Capítulo 4

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El departamento de Hyerin era muy cálido y cómodo, con colores no tan llamativos ni nuetros a la vez, eran pacíficos. Una pequeña sala de estar con muebles color crema son la bienvenida al entrar al lugar, una cocina ubicada en la parte izquierda con un pequeño comedor, dos puertas situadas en frente de la puerta principal dando a entender que una debía ser de la habitación de Hyerin y otra la del baño o eso es lo que más o menos Hyojin llegó a concluir, pues su mente aún no se desconectaba del dilema combinado con el dolor en el que se encontraba desde que llegó a Seúl.

Las tres personas entraron al departamento siendo Hyojin la última en ingresar y cuando estuvo dentro fue el instante en el que se percató de esos detalles.

-Bienvenida Hyojin- dijo Hyerin con una sonrisa dibujada en su rostro, acción que realizaba para ayudar a despejar la mente de su amiga de aquel sentimiento doloroso.

Hyojin la vio y le regaló una sonrisa con tristeza en ella.

-Gracias- le dijo con suavidad.

Hyojin caminó hasta el centro de la sala para luego sentarse en uno de los muebles mientras depositaba su bolso sobre la mesa. Hyerin siguió su acción con su mirada, agachó su cabeza para soltar un suspiro de cansancio. Sintió un toque en su hombro por lo que alzó su cabeza para encontrarse con la mirada de su novia.

-Ve a hablar con ella- le dijo mientras daba un suave apretón en su hombro -te necesita- le sonrió tiernamente, Hyerin asintió devolviéndole la sonrisa -estaré en la habitación- finalizó su habla.

-Está bien amor- habló Hyerin.

Solji se acercó a su novia para darle un tierno beso ¡Dios! Cuanto amaba Hyerin los labios de su novia. No solo sus labios sino todo de ella. Amaba cada gesto, cada lunar, cada facción de Solji, amaba a Solji con toda su alma. Amaba a esa mujer más que a su vida.

Y siempre la amará, porque es el amor de su vida...

Compartieron sonrisas de reconfortación antes de que cada quien tome el rumbo de su objetivo. Al ver entrar a Solji a la habitación, Hyerin dejo escapar otro suspiro porque sabía lo que ahora le tocaba.

Hablar con su amiga, consolar a su amiga.

Ayudarla así sea en la miníma cosa...

Giró su rostro para ver a Hyojin quién se encontraba sentada en el sofá, con su cabeza reposando en él y sus ojos cerrados en su totalidad.

Comenzó a trazar un camino en su dirección acortando la distancia entre ellas. Al haber llegado a ella la miró por última vez antes de tomar asiento a su lado.

Cuando Hyojin sintió la presencia de su amiga abrió sus ojos y movió su cabeza para poder observarla. La preocupación que mostraba su amiga en su rostro la hizo sentirse peor.

Miserable.

Se miraron por segundos que parecieron una eternidad. Sin hablar, sin emitir palabra alguna.

Dejando que sus miradas sean quienes muestren respuestas...

Las necesitadas respuestas.

Hyerin al ver que su amiga no decía nada y por la expresión en su rostro daba a entender que no diría nada, dejó que otro suspiro escape de su boca antes de hablar.

-Hyojin po...-

-Duele-

Frunció su ceño al escuchar la voz quebrantada de su amiga, mirándola detenidamente, observando a traves de sus ojos, tratando de averiguar el significado de aquella palabra. El silencio reino, sintiéndose abrumador pero no tanto como el cristalino líquido en los ojos de Hyojin.

TIME ||HANIXLE|| -- EXIDDonde viven las historias. Descúbrelo ahora