- No te pongas así - traté de reparar lo que había provocado.
- Ponte en mi lugar por un momento.
- Y en mi lugar quién se pone ¿Eh? ¿Quién me entiende a mi? - solo se quedó en silencio observandome - estamos en la misma situación Erick.
- ¡NO ES LO MISMO!
- ¿Por qué? ¿Tú crees que yo no siento y que no me afecta todo esto? Una cosa es que no lo demuestre, tú más que nadie me conoce Erick.
- No me vuelvas a hacer dudar, no quiero quererte más - sus ojos estaban algo brillantes, como si quisiera llorar.
- Házlo, quiéreme - pedí - eso es lo que necesito, que alguien me quiera sin importarle quien soy o como soy.
- Yo te quiero Chris - su cabeza agachada ocultaba su tristeza - de verdad que lo hago.
- Nos estamos dejando limitar por otras personas Erick. Eso no está bien, estamos siendo unos cobardes, los dos.
- No podemos hacer nada, por algo estamos así y te recuerdo que no fui yo el que huyó.
- Acepto que me equivoqué, pero eso ya lo habíamos hablado y tú estuviste de acuerdo al final de todo.
- Renato confió en nosotros, hay que cumplir con nuestra palabra.
- Renato Renato Renato, que me importa a mí Renato - levanté su mentón para que me mire - deja de pensar en los demás, en lo que quieren los demás. ¡Piensa en ti, en mi, en nosotros! Los que nos estamos haciendo daño somos los dos con esto.
- ¡TENGO MIEDO! Tengo miedo Christopher - se me partió el corazón al ver lágrimas caer por sus mejillas.
Me acerqué para abrazarlo, me daba rabia que sea tan frágil y que todo le afecte, me daba rabia sentir que estaba presionado con todo esto, rabia de sentir que quiere ser feliz conmigo y se negaba.
- Extraño al Erick que a pesar de tener una relación conmigo a escondidas estaba feliz, dispuesto a pasar momentos lindos aunque sea entre cuatro paredes - dije sin soltarlo.
- No me digas esas cosas que me siento peor.
- La verdad duele, ahora me doy cuenta de que eso es verdadero.
- ¡Ya Christopher! ¡Basta! - se quitó de mis brazos - ¿Quieres hacerme sentir mal? Porque si es así lo estás haciendo.
- Sabes que no, solo digo la verdad.
- Ya estuvo bueno - se levantó de golpe para irse, siempre que quería evadir algo hacía lo mismo.
- Si cruzas esa puerta daré por hecho que no quieres estar conmigo - al escuchar eso se detuvo y giró su mirada hacia mi.
Dejó su cuerpo caer hasta quedar sentado en el suelo apoyando la frente en sus rodillas.
No iba a dejarlo ahí solo, me paré para sentarme con él, demostrarle que conmigo siempre tendrá apoyo, que puedo ser su respaldo.
- Date cuenta Erick, no sigas haciéndote daño con esto - acaricié su espalda - seamos felices, juntos.
- ¿Cómo antes?
- Mucho más que antes, tengo tanto cariño, amor para darte - al escuchar eso levantó su rostro de inmediato.
- ¿Amor?
- Sí, que lo diga yo quizás suene raro, pero es lo que nunca le he ofrecido a nadie - dije sincero.
No sé porqué pero no dijo nada, solo se me quedó mirando.
Me acerqué para secar sus lágrimas que seguían corriendo, cada vez que agachaba su cabeza yo la volvía a levantar, no quería que esos hermosos ojos dejaran de mirarme.
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Merecemos Amar - Chriserick (Segunda Parte)
FanfictionNos quedamos mirando un momento, su mirada se posó en mis labios en los que él medio mordía los suyos, tragué con dificultad ante eso. Me acerqué un poco para llegar a sus deseosos labios... -NO SE PERMITEN ADAPTACIONES-