La bella y el feo [KookJin]

Especial: YoonMin

JiMin terminó de maquillarse cuando el timbre de su casa sonó. Se miró en el espejo, acomodó su vestido blanco y el moño de su trenza antes de bajar. Lisa había sido quien había abierto la puerta y ahora miraba a YoonGi como si fuera la peste.

-Nada de hoteles,  condones ni nada que ponga en riesgo la integridad física-sexual de mi niña-amenazó justo cuando JiMin estaba a pocos pasos de ellos.

-Sabe que no lo haré-dijo YoonGi, siendo respetuoso como pocas veces en su vida.

-Papá, ya me voy-dijo JiMin pasando por su lado-. Nos vemos a las siete.

-Sé puntual y cuídala o te sacaré las ganas de vivir a golpes-y tras esas suaves palabras, Lisa cerró la puerta.

JiMin rodó los ojos y tomó la mano de YoonGi para ir a la cafetería que había deseado ir desde hacía dos semanas. Pero su alfa separó sus manos para tomarlo de la cintura. JiMin sonrió y acomodó un mechón de cabello.

-¿Investigaste un poco del lugar?-preguntó sonriendo.

-Sí, usé a Seok Jin. Le dije que fuera ahí con JungKook y luego me contara-YoonGi se encogió de hombros-Según lo que escuché, parece una típica cafetería para niñas bobas y rosas.

JiMin le pellizcó al costado y YoonGi rio adolorido.

-Es un lugar genial-dijo haciendo un puchero.

YoonGi lo acercó a su cuerpo y le dio un pequeño beso en los labios.

-No para mí, hubiera preferido quedarme en casa. Pero a ti te gusta y es lo único que cuenta-dijo antes de volver a caminar.

-No debería contar solo mi opinión. Tú también tienes derecho a opinar sobre nuestras salidas.

-Lo único importante de nuestras salidas es que tú estés ahí, al menos para mí. Sabes que no soy de salir mucho, si fuera por mí viviría en mi habitación-YoonGi sonrió-Sin embargo, mi reina necesita conocer el mundo y no vivir en un frasco.

-Pensé que era tu princesa-dijo JiMin sonrojándose y bajando la mirada con una sonrisa tímida.

-Lo eras, hasta que recordé que si tenemos hijas ellas serán mis princesas y tú mi reina-comentó YoonGi sin darse cuenta del sonrojo en las mejillas de JiMin.

Aunque el alfa conocía tan bien a su omega que no hacía falta mirarlo para saber sus reacciones.

El resto del camino fueron en silencio hasta que llegaron a la dichosa cafetería. Tomaron un lugar casi al fondo donde había menos personas. JiMin miró encantado la variedad de cosas para pedir y terminó eligiendo una porción de pastel de fresa con la forma de un conejito y una malteada de chocolate. YoonGi solo pidió dos donas gladeadas y un café. A él no le importaba mucho el lugar que parecía sacado de la zona más kawaii de Japón. JiMin, por otro lado, estaba fascinado.

-Me encantaría venir más seguido aquí-comentó mirando las paredes decoradas.

-Si te hace feliz, te traeré todos los fines de semana aquí a desayunar-dijo YoonGi mirándolo.

JiMin se giró a verlo.

-¿En serio te levantarías temprano solo para venir conmigo aquí?

-Por supuesto. Además tengo las siestas todavía para disfrutar-YoonGi se encogió de hombros y JiMin sonrió.

Cuando llevaron sus órdenes JiMin casi muere de ternura con la formita del pastel. YoonGi no le prestó atención y comió sus donas junto con su café.

-¿Viste la cartelera del cine?-preguntó JiMin luego de tomar un poco de malteada.

-No-negó YoonGi-, le pregunté a TaeHyung qué me recomendaba. Pero nada de lo que dijo sonaba bueno. Además solo me dijo dos películas.