Narra Dereck
<¡Apresúrate!> era mi lobo, podía percibir un olor peculiar en el camino, era un miembro de la manada, quizás también este en problemas o este ayudando a mi mate, espero que sea lo último.
Al llegar, vi al demonio en el piso parecía como paralizado, una cosa rarísima, me acerque a Greta, la cual lucía cansada, demacrada la alcanzo a tomar de la cintura, haciendo que se sobresaltara.
- Tranquila no te hare nada -susurro oliendo su aroma dulzón- ¿Estas bien? -susurró.
-Quiero ir a casa-solamente dijo eso, dejo su máscara de indiferencia unos minutos y me miro preocupada. ~mi amor, estarás bien conmigo, no dejaré que nada te pase~ pensaba.
El oscurus, empezó a emitir sus clásicos murmullos, estaba llamando a sus amigos -tenemos que irnos ya, ven te llevo- ella asintió, así que me trasforme en lobo.
-¡Oh Wooo! ¿Quieres que yo me suba a tu lomo? ¿y si me tumbas? ¿eres un lobo móvil? -negué con la cabeza, mi mate nunca cambia su sentido del humor, en eso veo muchos oscurus aparecer - cambie de opinión, si te usaré de lobo móvil-algo roja, se sube en mi lomo, sonrió y comencé a correr en dirección a su casa.
<¡Oh si! Estas arriba de mi, abrázame, así Luna> Sam estaba descontrolado, lo trate de calmar.
~Relájate Sam~ suspiro sintiendo el aroma de Greta que me enloquecía, tan adictivo, tan dulce, tan ella. Sonrió al sentir sus brazos rodearme el cuello.
-Vamos Dereck- susurraba - hay 5 oscurus atrás de nosotros -pude escuchar como suspiro -yo... confío en que podemos salir de esto -alce la ceja- de acuerdo, confió en ti.
~Con eso es más que suficiente...por el momento~
La casa de ella estaba a 3 cuadras, comencé a correr como nunca, mi mate estaba en peligro, esta situación lo ameritaba. Cuando vi la casa de ella, la deje en la puerta de su casa, le hice seña para que entrará a su casa, al ver los oscurus, no me quedo de otra más que empujarla adentro.
Empecé a enfrentar solo a los 5 oscurus, algo que me sorprendió fue el hecho de que no se acercarán a la casa de Greta. Uno de ellos también intentaba pasar, pero había un radio de 10 metros sobre el perímetro de su casa.
-¡Dereck! Entra ya -asustada Greta se salió de la casa y vino a mi lado -por favor -me suplicaba, no puedo resistirme a sus gestos.
Asentí y comencé a caminar a su lado, mi mate abrió la puerta de su casa, observo por última vez a los 5 oscurus que estaban afuera y entre a su casa.
-Adelante - con una sonrisa- mi abuela no esta así que siéntete cómodo- cerrando la puerta -tengo que curarte esta herida -señalando la cortada que cubría de rojo mi pelaje.
Me condujo a su cuarto y ahí me destrasforme, quedando mi herida en la espalda.
-Aquí tengo un botiquín de -entrando a su cuarto mi mate, cuando me vio se puso roja y se giro- no vi nada -me lanzó una sábana - ¡DIOS! -me acomodo la sábana en la cintura, me reí, Greta siempre tierna.
-¿Por qué siempre te pones roja conmigo? -le pregunto en su oído abrazándola por detrás. Ella se separó rápidamente.
-Siempre me pongo roja con todo, no te sientas especial-hablaba entrecortadamente cruzando los brazos, alce la ceja -ahora siéntate ya -le hice caso, ella comenzó a curarme la espalda, aunque claro que no era necesario ya que me curo con mucha rapidez.
-Listo, en un par de días estarás como nuevo - me sonríe y le acaricio la mejilla, acariciando su suave piel.
-Gracias Greta -con una sonrisa, me sentía dichoso afortunado de verla sonreír, me fui acercando poco a poco a ella, sonrió al ver como se puso nerviosa, nuestras respiraciones se estaban mezclando, estaba a nada de probar sus labios.
-¡Ahh! -sentí como algo me mordía la pierna, me aleje de ella y vi al cachorro que mi Luna había rescatado.
-¡Nadir! Quieto -Greta tomo al cachorrito...espera, ¡¿Se llama Nadir?! -creo que te recuerda- algo divertida, el cachorro seguía gruñéndome ~perro del demonio~
-¡¿Se llama Nadir?! -pregunte cruzando los brazos - ¿Por qué lo llamaste como yo? -el perro seguía gruñéndome- ¡ehhh! Tranquilo chico
-Porque me pareció un bonito nombre para perro -explico con una sonrisa - aparte nadir es muy bueno- le acaricia la pancita al Husky - es una bola de pelos, como tu cuando eres lobo, pero en miniatura, es tu mini tu -rodé los ojos divertido ~al menos, piensa en mí~
-Me gusta saber que piensas en mí -ella se sonrojo al instante, salió de la habitación y regreso con ropa -¿tienes ropa de hombre en tu casa? -tratando de sonar no muy celoso, ella me sonrió.
-Es de Grant -se encogió de los hombros y fui a cambiarme, cuando volví me senté enfrente de ella en su cama-Bueno, bueno, ahora si me puedes explicar ¿Qué hacen los oscurus en esta ciudad?
-Bueno, creemos mi manada y yo que tienen su portal cerca de aquí, pero esa información no esta confirmada aún-frunciendo el ceño, para proseguir - nosotros tratamos de que no se acerquen a ninguna persona, ya que cuidamos las vidas humanas...esto es una tipo guerra Greta, lleva más de 50 años. Mis padres hacían el mismo trabajo en cuidar a las personas y tratar de descubrir que es lo que trae a los oscurus a esta ciudad, pero murieron cuando ya estaban a nada de descubrirlo -me revolví el pelo frustrado -creemos lo del portal, por unos viejos pergaminos que encontramos hace unos días, pero esta rasgado.
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¿Mi profesor es un hombre lobo? ¡¿Qué?!
Manusia SerigalaGreta O'Connel una chica con aspiraciones y sueños, acaba de ingresar a la universidad. Ella pensaba que encontraría paz y tranquilidad en la ciudad natal donde creció su madre, pero se da cuenta que nada es lo que parece. Una tradición familiar que...