Just The Way You Are [Kellic] (2da temporada)

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Cuando estaba con Vic dentro del coche, él había prendido la radio para evitar algún tipo de plática, o algún tipo de pregunta de mi parte, que por cierto, si tenía muchas.

Además de preguntarle cómo le había ido en la cita con el director, también tenía duda de porque no tomó mi mano cuando estábamos saliendo de aquel lugar.

No me mal entiendan, no quiero quedar como la chica paranoica de la relación; además de que estaba un poco acostumbrada a ese comportamiento de Vic.

Desde que habíamos hecho pública nuestra relación, no solía ser demasiado cursi frente a los demás, pero al menos sí hacíamos una que otra muestra de afecto, además de que me defendía cuando veía que me molestaban.

Pero al menos sí me tomaba de la mano.

—Estás muy callado— comenté cuando se detuvo en un semáforo rojo— ¿Qué tal todo?

—Perfecto— contestó Vic con un suspiro de por medio— El director se veía muy joven.

—¿En serio?— pregunté intentando seguir con la plática—.

—Si, su nombre era Andrew— contestó Vic— Y yo creo que tenía como treinta años.

—¿Y qué pasó con la beca?— pregunté de nuevo— ¿Todo en orden con los documentos?

—Si— contestó Vic arrancando el coche de nuevo— Al principio me confundí un poco porque empezó hablando de mí y luego me preguntó acerca de mi familia y que era lo que esperaba de ese intercambio.

—¿Y qué le dijiste?— pregunté mientras le bajaba el volumen al radio—.

—Le contesté con la verdad— dijo Vic encogiéndose de hombros— Le dije que sólo me había esforzado en conseguir la beca para hacer sentir orgullosos a mis padres.

—Decir la verdad siempre ha sido tu cualidad— comenté con una sonrisa ladina—.

Vic me vió con una mueca que pretendía ser una sonrisa, pero su mirada decía otra cosa; me veía con desilusión y...¿culpa?.

Apartó su mirada rápidamente en cuanto vió que fruncí levemente el ceño un poco extrañada por su reacción.

Cuando estaba dispuesta a preguntarle algo de nuevo, volvió a subir el volumen de la radio y la tomé como una indirecta para quedarme callada, aunque me moría de ganas de preguntarle qué es lo que había hecho que su expresión cambiara tan drásticamente.

Empecé a preguntarme si éste era el momento preciso para hablar de nuestra relación a futuro, total, fuera lo que fuera a pasar, nuestros ánimos no estaban tan arriba.

Además, de que me serviría mucho porque por fin podría quitarme este peso que cargaba en mis hombros, que poco a poco empezaba a ser casi insoportable de cargar.

Los chicos me habían hecho muchas preguntas con respecto a la situación y yo no sabía que contestarles porque aún no me atrevía a preguntarle a Vic qué es lo que pasaría con nosotros. Y otra razón era que me daba mucho miedo lo que Vic pudiera responder.
Realmente no estaba lista para que me dejara.

Salí de mis pensamientos cuando vi que Vic detenía el coche y quitaba su cinturón de seguridad, se volteó hacia a mí y soltó un pequeño suspiro antes de empezar a hablar para llamar mi atención.

—Kellin...— dijo Vic con un suspiro— Tenemos que hablar.

—Si, también lo creo— comenté en un murmuro—.

Vic asintió estando de acuerdo con mis palabras y empezó a jugar levemente con sus manos mientras parecía que buscaba las palabras adecuadas para empezar a decir lo que quería decir.