3

1.3K 175 28
                                    

En cuanto su reloj de mano marcó las 8:45pm, Ashton tomó las llaves de su auto, le gritó por última vez a Luke y salió en dirección a la cochera. Si tenía suerte, aquella noche arruinaría una fiesta, y probablemente iría a buscar a cierto chico a otra, sus planes mejoraban cada vez más y más en su mente.

En cuanto subió y cerró la puerta de su auto, su primo subió igual, sonriendo como siempre.

—No sé qué planes tengas, pero quiero divertirme el día de hoy.— Juntó ambas manos en forma maliciosa. Ashton rodó los ojos y arrancó el auto.

Luke encendió la radio, cambiando de una estación a otra, Ashton estaba desesperándose y justo antes de soltarle un golpe a Luke en la mano, una canción comenzó a sonar. Crazy in love de Boyoncé se escuchaba por las bocinas, Ashton trató de mantenerse callado, se sabía la canción y no es que le diera vergüenza, sino que, si comenzaba a cantar, Luke le haría burla, lo que Ashton no sabía: Luke también quería catarla.

Hubo un momento, justo cuando el coro empezaba, que pararon en un semáforo, ambos se voltearon a ver, sonrieron y comenzaron a calentar a todo pulmón.

—¡Get me looking so crazy right now!— cantaron ambos emocionados, incluso en la parte de Jay-Z se turnaban, era como si lo hubiesen ensayado varias veces, moviendo sus cabezas al ritmo.

Rompieron en carcajadas una vez que la canción había terminado.

—Eso fue genial— admitió Luke.

—Si, no sabía que te gustara Beyoncé.

—Bueno, lo mismo digo.— Luke se alzó de hombros.

Eran primos, sí, pero ninguno de los dos había convivido realmente en su niñez, fue hasta la muerte de la madre de Luke que su unión se fortaleció, además de que se habían dado cuenta de la orientación sexual de ambos por un tremendo y raro accidente, el cual evitaban hablar. Luke creía que Ashton era bueno, pero también pensaba que era muy presumido, por su parte Ashton pensó que Luke era un fastidio total, aun así, aquel momento fue genial.

Al llegar a la dirección de aquella casa, los dejaron pasar sin problemas en la residencia, Ashton entendía que el tipo sería de una familia influyente.

Dejaron el auto estacionado y al bajar, Luke se perdió, su política entre primos en fiestas era perderse, así de simple.

Ashton visualizó a muchos chicos que había invitado a su fiesta y que habían sido capaces de cancelarle, no les tenía rencor, tan solo quería ver porque esa fiesta sería mejor que la suya. Varios de ellos lo saludaban, algunos más ebrios que otros, sin embargo, Ashton no perdía la sonrisa.

Se adentró a la casa, estaba en busca de alguna bebida, hasta que escuchó a unos tipos decir que era barra libre en el bar del gran salón, Ashton frunció el ceño, quizás eso fue lo que llamó la atención de absolutamente todo el mundo.

La música era buena, quizá una combinación de varios DJ, o alguna selección de artistas desconocidos para Ashton, la cual parecía agradar a muchos. Cuando por fin llegó a la famosa barra libre, se dio cuenta de que no le apetecía beber algo en ese momento, quizá fue la impresión que se llevó de todos, o porqué se estaba enojando un poco, estaba completamente solo ahí sin tener a alguien con quien hablar.

Buscó un sitio para sentarse, pero el carraspeo de alguien a sus espaldas lo hizo voltear.

—Así que un Irwin está en mi casa— el hombre frente a él tenía un tatuaje en el cuello, su camiseta negra sin algún estampado se pegaba a su cuerpo y los pantalones marcaban sus piernas, llevaba el cabello rubio cenizo claramente teñido hacia atrás perfectamente peinado, Ashton frunció el ceño, no lo reconocía de ningún lado.

Meet You There | CashtonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora