Capitulo 21

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Despues del dulce beso ambos se separaron por falta de aire, estaban sonrojados, sus corazones latian fuertemente.

-Aome yo... Lo lamento- dijo el peliblanco algo avergonzado.

Aome estaba nerviosa, pero francamente el beso le habia encantado, extrañaba a Sesshomaru y aunque no quisiera admitirlo se habia empezado a enamorar de el.

-No, tranquilo Sesshomaru- dijo la azabache sonrojada.

-Me encantaria que me correspondieras, que me amaras como yo a ti- dijo el peliblanco- Pero se que es pronto y no quiero incomodarte, esperare el tiempo necesario.

-Muchas gracias Sesshomaru- dijo la azabache tomandolo por el brazo- Ahora sera mejor que regresemos al hotel.

-Claro vamos- dijo el peliblanco.

Ambos se levantaron y caminaron de regreso al hotel, en el recorrido ambos estaban en silencio, al llegar frente a un restaurante la azabache lo jalo para que fueran, este accedio, se adentraron al restaurante y se sentaron en una mesa, era algo sencillo pero lujoso y algo romantico, Ambos ordenaron la especialidad del dia, el joven que los atendia observaba a la azabache, ante lo cual el peliblanco comenzo a demostrar celos con una simple mirada, mientras cenaban charlaban de cosas de sus vidas mucho antes de conocerse. Hermosos y dolorosos recuerdos.
Despues de la velada Sesshomaru pago la cena y ambos salieron del restaurant y volvieron al hotel, entraron a la habitacion de la azabache se sentaron en el sofa mientras hablaban, al poco rato la azabache fue a ponerse su pijama, eran noches calurosas y la azabache dormia con un short y blusa de tirantes, Sesshomaru tomaba una copa de vino y al ver a la azabache en aquella pijama rosa con algo de encaje provoco que se atragantara con el vino, se sonrojo al 100%, pero se controlo de inmediato, la azabache seguia preguntandole sobre la empresa sin obtener respuesta.

-¿Sesshomaru?- dijo la azabache posandose frente a el.

-¿Emm si?- dijo el peliblanco reaccionando.

-Te pregunte como estaban las cosas en la empresa- dijo la azabache- Debes estar cansado, sera mejor que vallas a dormir.

-No no es eso, es solo que- dijo el peliblanco dudaba en decirlo- Es solo que te ves hermosa en esa pijama- se levanto del sofa y se poso frente a ella abrazandola fuertemente.

La azabache no hizo mas que sonrojarse y corresponder el abrazo, junto a el se le olvidaban los problemas, los traumas, era como si se detuviera el tiempo, sus mejillas ardian, se separo del abrazo y lo vio fijamente, se perdio en su mirada, esos ojos color miel que antes no reflejaban nada mas que frialdad y hoy reflejan amor en ellos, no penso que veria al peliblanco de esta manera algun dia, y ahora se alegra que sea por ella, ese brillo tan especial en la mirada del peliblanco.

-Quedate conmigo- dijo la azabache.

Sin duda alguna esas palabras sorprendieron al peliblanco, era algo que el deseaba desde hace tiempo y que hoy la chica que tenia enfrente acababa de pedirselo.

-Por favor Sesshomaru, quedate hasta que me duerma- dijo la azabache.

-Esta bien me quedare contigo- respondio el peliblanco, acariciando la mejilla de la azabache.

Dicho eso Sesshomaru fue a ponerse su pijama, un pantalon azul satinado y una camisa blanca, resaltaban su abdomen y brazos con ella, volvio al cuarto de la azabache y ahi estaba ella recostada en su cama, sabia que estaba nerviosa ya que se encontraba jugando con los dedos de sus manos, se acosto a su lado no tan apegada a ella por temor a que se asustara, pero esta se apego a el acorrucandose a el, Sesshomaru sentia que debia protegerla, y eso es lo que hara aunque sea lo ultimo que haga, no la perderia, ni dejaria que nada le pasara, poco a poco se arruyo junto a ella terminando dormidos los dos, en toda la noche no dejaron de abrazarse, al amanecer Sesshomaru la tenia abrazada por la cintura, la azabache recien despertaba, al abrir los ojos sintio unos brazos sobre su cintura y al instante recordo que Sesshomaru se habia quedado con ella toda la noche, volteo a verlo, acaricio su rostro y no pudo evitar esas ganas de besarlo, asi que unio sus labios con los de el para despues levantarse, se dio una ducha algo larga y pidio el desayuno, al poco rato lo llevaron a su habitacion, el peliblanco seguia durmiendo, pero a los pocos minutos tocaron a la puerta esta fue a abrir encontrandose con unos ojos azules.

-Bankotsu- dijo la azabache.

Continuara...

Cherry34806...

~Sin Mirar Atras~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora