Chapter 36

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No más drama de chicos

-¿Que te parece este?-La pelirroja se pego un vestido a su pecho. Apreté mis labios, nunca me gustaron los vestidos, en general. Me encogí de hombros, haciendo que Sadie me mirara ladeando la cabeza-No te traje para ser una estatua.

-No creo que quieras escuchar mi verdadera opinión acerca de los vestidos-Alce mis brazos en el aire. La pelirroja rodó los ojos.

-Supongo-Me dio la razón para después voltearse y verse en el espejo. Soltó un suspiro-Creo que es demasiado corto. Me probaré otro.

Le asentí. La pelirroja volvió al vestidor. Golpee con mis manos mis piernas algo aburrida, estas cosas nunca fueron lo mío. Hablo en serio cuando digo que no me gusta ir a comprar ropa, mi madre sabe mi estilo así que viene con algunos conjuntos para mi cuando ella se va a comprar -la pobre ya no me pelea más y ni me dice cuando se va-. Pero esto de probar cosas en vestidores sin ninguna seguridad de que nadie te verá en ropa interior apesta. Más si es un vestido, detesto mostrar mis piernas.

-Debemos elegirte un vestido-Apareció nuevamente Sadie sonriendo exageradamente. Negué rotundamente con la cabeza.

-Olvídalo, yo solo te acompaño.

-Si no vas a elegirte un vestido, te lo elegiré yo-La mire de forma asesina, hasta que recordé que puedo "no ponérmelo" y volví a un rostro relajado. La pelirroja lo noto, sonriendo con malicia-Se lo daré a tu mamá junto con la fecha del baile y te obligará a ir.

Borre mi sonrisa, admire a la Sadie sonriente con pesimismo y suspire-Esta bien, elígelo-Dije encogiéndome de hombros.

-Okey-Respondió Sink con simpleza y se dirigió a un encargado que se cruzó por su camino ya que estaba cargando cajas de zapatos-Disculpa, ¿sabes donde venden vestidos cortos y ajustados?

Abrí los ojos como platos. Que hija de...

-¡Okey!-Exclamé levantándome del sillón con desesperación. Sadie echó una carcajada y le agradeció al muchacho de todas maneras. Restregué mi cara con mis manos frustradas-De acuerdo, maldita pelirroja, vamos a elegir un vestido.

Ella sonrió emocionada y me agarro de la mano para -literalmente- arrastrarme hasta la sección de vestidos nuevamente. Rodé los ojos. Como amo-odio a esta pelirroja. Ya me estaba olvidando de ese sentimiento, ya que otra persona lo estuvo ocupando con mucho más protagonismo. Quite ese pensamiento de mi cabeza y comencé a correr vestidos colgados en los estantes.

-Debería llamas a Sophia-Soltó Sadie después de unos minutos de mirar sin ningún éxito. Al escuchar eso, me di vuelta y corrí hasta la ojiazul para arrebatarle el móvil.

-¡No!-Dije frenética. Sadie frunció el ceño.

-¿Por que?

-¿Como que por qué? Es Sophia-Explique obvia-Estaremos aquí por cinco horas y no volveremos a casa hasta la noche. Y cuando lo hagamos, nuestros bolsillos estarán literalmente vacíos.

-Exageras-Me mordí el labio inferior.

-Esta bien, llámala, pero hasta que llegue tendremos que haber encontrado un vestido, o nos quedaremos a dormir aquí mientras escogemos.

-Bien bien-Asintió Sadie dándome la razón-Elige como mucho tres vestidos, y cuando los tengas, llamamos a Sophia, a Wyatt y a Jae...

La pelirroja calló al instante, bajé la mirada al siguiente segundo. Se separó el grupo maravilla, dolerá por un tiempo hasta que me acostumbre. Voltee nuevamente hacia la ropa, corriendo las prendas con lentitud. Ay Jaeden, ¿por que la tuviste que cagar así? Las lágrimas amenazaron con salir, el solo recordar sus palabras causaban tanto dolor como nostalgia; ese fue el preciso momento en el sentí el verdadero vacío que genera una persona cuando se va. Pero me negué a sufrir, ya tengo demasiado de que preocuparme para que este...este idiota venga y me arruine la vida. ¿Te fuiste? Pues jodete, Jaeden.

I am not easy [Fillie]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora