Aura Divina

¿Hades? y la versión de Poseidón parte 1

La apariencia de Perséfone será la de  Palutena de Hikari no Megami

Editado el 22/07/2023

Persona hablando

<Persona pensando>

Perséfone pasaría en el infierno junto a su esposo un tercio del año, y regresaría a la tierra el resto del tiempo. Hades y Deméter aceptaron la decisión de Zeus.

No es una divinidad promiscua y tendente a dejarse llevar por la pasión sexual; él solo se enamoró una vez, pero ninguno de sus familiares vio esto. Lo tacharon de un monstruo. La única persona que tuvo durante mucho tiempo fue a su amada esposa, hasta que Poseidón cayó en desgracia ante los ojos de su hermano menor.

Hades, el Señor del Inframundo, era conocido por su carácter reservado y su dedicación a sus deberes. A diferencia de otros dioses, no se dejaba llevar por caprichos y placeres fugaces, sino que llevaba una vida de relativa soledad y seriedad. Su corazón solo había sido conquistado una vez, y esa única vez fue por Perséfone, la hermosa y dulce diosa que se convirtió en su amada esposa.

Sin embargo, pocos eran conscientes de la profundidad de su amor por Perséfone, ya que Hades prefería mantener sus sentimientos en privado. Su imagen de Dios del Inframundo y Señor de los Muertos le precedía, y la gente temía su presencia y no veía más allá de esa faceta oscura.

Aquellos que lo conocían mejor sabían que detrás de su fachada fría y distante se encontraba un corazón apasionado y amoroso. Pero cuando Poseidón, su hermano menor, cayó en desgracia ante los ojos de los dioses, Hades se vio envuelto en una situación complicada. A pesar de sus desavenencias con Poseidón, todavía sentía la obligación de proteger a su hermano y de no tomar partido en los asuntos divinos.

Esta situación puso a prueba su lealtad hacia su familia y sus propios sentimientos. Hades se encontró en una encrucijada emocional, luchando con su deber familiar y su amor por Perséfone.

FIN FLASH BACK HADES

Y después ella......- Hades trago saliva ruidosamente ese tema era una clase de tabú, le dolía el corazón en pensar en ese día, fue lo más doloroso que le pudo pasar, estuvo a nada de tomar la decisión de desvanecerse, para el la vida no tenía sentido sin ella a su lado.

Hades...- susurro conmovida Deméter, nunca se imaginó a su hermano mayor de esta manera, ahora su corazón le dolía era su culpa por separarlos y creer en palabras vacías de su sobrina. No tenía perdón.

El aún en ocasión se sentía tan cansado de su existencia, no podía llamar a su día a día una vida, por que para el solo existía, la vida perdió color, se sentía como si algo en su pecho lo sofocara, estaba tan cansado, sólo seguía de pie esperando el día en que ella regresará sus brazos, para él nada más tenía sentido.

Claro amaba a sus hermanos pero después de tanto dolor y sufrimiento que estaba relacionado a la palabra hermano, no era lo mismo mientras que el nombre perséfone sólo hermosos recuerdos.

De repente, todos los presentes notaron un cambio drástico en Hades. Su mirada, una vez llena de fuerza y determinación, se opacó con una expresión perdida y apagada. Su cuerpo, que solía estar sereno, se tensó con agresividad mientras sus manos temblaban ligeramente. Era como si algo en su mente se hubiera roto, y su ser parecía estar en un estado de conflicto interno.

La sala se llenó de un silencio tenso mientras todos observaban a Hades con preocupación. Incluso los guardianes de los dioses, que siempre estaban alerta y listos para actuar, se inquietaron ante esta transformación tan inusual del Dios del inframundo.