Capítulo 3

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- ¿Sí?

- ¿Cómo amaneciste?

- Mejor, ahora me levanto para ir a tomar desayuno.

- ¿Qué? ¡No! Tienes que estar acostado, pide que te lleven algo a la habitación.

- Me aburro estando aquí.

- Voy para allá, acuéstate Christopher.

Era agotador estar acostado todo el tiempo. Preferí esperarlo afuera.

Pude ver cómo aparecía en el pasillo. Eran tan hermoso, no sé como no me había dado cuenta antes de lo perfecto que era.

- Deja de mirarme - me sacó de mis pensamientos - tienes que estar acostado Christopher.

- Si te quedas conmigo - propuse.

- Tenemos ensayos, si quieres después te vengo a ver.

- Iré a los ensayos entonces - vi que iba a contradecirme - solo iré a ver, bueno...a verte.

- Hehe...- su mejillas tomaron un tono rosado - no me digas esas cosas.

- Mi flaquito - lo envolví en un abrazo. No pude contenerme y él tampoco se negó - vamos a desayunar.

Estaba sentado con la mamá de Erick viendo los ensayos, no era que los demás no me importaran si lo hacían bien o no, solo que mi vista en todo momento estaba posada en él.

Aprovechando que venía una parte en la que tenía que bailar él, le tiré un beso desde abajo dejándome ver su hermosa sonrisa. No había nada más tierno que verlo sonreír.

Así estuve durante todo el ensayo, mirando cada cosa que hacía, cada gesto, cada estupidez. De vez en cuando hablaba con mi suegra, aunque Erick ya no era mi novio yo la seguía considerando mi suegra y como no si también se preocupaba por mi.

- La voy a extrañar cuando Erick cumpla los dieciocho, ya no tendremos quien nos cuide - dije de la nada.

- Yo también, ustedes tienen que ayudarlo que son los mayores.

- Claro que sí, yo lo cuidaré mucho.

- Eso me preocupa, a veces tu pareces el menor del grupo - dijo en forma de broma.

Me abracé a su abrazo - ya verá que estará excelente junto a nosotros.

Erick era muy celoso con su mamá, tenía su mirada fija en mi esperando que la suelte, cosa que no hice.

- Déjala - se sentó en sus piernas quitándome de su agarre, la señora Daysi solo reía.

- Qué celoso, solo la estaba abrazando.

- Es mía.

- Brian deja a Christopher - me llevó hacia ella en un abrazo.

No le quedó de otra que aceptarme en el abrazo, yo sé que por dentro el que se moría por abrazarme era él.

- Creo que me iré a la habitación - comencé a sentir nuevamente los temblores en mi cuerpo.

- ¿Estás bien? ¿Te acompaño?

- Te lo agradecería.

Fuimos a paso lento, no me enfermaba casi nunca pero cuando lo hacía eran muy fuerte los malestares.

- Tienes unas ojeras horribles Chris.

- Dormí muy mal anoche, necesitaba un enfermero - lo miré.

- En los hospitales hay muchos, si quieres te voy a dejar allá - me sentó en la cama y caminó a cerrar la puerta - ¿Te acuerdas cuando me enfermé esa vez cuando me tiraste a la piscina?

- Claro que sí ¿por qué?

- Porque ahora te voy a cuidar yo, pareciera como si todo se estuviera repitiendo.

- Extraño esos momentos juntos, te extraño a ti - tomé su mano que estaba helada - quiero volver el tiempo atrás aunque sea solo por un momento.

- Son lindos recuerdos, los mejores.

Merecemos Amar - Chriserick (Segunda Parte)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora