿Es mío?
-Si

Se queda de pie mirando embobado a la pantalla, no tardan en aparecer lágrimas en su rostro, atascándose en su barba ahora bastante descuidada.

Cada vez llora más, se tapa la boca con la mano y no para de dar vueltas por la pequeña sala

-Aún estoy a tiempo de abortar
-¿Quieres tenerlo?
-Creo que si, si tú no quieres o aborto o me hago cargo yo sola de él y ya está, me iré a Barcelona y me ayudarán mis padres
-No, quiero ser su padre, soy su padre

Ahora yo también lloraba

-Aitana perdóname, he sido un puto gilipollas
-Luis no puedo, los dos seremos sus padres, pero no estaremos juntos, entiéndelo porfavor
-Lo que tú quieras, de verdad
-Pero quiero que nos llevemos bien, no voy a traer al mundo a un niño con padres que se llevan mal o enfadados
-¿En paz?
-En paz, pero creo que me tienes que explicar muchas cosas
-Lo haré

Nos damos un abrazo y me limpio el gel de la tripa con un pañuelo

-¿Puedo?
-Si

Pone su mano sobre mi vientre, un escalofrío recorre todo mi cuerpo, no me acordaba de la electricidad que tenía su piel con la mía. Se agacha a dejar también sobre mi barriga aún inexistente un beso y me ayuda a bajar de la camilla que es bastante alta.
Cogemos las fotos de la ecografia para el recuerdo y salimos.

-Estamos en contacto ¿vale?
-Vale, y si cambias de opinión que sepas que lo dejo en tus manos, yo ya tengo la vida acomodada más o menos, tú estás estudiando, Aitana piensa en ti porfavor, pero ten en cuenta que voy a estar allí siempre
-Gracias Luis

Nos damos dos besos y él se va por un pasillo, yo me reencuentro con Amaia y volvemos a la resi.

Creo que aún no asimilo que hay una personita creciendo dentro de mi, que voy a ser madre, me han dado una semana para decidir si abortar o no, necesito hablar con mis padres para tomar la decisión.

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