Señor luna 🌙 Yugkook

🌒 08 🌘

Los días y hasta semanas continuaron con normalidad, como cualquier día otro. Pero la amistad de Yugyeom y Jungkook había crecido. Luego de hablar sobre sus gustos, temas de sus padres y demás entendieron que eran demasiado iguales. Desde hace días o Jungkook iba a la casa de Yugyeom o Yugyeom a la de Jungkook, a hacer tareas o simplemente pasar el rato. Para los de su universidad era raro ¿Qué alfa y qué omega eran amigos? Algo totalmente imposible para todos, algo posible para ellos.

Jungkook comenzaba a sentirse más tranquilo, podía disfrutar de el olor del alfa muy de cerca. A veces quedaba un poco de éste sobre sus almohadas y sus cobijas, pudiendo quedar dormido como si estuviera con él. También que en la mayoría de las clases se sentaba con él y a Cherii no le molestaba, de hecho, lo disfrutaba. En algunas ocasiones por las frases de el alfa su corazón se aceleraba y sus mejillas se ponían rojas. Porque, sólo lograba enamorarlo más, pero eso estaba mal, sólo era una ilusión que lo estaba haciendo caer.

Pero no podía, la conexión entre su omega y su alfa cada vez se volvía más fuerte... Y Ninguno lograba controlarlos.

El día anterior habían quedado (como todos los días) que verían una película en la casa del alfa, poniendo nervioso a Jungkook. La mayoría de las veces era en su casa y cuando era en la de Yugyeom sus padres no estaban, y ésta vez sí. Tenían proyecto para la universidad la próxima semana, algo fácil, aunque no muy sencillo.

Las clases fueron más aburridas de lo usual, los maestros parecían molestos ése día, al igual que el cielo de un momento a otro se encontraba soleado y luego nublado, de ésa manera sucesivamente. Jungkook casi se queda dormido en una clase, tenía la mano en la mejilla y comenzaba a cabecear con el tiempo, sólo que Yugyeom le tocó el brazo riendo, logrando que se pusiera rojo y se reacomodara en su asiento.

En su única hora libre, la hora del almuerzo. Prefirió irse a sentar a una de las meses vacías, sacó su tableta, comenzando a dibujar cosas sin sentido. Yugyeom había ido con sus amigos a traer unas cosas, así que no se sentaría con él. Avergonzado por lo que estaba a punto de hacer, formó un corazón y adentro colocó una Y con una J, decorando las letras de bonita manera. Un olor a limón lo sacó de sus sentidos y rápidamente lo borró, mirando al frente.

— Hola Kookie ¿Qué dibujas?— Yugyeom se acercó hasta él. Jungkook formó una sonrisa nerviosa sin saber que contestar, desde hace unos días comenzaron a llamarse por apodos, y les gustaba.

— Nada interesante Yugy, tú... ¿No ibas a recoger unas cosas?— Preguntó curioso, apagando la tableta.

— Si quieres me voy.— Sonrió risueño, de inmediato Jungkook se arrepintió de sus palabras y negó repetidas veces.

— ¡No! Digo, no es eso, pensé que tardarías más.— Sentía las manos sudadas y la cara caliente, ya sabía que su rostro estaba rojo como una manzana.

Tierno fue lo que pensó el alfa de Yugyeom, pero éste lo regañó.

— Sólo venía a avisarte de que no tendremos más clases, la maestra faltó por cuestiones familiares, eso significa que estaremos más tiempo juntos.— Más tiempo juntos, oh Dios ¿Acaso el mundo quería que todo el tiempo estuviera sonrojado y esperanzado con su alfa? Asintió a lo que dijo Yugyeom, antes de irse le dijo que lo esperaría en su carro cuando terminara el almuerzo.

Apuró a terminarse una pera que comía anteriormente, justo cuando la acabó fue que el sonida de la salida se escuchó por todos lados. Tomó sus cosas, caminando con rapidez hasta el estacionamiento, donde como le dijo ya se encontraba ahí, de la peor manera posible para Jungkook. De alguna manera llevaba lentes negros, recargado sobre su coche, con las manos en el bolsillo, como en ésas típicas películas donde es el chico más popular de la escuela.

Se colocó enfrente de él, con una sonrisa completamente alegre, mostrando sus dientes. Yugyeom le sonrió de vuelta, conteniendo las ganas de acariciar sus cabellos castaños. Dejó que entrara al auto y lo prendió rumbo a su casa.

El sonido del carro de Yugyeom parando enfrente de su casa lo sacó de su trance. Tragó saliva mirándola, saliendo junto con el alfa, escuchó el sonido de las puertas del auto cerrarse. Acomodó su mochila sobre su hombro, terminando de escribirle un mensaje a Seokjin después de que se enterara por completo sobre lo que pasaba con el alfa y él. El alto aclaró la garganta, y Jungkook levantó la mirada, siendo señalado con la cabeza a el omega que debía entrar. Rió nervioso pasando a su lado y éste cerró la puerta principal.

Cuando iban en camino al cuarto del alfa, unas voces se hicieron presentes, llamando a Yugyeom. Él le tomó del brazo para que lo siguiera. En la cocina dos personas estaban de espaldas cocinando algo y luego de que voltearon miraron a el alfa pero luego a Jungkook.

— Oh, Yugyeom ¿Él es Jungkook, el vecino?— Preguntó Youngjae, sonriéndole de tierna manera a Jungkook, por su aroma notó que era un omega, muy tierno a su parecer.

— Sí. Jungkook ellos son mis papás, Jaebum y Youngjae. Papá Jae, papá Young, él es Jungkook, hijo de Taehyung y Hoseok.— El chillido de su padre sorprendió a Jungkook, él fue hasta donde estaba y tomó sus mejillas apretándolas.

— Eres adorable Jungkook ¿Por qué antes no habías venido? Tus padres vienen todo el tiempo.— Sus nervios no dejaban contestarle, al igual que su cara estaba toda roja. Yugyeom rodó los ojos poniéndose detrás de Jungkook, y colocando las manos en sus hombros, notando la diferencia de altura.

— Bueno, voy a mi cuarto con Jungkook, veremos una película. Pueden ir si necesitan algo.— Lo jaló de vuelta, sin dejar que Jungkook se despidiera.

— ¡Un gusto señores Jae!— Exclamó Jungkook siendo callado después por el sonido de la puerta.

— Es el omega de Yugyeom, Jaebum.— Susurró Youngjae completamente seguro.

— Puede ser, pero tu hijo dice ser hetero.— Rió siguiendo picando unas verduras.

— Ya veremos eso.— Sonrió malicioso, acompañando a su esposo.

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Sé que dije que serían todos cortos, pero éste me salió largo 😧.

Bueno, me voy uwu.

¡Nos leemos luego!