-Quiero que seas mío.
Le beso, el beso comienza siendo suave y calmado, luego la temperatura va subiendo más y más.
Tumbo a Calum en el sofá y me pongo encima suyo.
A continuación se quita la camiseta.
Ver su escultural cuerpo debajo del mío me excita tanto.
Comienzo a chuparle el cuello, dejándole algunos chupetones.
Calum se agarra al sofá.
Parece que hoy está más sensible de lo normal.
Voy bajando suavemente mi mano hasta su pantalón, y le aprieto el paquete.
Calum gime, normalmente es él, el que me hace gemir sin control, pero hoy quiero ser yo activo y no el pasivo o como me gusta decirlo, el cordero y el lobo.
Dejo de chuparle el cuello, para centrarme en sus pezones.
Empiezo a chuparlos, noto como la polla de Calum se levanta por segundos.
El placer de oírle gemir, es algo tan erótico y excitante, es una sensación demasiado deliciosa.
Le muerdo un pezón.
Calum gime aún más.
-Dios...James...sigue...
Continuó mordiéndole y chupándole los pezones.
Creo que ya es hora de ver su gran erección.
Le bajo la cremallera y los bóxers, y como puedo observar está a punto de correrse.
-Quiero que te corras en mi boca- le digo.
-Hazlo...-Dice Calum excitado.
Me meto su polla en mi boca y comienzo a mover mi lengua.
Mi erección se vuelve aún mayor.
Joder, quiero sacármela ya, pero antes se tiene que correr en mi boca.
La chupo más deprisa.
-Me..voy..a...correr.
Después de decir eso se corre.
-¿Quién eres tú y qué has hecho con el James cortado?
Me río.
-Más bien, ¿Quién eres tú y qué has hecho con el famoso traga pollas?
Calum suelta una carcajada.
-Pero esto no acaba aquí.
Me bajo la cremallera y el bóxer.
Y allí está, esperando para mojar el churro.
-La tienes enorme.
-Y bien erecta.
Calum me mira unos segundos, después se pone a cuatro patas encima del sofá.
-Métemela.
¿Cómo se supone que me voy a negar si me lo pide de esa forma?
Me acerco a él y se la meto.
Hace tanto que no se la meto a nadie, entre que estuve un año en terapia y Calum no para de metérmela a mí.
Apoyo mis manos encima de las suyas, luego le muerdo la oreja y le susurro.
-¿Te gusta?
-Si..sigue...quiero más..
Sacar y meter, sacar y meter, no paro de repetir esos movimientos.
Los dos gemimos sin parar.
Después de eyacular unas cuantas veces y de probar varias posturas, caemos rendidos en el sofá.
-No sabía que se te diese tan bien.
-Tuve mi época de fuck boy.
-¿Quieres quedarte a dormir?
Miro mi móvil, son las doce y media, supongo que volver a mi casa a esta hora y en este barrio no es la mejor opción, además así puedo dormir con Calum.
-Voy a hacer la cena-Dice Calum.
-Vale.
Miro los mensajes que me han mandado, me fijo en un mensaje en específico.Yonah:
-Al final no te he contado eso tan importante-Para Yonah:
-Mañana me lo cuentas-Apago el móvil y me dirijo a la cocina.
-¿Qué vamos a cenar?
-Pizza.
De repente se me viene a la cabeza, lo raro que ha estado hoy con Violeta.
-Oye, ¿No has sido un poco "borde" hoy con Violeta?
-¿Qué?
-Normalmente tu no eres así, con ella has sido...distinto.
Calum me mira a los ojos y me coge de la mano.
-Supongo que tenía celos.
-¿Celos de qué?
-No lo sé, de muchas cosas, "de ese chico misterioso que te pone", "de lo mucho que tienes en común con ella y no conmigo", me sentí...amenazado.
¿Calum Abrahams sintiendo celos?, eso es nuevo, además no me creo que no se haya dado cuenta de que el es el único capaz de levantármela, por lo menos desde que lo conocí.
-Me cuesta creer que no te hayas dado cuenta de quien es el "chico misterioso"
-Estoy casi seguro de que soy yo.
-Bingo.
Calum sonríe.
-Me alegra ser el único capaz de levantártela.
Me ruborizo.
Entonces suena la alarma del horno.
-Ya está lista.
Calum saca la pizza y la sirve.
De repente alguien me llama.
Es Yonah.
-Ve comiendo, que tengo que coger una llamada.
-Vale.
Entro en el baño y cierro la puerta.
Le cojo la llamada.
-¿Hola?
-James, tenemos problemas, o más bien tu tienes problemas.
-¿Qué pasa?
-Es mi madre, ha encontrado...tu baúl.
Mierda, ya ni me acordaba de mi "baúl de los secretos".
-¿Lo tiene ella?
-No, me lo ha mandado a mí por accidente, la he llamado y me ha dicho que te lo dé a ti.
-No lo abras, voy para allá.
-Tarde, ya lo he abierto, James, lo que hay en el baúl es...
-Si, sé perfectamente lo que hay guardado, ahora mismo voy hacia tu casa.
Cuelgo.
Esto no podría ir a peor, en ese puto baúl están todas las mierdas que hice en Bleasen, está lleno de...recuerdos de mierda que preferiría olvidar.
Vuelvo al salón.
-Me tengo que ir- Digo mientras me visto.
-¿Ya?
-Si, me ha surgido una emergencia.
-Okey.
Me termino de vestir y salgo del piso.
Tengo que darme prisa, quiero quemar ese baúl cuánto antes.
Salgo del edificio, me monto en mi moto y me voy a casa de Yonah.
Llego a su casa y llamo al timbre.
Yonah abre la puerta.
-¿Estás seguro de que quieres verlo?
-Si.
Entramos a su habitación.
Y allí lo veo, ese puñetero baúl, el cual está repleto de mierdas que hice en el pasado.
Yonah se dirige a su cama y coge el baúl.
-Toma, haz lo que quieras con el, pero por favor no lo enseñes a nadie, la gente ya no te trataría igual.
Yonah mete el baúl en una mochila y me lo da.
-¿Y tu sí que me tratas igual?
-Yo conocí al James del pasado, y sé perfectamente cómo era, hizo falta que estuviera al borde de la muerte para que se diera cuenta de que era un capullo.
-Gracias, no sé qué haría sin ti.
-No es nada, para mí, eres como un hermano.
-Me tengo que ir.
Salgo de la casa de Yonah con la mochila cargada en la espalda.
Después me monto en mi moto y me voy a mi piso.
Llego a mi piso y saco el baúl de la mochila.
Bien, es hora de sacar los trapos sucios.
Abro el baúl.
En el baúl hay fotos, cartas, y algún que otro porro.
Incluso un pendrive con un vídeo porno que grave con unas "amigas". Por esa época yo no tenía amigas, solo tenía "folla amigas".
Hay fotos mías haciendo de todo, algunas son teniendo sexo, y hay otras, en las que salgo colocándome con unos amigos.
Saco unas cartas de...Amelia.
Joder, ya ni me acordaba de esto...

ESTÁS LEYENDO
Clavirence
RomanceJames es un chico de diecisiete años que se va de la gran cuidad para poder olvidar su pasado. Termina por mudarse a un pequeño pueblo llamado Hellynswood. Allí decide ir al instituto Clavirence, pero lo que James no se espera es la violenta clase s...