Clavirence

¿Quién es Calum?

-¡James! ¡Cuanto tiempo!
-¿Yonah? ¿Tú también vas a este instituto?
-Claro, desde el año pasado, además no iba a dejar que mi primo favorito entrase en el Clavirence sin conocer a nadie.
Yonah es el único hijo de mi tía Laura.
Es rubio, alto y bastante mono, además es muy optimista y alegre. En cierto aspecto se parece bastante a mi tía ya que los dos anteponen a la familia ante todo.
-Creo que me las pueda apañar muy bien solito.
-Pues crees mal, en este instituto hay todo tipo de gente...y si debes tener cuidado con quien te juntas.
-Ni que me fuesen a pegar.
-Créeme si no tienes cuidado puedes acabar en la mierda, a parte hay una clase social brutal, incluso te pueden llegar a dar una paliza de las gordas.
-¿Y no hay un sistema antibulling o algo así?
-La clase social del Clavirence se basa en la demostración de poder, si eres débil te arriesgas a un auténtico infierno, pero si eres fuerte te garantiza un paraíso.
¿En qué cojones me he metido?
-¿Y tu...de qué lado estás?- Pregunto dudoso.
-De los fuertes, y todo gracias a Calum Abrahams.
-¿Calum Abrahams?
-Si, el chico más popular de todo Clavirence, me integró en su grupo y me va bastante bien.
-Tendría que ver a ese tal Calum.
Enciendo mi móvil y miro la hora que es.
Mierda son las nueve menos diez.
-Tenemos que entrar ya- Digo señalándole la hora.
-Vale.
Mi clase queda al fondo de ese gran pasillo, el cual está repleto de puertas que dan acceso a otras clases.
Yonah entra a su clase y yo me quedo parado unos segundos en frente de la mía.
Muy bien, aquí empieza mi nuevo yo, ya es hora de intentar olvidar todo lo que me recuerda a ella.
Entro a la clase y por lo que veo llego tarde.
Mierda.
-¿Cuál es tu nombre?
-James, James Parish.
-Llegas tarde y encima el primer día.
-Pero si solo han sido dos minutos.
-No me importa, hay normas en este instituto Parish y todos tienen que seguirlas.
-Lo siento Miss...
-Miss Collins, date prisa y siéntate.
-Vale.
Echo un vistazo a las personas que están sentadas. Veo a una chica rubia, guapa, morena y de ojos azules. Lleva unos aros de oro enormes. Está sentada al lado de otra chica más normal.
Detrás suyo hay un chico bastante grande y de huesos anchos, también rubio y de ojos azules.
Unos sitios más a la derecha veo a un chico alto, guapo, con los ojos azules de ensueño. Pelo negro, un poco largo, pero no demasiado.
A su lado está sentado un chico bastante blanquito, de pelo marrón, con mechas californianas y el pelo algo corto. Lo suficiente para poder ver algunos de sus piercings en sus orejas.
Después de echar esta pequeña ojeada, me siento en el único pupitre vacío de la clase. Está detrás del chico de rubio de huesos anchos.
-Muy bien, como hoy es el primer día os voy a explicar algunas de las normas las cuales seguiréis al pie de la letra ¿Entendido?
-Si-Decimos toda la clase al unísono.
Por mucho que me esfuerce en atender la clase, no puedo evitar fijarme en ese chico de pelo moreno que está sentado al lado del de las mechas...
¡¿Espera un minuto?! ¡¿Pero si a mi no me gustan los tíos?!
-¡Parish! ¡¿Acaso estás escuchando algo de lo que estoy diciendo?!
-Emm...¿Si?
Oigo unas risitas por la clase.
-Primero llegas tarde y ahora no atiendes, espero que sólo sean los nervios del primer día y que el resto del año no sea así.
-Si perdone Miss Collins.
-Esta bien, ahora sigamos.
-Una hora después-
Suena el timbre.
-Ya podéis salir al patio.
Bien, ahora solo tengo que ir con Yonah para que me enseñe todo esto y ya de ahí me las apañaré solo.
Estoy apunto de salir hasta que alguien me toca el hombro.
-Hola, soy Rubi.
Si es la rubia de antes...