Capítulo 4

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El lunes, cuando JungKook volvió a la escuela, un peso enorme se instaló en sus hombros, uno que él denominó como "LaMaldiciónDelFeoQueSeEnamoróDelBello". Bien, no había conseguido hallar nombre más corto así que se quedó con ese. Soportó los tropezones y las burlas hasta que llegó al salón. Pero el peso de L.M.D.F.Q.S.E.D.B aumentó al ver a Seok Jin en el aula hablando animadamente con un grupo de omegas y betas. Bien, tenía que caminar rápido, ocultarse tras su bufanda de Slytherin y sentarse frente a HoSeok y NamJoon como era la costumbre.

Salteó los obstáculos (alias pupitres), se aseguró de que no hubiera trampas en el perímetro y siguió su camino. HoSeok al verlo le hacía señas para que supiera que estaba fuera de peligro, Nam, a su lado, fingía tener unos binoculares con los que vigilaba el aula. JungKook siguió con su arriesgada misión hasta que se sintió a salvo en su pupitre donde dejó sus cosas y volteó a ver a sus amigos.

-¿MinMin?

-Consiguió la pócima de la invisibilidad, está sentada al lado tuyo-NamJoon palmeó el aire como si tocara la espalda de alguien en el lugar de JiMin-se ve bien ¿no?

-Idiota-Kook rio-me sorprende que llegue tarde.

-Es probable que su alarma no sonara, no sería la primera vez.-comentó HoSeok.

-O su mamá no la despertó, Lisa suele ser así, dice que le da lástima despertarla cuando la ve durmiendo como un angelito.

-Sí, angelito que lee porno gay por las noches-dijo JungKook rodando los ojos.

-Vamos ¿Quién no lee porno?

-Yo lo veo, HoHo, no lo leo.-comentó NamJoon.

-Qué triste, el porno parece una película de ciencia ficción para nosotros.

-¿Por qué, Kookie?-preguntó HoSeok.

-Porque jamás nos pasará algo igual.-suspiró antes de acostarse sobre su pupitre-Estoy tan cansado de vivir.

-Suenas tan deprimente ¡Alégrate muchacho! ¡La vida es muy corta para estarse deprimiendo porque morirás solo y virgen!

-SeokHo, todos te escucharon-NamJoon se palmeó la cara y Kook enterró su rostro entre sus brazos.

En el recreo podía matar a HoSeok, planear un asesinato no era fácil pero era posible no ir a prisión por ello.

-No es extraño eso, con esa cara ¿Quién querría estar con él?-comentó una omega del grupo donde estaba Seok Jin.

Kook pudo verla por el rabillo del ojo.

-Esos granos y esa nariz ¡diuj! Qué asco-dijo burlonamente un beta.

-Es un alfa horrible-rio otro que no supo si era omega o beta.

Rodó los ojos, acostumbraba a esos comentarios. Pan de cada día. Definitivamente era así.

-¿Qué les importa a ustedes cómo sea él o deje de ser?-la voz de Seok Jin parecía molesta, giró a verlo-¿Acaso no tienen vida y cuerpos propios?

Pudo notar, al igual que sus amigos, la incomodidad y la vergüenza de ese grupo que lo rodeaba. JungKook no salía de su asombro, era la primera vez que alguien que no perteneciera a su grupo de amigos se metiera a defenderlo. Su alfa interior se regocijo al saber que su omega lo había defendido...se sintió feliz de que pasara.

De repente, toda la atención e incomodidad desapareció cuando JiMin apareció corriendo y golpeando la puerta al abrirla y casi dejarla unida a la pared. Se veía agitado, con las grandes mejillas sonrojadas y la ropa desarreglada. Al verlos corrió hacia ellos, acomodándose la falda a cuadros y arrojando su bolso a su pupitre.

La bella y el feo [KookJin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora