"Solo quiero ser amado"
"Solo quiero estar entre tus brazos y dejarme mimar".
"¿Qué me has hecho, Kim JongDae"
"¿Por qué insistes en querer estar en mi mente y hacerme sentir especial?".
"Eres esa llave de sol ante mi triste destino".
"Enséñame lo hermoso que es la vida. Kim JongDae".
Era una hermosa tarde, de un día soleado y con muchas flores de cerezo inundar aquella calle. Ya había transcurrido como cinco días desde que el omega gatuno había tenido esa peculiar charla con su mejor amigo y no supo cómo reaccionar cuando el novio de éste le hacía entrega de un pequeño papel con la dirección de ese alfa leopardo.
MinSeok estuvo como cuatro días meditando su decisión, aquella que lo ponía muy nervioso y precisamente ahora, se encontrara justamente en frente de esa mediana casa. — ¿Qué es lo que estoy haciendo? — se preguntó a sí mismo, mientras titubeaba en su interior. Sí debía presionar el timbre y de esa forma, enfrentar sus problemas. O simplemente no hacerlo y marcharse. No era la gran cosa de que estuviera ahí, enfrente de la casa de un alfa desconocido y que tan solo había interactuado con él en unas par de ocasiones, pensaba. Sin embargo, su instinto decía lo contrario y que era lo correcto. Él debía de dar ese paso para poder encontrar la tranquilidad. Joder, él estaba ahí porque quería ver a Kim JongDae, él quería agradecerle. MinSeok quería hablarle, sentir su aroma, su voz y sobre todo besarlo. ¿Besarlo? Quizás no sea una opción. Pero en fin quería verlo.
Ya había transcurrido como media hora y todavía no podía armarse de valor y tocar el timbre. Él no se sentía realmente seguro de hacerlo, pero aunque lo quisiera, simplemente no podía.
— ¡Por la crema! — gruño el omega gatuno mientras no apartaba su mirada en la puerta metálica del portón y posteriormente daba un suspiro, por su propia indecisión. Realmente se estaba cabreando de ser inseguro e indeciso. Sin embargo, una voz hizo que diera un brinco y se girara, para esa forma conocer el dueño de la voz. Pero con tan solo sentir la presencia de ese individuo, se sintió intimidado.
— Hola, ¿Te puedo ayudar en algo? — preguntó de repente un hombre, que de un movimiento se ubicó a su lado y posteriormente lo comenzará a mirar con curiosidad en sus ojos. Como si tratara de descifrar un código computacional. Y acto seguido, sacaba un llavero de unos de los bolsillos de la ramera que llevaba puesto.
—Esto..... Ehh..... — comenzó a titubear MinSeok mientras se ponía nervioso y al mismo tiempo, sus mejillas comenzaban a mancharse con un pequeño rubor.
— ¿Estás buscando a mi hermano? — Preguntó ese alfa –Si, es un alfa–de repente, mientras lo veía curioso y con una sonrisa amable en su rostro. Para JunMyeon, él presentía que ese chico tenía algo que ver del porqué su querido hermano menor se encontraba en ese estado. Desanimado y con ganas de hacer nada. El pobre de JongDae se la pasaba encerrado en su habitación y rara vez bajaba a cenar.
— Ehh...... Mmm.... — volvió a titubear, mientras jugaba con sus dedos y sin poder articular de forma coherente, además de sin poder expresar sus verdaderas intenciones.
— Soy Kim JunMyeon. Hermano de Kim JongDae. Por si lo estás buscando — exclamó de forma suave y segura, mientras le dedicaba una pequeña sonrisa al omega gatuno que tenía en frente. En ese momento, MinSeok al oír eso se tranquilizó, debido que ya se encontraba entrando en pánico, con tan solo oler ese aroma en particular de los alfas.
— Si.... Lo estoy buscado — respondió de forma muy bajita, mientras tenía la cabeza gacha y mirando sus pies. Él se sentía avergonzado.
— No seas tímido. — exclamó JunMyeon mientras ingresaba la llave en la cerradura del portón y luego abriera la puerta. — Sígueme, te llevaré donde él. No tengas miedo. — añadió, mientras le hacía un gesto con una de sus manos, incitando que lo siguiera. En ese instante, el tímido omega lo pensó por unos segundos antes de asentir y posteriormente, comenzará a seguir al Alfa, hacia el interior de la casa.
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Tú eres mi salvación | CHENMIN Omegaverse
FanfictionTodo había sido un desastre. La persona que más confiaba lo tomó por la fuerza y desde ese fatídico día lo recordaba. MinSeok, un hermoso y delicado omega gato montes, tenía un gran y oscuro secreto. Él había sido marcado y su Alfa se había dado a l...