"El amor es efímero,
El amor es doloroso,
El amor es un fruto prohibido,
Así que,
Con mayor razón el ser humano decidió probarlo,
No hay nada igual
Como un amor clandestino"--Ya deberías dormir, Erza, es tarde--Dijo la rubia rodando sobre su cuerpo, dandose vuelta en la cama hacía la dirección en la que estaba Erza.
--¿Mmmh?--Murmuró la peli roja dándole la vuelta a la página del libro entre sus manos.
--Ve a dormir, podrás seguir leyendo luego--
Pero Erza seguía sin escucharla.
Sonrió y negó con la cabeza, levantandose.Caminó silenciosamente hacia la cama de Erza, gateando para llegar al rincón de esta, donde se encontraba leyendo su amiga.
Puso una mano en el libro y lo bajó un poco.
--Oh, hola--Dijo graciosamente Erza, sonrojandose al sentir tan cerca a Lucy.
--Hola-- Se río Lucy quitando el libro de las manos de Erza y acercandose más a ella hasta quedar sentada a su lado.
--Lo siento, se me ha pasado el tiempo--Se disculpó la maga de la amadura ríendose un poco y observando la hora--¿¡Tan tarde es!?--Lucy asintió con la cabeza sonriendo.
--Ya no te quieres despegar de ese libro--
--Es bastante interesante--Se defendió Erza cruzando sus brazos y haciendo morros con sus labios como una niña pequeña.
--Erza, eres un bebé--Se burló Lucy poniendo un dedo en su mejilla, causando que riera un poco negando y descruzara los brazos.
--Solo contigo actúo así--Respondió en voz baja, sin creerlo aún ella misma y antes de que Lucy pudiera preguntar, se apresuró a responder--No sé por qué sucede, sólo lo hago--
--Me gusta que seas así conmigo--Susurró Lucy recostandose en el cabezal de la cama, poniendo su cabeza en el hombro de Erza--Es extraño, pero me siento bien sabiendo que soy la única persona que conoce ese lado de ti, me hace sentir especial--Se sonrojó al caer en cuenta de que se había pasado de sincera.
Ambas se quedaron en silencio, aunque Erza terminó recostando su cabeza en la cabeza de Lucy, con una sonrisa en su rostro.
--¿Sabes? A mi también me gusta que te sientas así--Respondió Erza suspirando.
--¿Por qué?--
--Porque realmente eres muy especial para mí--Erza tomó una mano de Lucy entre la suya, entrelazando sus dedos. Sintió cómo ésta se sonrojaba.--¿Alguna vez te has enamorado?--
--Antes no--
--¿Y ahora?--
--No lo sé con certeza--Susurró Lucy levantando su cabeza para mirar a Titania, ésta devolviendole la mirada.
--¿Por qué no lo sabes?--
Pero Lucy no respondió, sólo se acercó un poco más a ella.
Se miraban fijamente, acercando más sus rostros, sintiendo la respiración de una en los labios de la otra. Un poco más cerca y cualquiera diría que llegarían a besarse.
Tan sólo siguieron observandose, aunque luego de unos minutos cerraron sus ojos y juntaron sus frentes, suspirando.
--Deberíamos dormir--Susurró Erza, Lucy asintiendo en acuerdo.
Bajaron lentamente hasta acostarse totalmente en la cama,
Sin soltar sus manos.--No me dijiste quién te gustaba o a quién querías --Murmuró Lucy observando el techo.
--Quizá te lo diga algún día--Respondió Erza--Sería mejor que fueramos a dormir, mañana te mostraré el pueblo--
--¿A qué se refería Ale con lo de la felicidad y todo eso?--Preguntó la rubia en algo que fue un poco más fuerte que un susurro.
Erza sonrió en respuesta.
--Este lugar tiene muchas cosas interesantes--Dijo luego de unos segundos aún sonriendo Erza--Aquí aprendí a apreciar cosas que no podía apreciar antes, aquí descubrí una parte de mí misma que no sabía que tenía cuando estaba buscandome en la osuridad en la que estaba de niña, este lugar puede que no utilice magia, pero la hace--
--Eso es muy hermoso--Susurró Lucy--¿Crees que aquí me encuentre también a mí misma?--
--Tenemos que averiguarlo--Sonrió Erza--Todo estará bien--
--¿A qué costo?--
--No lo sé...Pero tengo por seguro que haré todo lo posible para que seas feliz--
--No lo entiendo--
--Algún día lo entenderás, Lucy--
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No Te Rindas (Erlu)
FanficNo se puede jugar con las personas rotas, la melancolía profunda, el dolor, el cansancio, la depresión, es algo serio, es algo doloroso. Pero... el amor lo puede todo, no importa si es el mundo real o un mundo fícticio, el amor derrumba fronteras, d...