Desearía que

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Fue la imagen más horrorosa que había presenciado en sus milenios de vida, que permanecería para siempre grabada con fuego en mi memoria, su corazón se había roto por completo si antes no creía que atenea fuera capaz de lo mencionado por Dionisio ahora él no tenía ni la más mínima duda.

Frente a sus ojos se desarrolló lo que el más adelante en su mente llamaría como "la mayor tragedia del olimpo", atenea la pequeña hija que el defendió con tanto fervor estaba parada sosteniendo una daga especial aquella que el con tanta insistencia de los demás olímpicos había guardado de manera completamente impecable en su templo, que servía para matar dioses creada durante la guerra contra los titanes para poder asesinar aquellos que se opusieran contra ellos, era un método desesperado que decidieron utilizar solo contra aquellos que realmente no tendrían salvación, su mano y la daga completamente llenos de rojo, su mirada completamente desprovista de vida mientras en el piso frente a ella estaba el cuerpo tendido bajo un charco de su propia sangre roja, la sangre de un mortal, y su símbolo de poder roto, mi hijo.

Poseidón y Hades miraron a su hermano menor con mucha lastima siempre creyeron que fueron los que más sufrieron de los tres por perder a su amada, pero jamás tuvieron que presenciar el momento en que su vida se escapaba de sus manos sin poder hacer nada, mientras que su hermano prácticamente miro con impotencia como asesinaron a uno de sus hijos sin poder haber hecho nada.

Las hermanas de Zeus dejaron que sus lágrimas por fin fluyeran libremente de sus ojos, por fin se podrían quitar el peso de esos siglos sin respuestas, pero enterarse de todo lo que tuvieron que pasar para llegar a este momento las lastimaba, porque su familia terminaba de esta manera que es lo que habían hecho mal para que todos estos males os atacaran.

Los caballeros del zodiaco de repente no se sentían tan orgullosos de sus títulos como protectores de Athena, se sentían heridos esta era la diosa de la justicia a la que se supone deberían servir, por la que debieron dar su vida, por la que sangrarían, por la que lucharían, se sentían cada segundo más avergonzados de sus actos, no sabía ahora que es lo que deberían hacer.

Mu, aunque sentía algo de rencor contra Zeus por todo el desarrollo del día no podía evitar mirarlo con admiración por todo lo sucedido.

Aldebarán sentía lastima por lo ocurrido a un dios, se sentía utilizado, se sentía triste porque aquel caballero que logro romper el cuerno dorado de su armadura no era el mismo de es< época.

Los gemelos permanecieron callados, ellos tenían varios secretos que mantener.

Mascara de muerto, aunque era una persona sádica jamás pensó que su diosa fuera tan depravada, él siempre pensó que el seria la oscuridad del santuario para que la luz que era su diosa se mantuviera en equilibrio como el yin y yang, pero ahora todas sus nociones fueron rotas y no sabía ahora que debería hacer, si lo que había hecho era lo correcto.

Aioria y Aioros se miraron uno al otro, perdidos sin saber qué hacer, se sentían perdidos.

El caballero de virgo mantuvo la calma en una posición de meditación mientras, repasaba toda la información obtenida en esta situación y se planteaba diferentes planes de batalla.

El caballero de libra estaba ausente en los cinco picos.

El caballero de escorpio no dijo nada, no se movió, solo permaneció quieto en su lugar.

El caballero de capricornio estaba completamente destrozado, no había querido creer esto cuando se lo dijeron, pero ahora estaba completamente destrozado.

El caballero de acuario miraba sospechosamente al caballero de escorpio quien no se movía lo cual era una situación realmente extraña, ¿no podía ser que el también?

Aura DivinaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora