Maldito niño [Starker]

¿Cura?

Apenas amanecía cuando F.R.I.D.A.Y. los despertó a ambos, alegando que Natasha los esperaba en el hangar para dirigirse de una vez al Complejo del campo. Se levantaron y tomaron una rápida ducha, Peter se colocó el Iron Spider y Tony lo mismo que traía ayer, ya que no había recogido más ropa.

Al llegar al lugar acordado, Black Widow se encontraba recargada en el Quinjet perteneciente a S.H.I.E.L.D. que utilizarían para partir. Fury, a su lado, los observaba caminar en su dirección.

La sonrisa nerviosa en el rostro adolescente, contrastaba totalmente con la siempre fiel mirada molesta que el niño le dirigía. Al llegar a su lado, Peter lo saludó con un movimiento de cabeza, la cual él correspondió. El infante simplemente lo ignoraba olímpicamente, y cuando lo miraba era con fastidio e irritación, como si su sola presencia lo molestara.

Frunció el ceño; el molesto debería ser él, por la insolencia con la que era tratado.

 —Estamos listos, Señor—Informó el castaño poco convencido, dando a entender lo desagradable que resultaba para él hacer ese viaje.

 —Excelente. Suban al Quinjet, entonces —La espía entró primero, siendo seguida por sus dos pasajeros —Romanoff los llevará a la base que se encuentra en el norte, es más seguro tenerlos allá —Explicaba el del parche desde la entrada —Helen irá después, así que estás libre por un rato, Parker. Pero cuando ella llegue empezarán a trabajar en la cura, ambos, ¿quedó claro?

 —Sí, Señor—Dijo con firmeza el arácnido, recibiendo una mirada satisfecha de parte de su superior como única respuesta.

 —Dejando ésto en claro, pueden irse. Suerte—Se despidió, dándose la vuelta para marcharse. La compuerta del Quinjet se cerró, dejando a las tres personas que viajarían ahí dentro.

 —Siéntense y abróchense el cinturón. Iremos rápido—Advirtió la mujer dirigiéndose al asiento de piloto, lista para despegar.

Los otros dos no replicaron y fueron a sentarse enseguida. Peter porque realmente conocía el "rápido" de Natasha, y no quería accidentes. Y Tony porque... bueno, jamás lo diría en voz alta, pero esa mujer lo intimidaba.

Al estar todos listos, la pelirroja encendió el Quinjet y despegaron a toda velocidad. Fue un viaje bastante corto, tardaron siete minutos exactos en llegar al lugar, aterrizando en el sitio predeterminado. La mujer bajó primero, destilando su elegancia y sensualidad características, y con una disimulada sonrisa divertida formándose en sus labios. Detrás de ella, le siguieron ambos chicos mareados y tambaleándose; Peter jamás se acostumbraría a los viajes de Natasha, eso era seguro.

Podría ser un amante de la velocidad y las alturas, pero la bestialidad con la que Black Widow conducía era incomparable.

Hasta presentía que este viaje había sido un poco más rápido de lo usual, de seguro lo hizo a propósito...

Por otro lado, Tony, a pesar de las leves ganas de vomitar que sentía, estaba bastante emocionado. Jamás había viajado tan rápido, era como una montaña rusa pero mucho mejor.

 —¿Están enteros?—Preguntó la agente elevando su perfectamente delineada ceja. El adolescente carraspeó un poco antes de responder. 

 —Apenas—Suspiró tocando su pecho, notando el descontrolado latido.

 —No aguantas nada—Susurró el niño con una sonrisita divertida, ganándose un ceño fruncido y un mini-zape de parte del castaño.

Tony estaba por protestar, pero la voz de la temeraria pelirroja lo obligó a guardarse sus palabras.

 —Si ambos están bien, los dejo. Tengo asuntos que tratar y confío en que no tratarán de escapar—Recalcó lo último mirando a Peter, quien devolvió la mirada con inocencia—Tú ya conoces la cede, chico araña. Pueden moverse solos—Les sonrió a ambos y se dio la vuelta, dispuesta a entrar—Y Pet—Lo miró por sobre el hombro—Todos están aquí, ten cuidado—Advirtió, antes de desaparecer por las inmensas puertas del Complejo.