Capitulo 35

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Los minutos pasaron Inuyasha la observaba detenidamente mientras estaba a la orilla de la cama, Kikyo por fin comenzo a recobrar el conocimiento con la vista algo borrosa, distinguio al peliplata y abrio sus ojos como platos.

-¿Que me paso?- pregunto la pelinegra.

-Te desmayaste- dijo el peliblanco.

La joven pelinegra toco su cabeza, le dolia.

-¿Estas bien?- pregunto el peliblanco.

-Solo me duele la cabeza- dijo la pelinegra.

-Kikyo- dijo el peliblanco.

-¿Si?- dijo la joven.

-¿Estas embarazada?- pregunto el peliblanco.

La joven palidecio de un momento a otro, recordando los analisis que acababa de recoger, su nerviosismo crecio al sentir la mirada del peliblanco sobre ella.

-Te dire la verdad- dijo la joven- Si... Si estoy embarazada y es tuyo.

-¿Como estas tan segura?- dijo el peliblanco.

-¿Que tratas de decir con eso?- dijo la joven con sus ojos llorosos.

-Que ese bebe no es mio, tal vez te acostaste con alguien mas... O tal vez es fruto de aquel dia que seduciste a Sesshomaru- dijo el peliblanco.

-¡Estas loco!- grito la joven- No he tenido nada que ver con tu medio hermano, eres el unico con el que he tenido relaciones.

-Yo no puedo estar seguro- dijo el peliblanco.

-Lamento no ser Kagome, la mujer que amas, pero lamento aun mas haberme enamorado de ti- dijo la pelinegra llorando.

-Eres tan estupida, yo no te lo pedi- dijo el peliblanco- Solo he estado contigo porque te pareces a ella.

-Eso ya lo se- dijo la pelinegra- Eres un maldito Idiota no quiero verte nunca mas en mi vida, olvida que existo y olvida que tendras un hijo.

-Tu no te iras de aqui- dijo el peliblanco- No, hasta que yo lo diga.

-Tendras que matarme- dijo la pelinegra- Asi como mataste a tu propio hijo por tus pendejadas.

Inuyasha se quedo callado ante lo dicho, sin duda alguna aun le dolia saber que Kagome perdio a un hijo suyo por su culpa.
Mientras tanto Kikyo tomo su ropa y la metio en una maleta, tomo sus cosas, su dinero y salio de la habitacion sin mirar atras, sus lagrimas caian sin poder evitarlas, lo amaba y lo unico bueno de todo eso era ese bebito que crecia en su vientre. Llego hasta un jardin y se sento en una banca, seguia llorando.

-Vamos a estar bien- dijo la pelinegra acariciando su vientre- Todo va a estar bien.

Un hombre alto de cabellera negra pasaba por ahi, observaba a la joven extrañado, finalmente decidio acercarse.

-¿Te encuentras bien?- pregunto el pelinegro.

La joven rapidamente seco su llanto y lo vio a la cara.

-Si, solo.. Solo me sentia algo mal, pero estoy bien- dijo la pelinegra.

-No tienes porque mentir, te vi llorar- dijo el pelinegro amablemente- Eres una mujer hermosa para sufrir mucho.

-No te imaginas lo que he pasado- dijo la pelinegra.

-Tienes razon- dijo el pelinegro- Te invito a tomar un cafe ¿si?

La pelinegra dudo un momento hasta que al fin accedio, el joven tomo su maleta ayudandola, ambos caminaban hacia un cafe cercano.

-¿Cual es tu nombre?- pregunto el pelinegro.

-Soy Kikyo, Kikyo Tajashi- dijo la pelinegra- Un gusto ¿y el tuyo cual es?

El joven pelinegro se quedo asombrado al escuchar el nombre de la joven.

-Yo me llamo Naraku, Naraku Yamadashi- dijo el pelinegro.

Kikyo abrio sus ojos como platos, lo observo de pies a cabeza hasta que lo vio sonreir, sin duda alguna era el, ese joven el cual fue su primer amor, esa hermosa sonrisa solo existia en el, despues de tanto al fin se encontraba feliz.

-Naraku- dijo la pelinegra- ¿Ese chiquillo que estuvo en mi fiesta de cumoleaños?

-El mismo- dijo el pelinegro.

Kikyo se levanto rapidamente, lo mismo hizo el joven, y ambos se unieron en un calido abrazo, la pelinegra lloraba tenia tantos sentimientos encontrados, despues de un rato se separaron Naraku la vio a los ojos.

-¿Como has estado? ¿Que ha sido de tu vida?- pregunto el pelinegro.

-Todo ha sido una pesadilla- dijo la joven- Un infierno.

-¿Que a pasado Kikyo?- dijo el pelinegro.

-Me enamore de quien no debia, me rompieron el corazon, hice cosas malas y...- guardo silencio la joven.

-¿Y que?- pregunto el pelinegro.

-Estoy embarazada- dijo la pelinegra con tristeza y pesar, sus ojos se inundaron nuevamente y comenzo a llorar.

Naraku la observaba con tristeza jamas le gusto verla llorar y no ella no era mala, solo era una victima de las circunstancias que le trajo la vida.

-No llores pequeña- dijo el pelinegro- Yo estoy aqui, para ti.

Se levanto de su asiento y la abrazo fuertemente.

-Nunca pude olvidarte, fuiste mi primer amor- dijo el pelinegro.

-Tu fuiste el mio- dijo la pelinegra con una leve sonrisa.

Despues de eso ambos comenzaron a charlar, mientras tomaban un cafe y una rebanada de pastel.

Continuara...

Cherry34806

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He vuelto amigos mios...

~Sin Mirar Atras~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora