Hotel Mount Massive

Entrar a Mount Massive

El frio aire de la montaña, los grandes y frondosos árboles, y los sonidos que solo podía provenir de la naturaleza.

Era una sensación indescriptible, entre la tranquilidad y esperanza.

Quizás podría volver a escribir, lisa había quemado todos sus escritos, pero ahora ella no estaba cerca y tendría el tiempo del mundo para hacer lo que deseara.

-estamos a unos minutos de llegar señor Park-

-muchas gracias-

Respondió con amabilidad.

Ambos se rieron, tenían una extraña relación, un lazo tan fuerte que incluso terminaban la oración del otro.

Había leído de ello en libros de psicología, pero ni en mi imaginación pensé presenciarlo.

Era extraordinario ver como se relacionaban, como si fueran solo uno.

Ojala el tuviera alguien con quien hablar así...

Pensó con nostalgia, mientras recordaba a lisa y su primera cita.

*

*

*

La primera vez que vi a Waylon Park, fue cuando preparaba el desayuno.

No podía entender que veían en el.

Si era guapo, eso no podía negarlo, pero fuera de eso no había nada especial en él.

Un simple hombre de 33 años con una vida común y corriente.

Un trabajo mediocre con el cual ganaba apenas lo necesario para mantener a dos bastardos que ni siquiera eran suyos.

Una esposa que era una total zorra, mientras él trabajaba ella se acostaba con cuanto hombre se lo pedía.

Era impensable porque la solicitud de invitarle a su hogar.

Normalmente el pedía que trajera a celebridades, artistas, y políticos, el último en la lista fue un embajador de india, un hombre de belleza sin igual y una melodiosa voz.

Sus peticiones de comida fueron todo un desafío, sabores exóticos que llenaron a Frank de trabajo por días...

Claro está el hombre fue un idiota, y tuvieron que terminar su estadía demasiado pronto.

Era por ello que no entendía esta solicitud.

El chico solo había salido en una foto, una miserable foto de la empresa para la que trabajaba.

Aun así fue suficiente para sus amo.

Esa maldita fotografía le tuvo buscando por meses hasta que encontró toda la información de él.

Incluso tuvo que pagarle a Miles Upshur para que le investigara.

Claro está que con cada informe que le entregaba a su amo, este se obsesionaba más y más.

Las fotos de Miles no ayudaron en nada, el tipo era bueno si debía admitirlo.

Había toda clase de imágenes, desde Park con su familia hasta Park bañándose.

No tenía ni una idea de cómo las había conseguido, pero valían cada centavo que le pagaba.

-señor el auto está llegando-

-prepárense todo el mundo, Waylon Park entrara en Mount Massive-