Cincuenta y uno || Problemas resueltos.

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Capítulo 51
Problemas resueltos.

3 CAPÍTULOS PARA EL FINAL.

Los sábados siempre fueron los días favoritos de muchas personas y más para aquellos que estudiaban, que el sábado llegara significaba que al fin podrías dormir y despertarte a la hora que quisieras, que cuando te levantaras no tendrías que arreglarte para ir a clases, sino que para ir a desayunar o, en algunos casos, a comer.

Sin embargo aquel sábado en el castillo se podía ver el Gran Comedor a tope, todo mundo desayunaba mientras platicaban alegremente entre si, todos muy emocionados y energéticos, todo por una razón que despertaba la pasión en todos y lograba que nadie quedara en su cama siendo solamente las nueve de la mañana.

La final de quidditch, como todos los años a final de ciclo escolar solamente dos de cuatro casas llegan a la final, y como han sido los últimos años no era necesario decir cuáles fueron las casas que estarían jugando hoy por la copa de quidditch. Los colores escarlata y verde esmeralda relucían en todo el gran comedor: en las paredes, en los atuendos de los estudiantes y maestros, y en las banderas y objetos de apoyos hacia las casas.

En la mesa de las serpientes una rubia con un cuerpo de muerte estaba sentada, revolviendo su plato de cereal sin parar y mirando a un punto indefinido. Como cada que había partido Malia Malfoy vestía sus pequeños shorts de licra que dejaban a la vista unas piernas por las cuales muchos morían y hacía que sus posaderas resaltaran más, su playera del equipo de Slytherin con su apellido y numero reluciendo en la espalda de un plateado demasiado particular en los Slytherins y con una alta cola amarrada en su cabeza, dejando todos los pelos en su lugar. Al menos por el momento.

— Si no comes perderemos.

Malia alzó la vista de su plato lleno y observó a su hermano con atención, este la miraba con reproche y preocupación.

— Tener o no comida en el estomago no hará que juegue mejor o peor, hermanito.

— Pero no es bueno jugar en ayunas, es algo que siempre nos has dicho.

— Bueno, hoy será la excepción — comentó Malia, levantandose de su lugar logrando que varias curiosas cabezas voltearan a verla y que varias personas de la mesa de Slytherin aplaudiera y gritara a la capitana, animándola.

— ¿Quién será cazador con nosotros? — preguntó Scorpius mientras veía como Malia agarraba su escoba la cual se encontraba recargada en la pared, Malia suspiró con cansancio y llevó la vista a él.

— Zabini — Scorpius frunzo el entrecejo y la observó con curiosidad.

— ¿Kate? La odias.

— Sí, pero también es la única y mejor opción que encontré — Scorpius abrió la boca para replicar pero antes que pudiera decir algo Malia se dio la vuelta, dándole la espalda —. Avísales a los demás que los quiero lo antes posible en los vestidores.

Y dicho eso empezó a caminar, con la cabeza en alto y la escoba en mano.

Por lo general los puestos de cazadores del equipo de Slytherin eran integrados por Malia y Scorpius Malfoy y Stella Nott. Pero, dadas las circunstancias, Malia tuvo que ingeniarselas para buscar alguien que pudiera reemplazar a Stella en la final.

Así que unos días atrás hizo unas pruebas para cazador y, aunque no le gustará, Kate Zabini fue la mejor opción de todas; no era de su agrado pero la chica tenía estilo en la escoba.

El sol le dio de lleno en la cara cuando salió los terrenos del castillo, estos estaban vacios a excepción de Hagrid, el cual pudo divisar donde eran las clases de Cuidado Sobre Criaturas Mágicas dándole de comer a un hipogrifo.

Juntos por el destino » James Potter. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora