Capitulo 12

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Aome se encontraba sobre el escritorio del despacho, Inuyasha la observaba con una mirada llena de lujuria, la azabache trataba de quitarse pero le era imposible.

-Inuyasha por favor- dijo la azabache.

-¡No! ¡Tu seras mía ahora!- grito el peliblanco- Ya fuiste de Sesshomaru ahora quiero que seas mía.

-¿Pero que dices?- dijo la azabache- Yo no me acosté con tu hermano, dejame por favor.

La azabache ahora lo observaba con temor, ya no era ese Inuyasha con el que meses atrás se había casado, nunca la forzó a algo, Inuyasha comenzó a irritarse mientras ambos peleaban, Inuyasha le dio algunos golpes a la azabache uno de ellos dejándola inconsciente, en ese momento este se aprovechó de la vulnerabilidad de la azabache y comenzó a penetrarla con grandes embestidas, la llevo hasta la alfombra de ese lugar y continuo violándola, Aome no reaccionaba.
Finalmente minutos mas tarde el peliblanco logro su objetivo, tomo su ropa, se vistió y se fue como si no hubiese pasado nada, los sirvientes de Aome aun no llegaban era muy temprano, minutos después la azabache despertó, se sentía adolorida de su cuerpo, en especial su parte intima, se abrazo a si misma recordando que antes de caer inconsciente Inuyasha quería forzarla a tener relaciones, se sintió sucia un gran odio nació en ella, rápidamente se levantó, aprovechó que sus trabajadores aun no llegaban, tomo su ropa y subio a su habitación, se encerró en el baño mientras llenaba la tina, después se sumergió en ella y se quedo en silencio, el resto del día se quedo en su habitación no salio, ni hizo algún ruido, jamas pensó que Inuyasha seria capaz de hacerle algo así, cada vez que lo recordaba era llanto, pero ella es fuerte y sabrá salir adelante.

Mientras tanto en el departamento de Inuyasha este se encontraba sentado en su sofá, recordando lo que le hizo a Aome, ahora estaba arrepentido, no quería eso y mucho menos dañarla de esa manera.

Al día siguiente la azabache se despertó temprano, tenia ojeras y sus ojos hinchados, la noche la paso llorando, se vistió esta vez con pantalón de vestir negro y entallado y una blusa de cuello, pues tenia algunas marcas en su cuello, brazos y piernas, salio con lentes obscuros, subió a su auto y manejo hasta la empresa, al llegar subió rápidamente a la oficina no quería que su ahora amiga la interrogara por su ausencia o por esa tristeza que ahora reflejaba, al estar sola en la oficina se sentó en su silla mientras veía hacia el gran ventanal de ahí, al poco rato fue interrumpida, una cabellera blanca cruzaba la puerta con una rosa roja en sus manos.

-Aome- dijo el peliblanco.

-Hola... Sesshomaru- dijo la azabache tratando de sonreír sin haberse quitado los lentes de sol.

-¿Estas bien?- dijo el peliblanco al notar su voz con algo de tristeza.

-Emmm si- dijo la azabache aguantando las ganas de llorar.

-Aome ¿que pasa?- dijo el peliblanco acercándose a ella y quitándole los lentes, dejando ver los ojos rojos de la azabache- ¿Que tienes?

-No es nada- dijo la azabache dándole la espalda.

-Confía en mi- dijo el peliblanco, pero ni así logro sacarle algo, la tomo del brazo para jalarla hacia el pero esta se quejo.

-¿Te duele?- dijo el peliblanco.

-Ya no me preguntes mas, soy una mala mujer, no merezco que estés aquí cuidando de mi- dijo la azabache mientras lloraba- Por favor dejame sola.

Sesshomaru no entendía el cambio tan repentino, pero tal vez Inuyasha le diría algo.

-Aome por favor- suplico el peliblanco.

-Lo siento, pero no puedo decirte nada, es algo realmente vergonzoso- dijo la azabache.

Dicho eso Sesshomaru decidió irse.

-Solo vine para darte esto- dijo el peliblanco tomando las manos de la azabache, dándole la rosa roja que llevaba con el- Te quiero Aome.

Ella solo pudo mirarlo un momento y después bajo la mirada, Sesshomaru se acerco a abrazarla y esta solo temblaba con algo de miedo pero aún así deseaba tanto su abrazo que se mantuvo tranquila, después de eso Sesshomaru se retiró de la empresa, al poco rato Sango entro a la oficina encontrando a la azabache arrodillada en el suelo con la rosa en sus manos.

-Aome ¿que te sucede?- dijo la castaña- ¿Por que estas así?

No recibió respuesta solamente sintió un fuerte abrazo de su amiga que seguía llorando como una niña pequeña.

Continuara...

Cherry34806

~Sin Mirar Atras~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora