~Sin Mirar Atras~

Capitulo 33

Kikyo

-Lo lamento mucho, lo perdiste- me dijo la enfermera.

Senti como mis ojos se humedecian, las lagrimas comenzaron a brotar, grite, llore demasiado hasta que el doctor tuvo que aplicarme un tranquilizante el cual me hizo dormir, asi estuve lo que transcurrio del dia y parte de la noche, eran las 6 am cuando desperte, estaba la enfermera en turno a mi lado.

-Buenos dias- me dijo amablemente.

-Hola- le dije con tristeza.

-¿Como te sientes?- pregunto.

Como tenia que sentirme, acababa de ser golpeada y de perder a mi hijo.

-Mal- le dije- Muy mal emocionalmente- respondi sin animos- ¿Como es que llegue aqui?

-Una mujer te trajo, dijo que te asaltaron- me respondio.

-Si claro, con tal de defender a ese maldito- dije en voz alta.

Era mas que evidente que esa mujer era mi tia, solo ella diria eso con tal de proteger a su amado.

-Eso no es verdad- le dije.

-¿Que paso enrealidad?- me pregunto.

-¿Me hicieron examenes?- le pregunte.

-Si, de todo tipo- me dijo mientras revisaba mi historial- Incluso de violacion ante lo cual- se detuvo- Dio positivo- me dijo.

-Ahi tiene la respuesta- le dije viendo a la ventana.

-¿Sabes quien es el agresor?- me pregunto, ante lo cual asenti con la cabeza- Dime quien es puedo ayudarte.

Al final decidi contarle todo, y ella me escucho atentamente cada palabra, al llegar al final me abrazo, ella me ayudo cuando me dieron de alta me cuido como si fuera mi madre, era una mujer buena.

Cuando cumpli 20 años me dedique a buscar a mi tia y su esposo, durante esos años intermedios me dedique a entrenar para asi vengarme de ellos, era muy buena con la espada, cuando di con ellos me meti a su casa ahi estaba ese par.

La diferencia en mi era que me habia vuelto fuerte, deje de ser la chiquilla tonta e ingenua, ahora era una mujer fria, calculadora y sin sentimientos, ellos me observaban, estaba cambiada y tal vez no me reconocian, mi cabello era largo abajo de mis muslos, tenia flequillo y mi piel era blanquecina con un tono rosado en mis mejillas, mis ojos estaban sin brillo asi que mi mirada era realmente penetrante.

-¿Quien eres? ¿Como entraste aqui?- me dijo aquel hombre que tanto repudiaba.

Mi tia me observaba como si intentara desifrar la clave de una caja fuerte.

-No me recuerdas- lo observe sonriendo- Soy yo, tu conejita.

Iten me observo de pies a cabeza hasta detenerse en mis ojos, esos ojos que irradiaban odio, coraje y asco.

-Te has vuelto toda una mujer... Una hermosa mujer- me dijo, escuchar su voz me provocaba nauseas.

-Valla tia ¿no me reconoces?- le pregunte viendola a los ojos.

-Kikyo por favor, perdoname- me dijo con un tono arrepentido.

No podia creerle ninguna palabra, tal vez por lo que ella hizo conmigo.

-Lo lamento tanto- le dije sonriendo- Pero no puedo creer en ti- comence a sacar mi espada- Tantas veces te rogue que creyeras en mi, y me ayudaras, y... ¡Jamas lo hiciste!

-Vamos Kikyo, tu no eres asi- me dijo- Somos familia.

-No soy nada tuyo, desde que no me creiste dejaste de ser algo mio- le respindi friamente- Ahora les toca pagar.

-Kikyo, ¿A caso no me extrañas? ¿No extrañas a tu tio?- me dijo Iten.

Comence a reir- No, no te extrañe, al contrario vine a buscarte para matarte maldito animal- le grite mientras me acercaba a el lentamente.

El me miro con horror mientras yo me acerque a el, le clave la espada justo en el hombro, despues la deje ahi un momento mientras ataba mi cabello, la volvi a tomar y esta vez le di en su entrepierna.

-¿Te gusta?- le dije.

El solo me observo aun aterrado, despues de eso saque la espada y esta vez la clave en el suelo, en su entrepierna, despues clave la espada en su pecho, justamente en su corazon, vi como la luz de sus ojos se extinguio.
Voltee a ver a mi tia, estaba de pie con la mirada aterrada, me levante y me acerque a ella.

-¿Porque no me creiste?- le pregunte.

-Yo... Yo... Lo lamento mucho Kikyo- me dijo- Lo lamen...

No deje que terminara, encaje la espada en su pecho provocando que su corazon colapsara, me senti aliviada, la tranquilidad llego a mi y jamas dieron con mi paradero, quise retomar mi vida pero ya era conocida como una gran asesina, fui contratada por varias personas mafiosas para hacer trabajos, sin duda era bien pagado, demasiado. Despues de 5 años conoci a Inuyasha Taisho, un joven apuesto que acababa de divorciarse, nos comenzamos a ver pequeños encuentros sexuales, obviamente todo con proteccion, y asi llegamos hasta este punto de mi vida, ese en donde solo estoy siendo usada por el hombre que amo. Kagome Higurashi no es mala, ni merece esto, ademas parece que Sesshomaru esta enamorado de ella.

Espero algun dia ser amada de la misma manera por el, por ese hombre del cual me encuentro enamorada.

Mi amado Inuyasha...

Continuara...

Cherry34806