Hoy me tocaría cumplir con mi castigo. Así que me tenía que quedar hasta después de todas mis clases y ver que se le antojaba a la vieja, encargada de "Detención", ponerme a hacer.
-¿Segura qué no quieres que te espere?-me insistía Val antes de irse.
-Estare bien.-mire a Gaspard-lo mismo va para ti. Son dos horas de detención, no tienes porque esperarme-le sonreí. Desde que le dije que lo quería ha estado actuando de forma extraña, se pone aun más nervioso cuando estamos juntos, y se sonroja a un más.
-Yo no tengo nada que hacer. Te puedo esperar-replicó.
-No, no y no.-los mire a ambos.- Ahora largo de aquí.-le sonreí y los empuje hasta la entrada del instituto. Ellos se rindieron.
-Oye, siento mucho que tengas que pagar detención por defenderme-dijo Carlos apenado, al lado mío, ya no usaba silla de ruedas. Ahora tenía unas muletas.
-Y yo me alegro de que tú te estés mejorando tan rápido-le sonreí- La verdad, ya me tengo que ir chicos. Nos vemos luego- me despedí y fui al salón de detención. Toqué la puerta.
Bien, Carla imaginate que este lugar es el rincón a donde te enviaba mamá cuando te portabas mal.
Oí un "Pase" que venía desde dentro del salón. Abrí la puerta y vi un salón prácticamente vacío. Habían unas tres personas lijando los pupitres, otros dos limpiando el piso y uno en las ventanas.
¿Qué demonios hace Liam aquí?
Mientras pasaba mi vista por el salón me encontre con un Liam sonriendome desde un pupitre.
Maldito bastardo, aborto de mono, hijo de la gran...
-Buenos días, vengo a cumplir castigo-decía con una sonrisa a una vieja, gorda con el pelo pintado. Le entregue un papelito.
-Ya veo.-dijo la gorda. Señora, agarrando y viendo el papelito- Bien, llegaste justo a tiempo. El salón de al lado está muy sucio.-dijo mientras desordenaba su escritorio- ¡Liam! Tú la ayudaras-dijo sacando una llave de una gaveta.
Mis ojos se abrieron muy grandes cuando dijo "Liam, la ayudaras".
-Con gusto ayudaré-me agarro la cintura, me apego a él y me susurro en el oído- a esta señorita-sonrío y yo sólo puse una expresión de asco.
Perfecto, ahora que creí que me libraría de este hijo de su madre tengo que limpiar un salón con él.
-Muy bien, aquí está la llave del salón, y por allá-señaló un rincón del salón- están las cosas que usarán- nos vio por unos momentos y volvió a revisar sus papeles. Yo me deshice del agarre de Liam, agarre la llave y las cosas para empezar a limpiar el salón e irme rápido de allí.
-Bien Liam.-dije entrando al salón mientras el se sentaba sobre el escritorio-Yo no quiero estar cerca de ti, tú te quieres ir rápido así que lo mejor se...-no pude terminar porque sentí unas manos en mi cintura que me atrajeron a él.
-¿Quién dijo que yo me quiero ir?-sonreía Liam. Yo me intentaba separar más de él, pero tenía un agarre duro.
-Demonios. Liam, suéltame. Quiero terminar rápido mi trabajo para irme de aquí.-ponía mis manos sobre sus hombros intentando alejarlo; cuando lo logré me aleje de él y fui a buscar las cosas para empezar a limpiar.
-¿Por qué te quieres ir tan rápido? Acaso... ¡¿Alguien te está esperando?!-decía con... ¿celos?.
Liam celoso, bien bonito...
-Eso no es problema suyo.- empecé a limpiar el salón. Liam se quedo parado, no se movía ni un centímetro; se quedó así mientras yo limpiaba el suelo.Yo terminaba de limpiar el piso cuando Liam reaccionó y parecía molesto.
-¡¿Cómo qué no es mi problema?!-alcé una de mis cejas.
-Ah, Liam. ¿Tardaste 20 minutos en procesar todo lo que dije?-dije incredula.
-¡Dime la verdad!-me acorralo contra la pared.-¡¿Quién te está esperando?!
-Ahm, ¿nadie?... Gaspard quizás. No sé, nadie me está...-me interrumpio. Estaba de moda hacerlo.
-¡¿Gaspard?!-preguntó aun más enojado.-¡¿Por qué...?!... No me digas que-yo sólo lo veía confundida- ¡Eso si que no! ¡Tú eres mía!-lo mire extrañada confundida.
¿Qué yo soy qué? Pero ¿qué mierda se comió Liam hoy?
-A ver,-me aleje de la pared, no quería a un Liam enojado acorralándome y mucho menos contra la pared- yo no soy ni quiero ser nada tuyo Li...-no pude terminar porque Liam me beso. Si, lo que leyeron, Liam me estaba besando. Obviamente no quería que lo hiciera e inmediatamente lo aleje y le dí una cachetada.
-¿Qué demonios? ¿Por qué hiciste eso?-dijo sorprendido.
-Pues, me besaste.-le dije como si fuera lo más obvio del mundo.
-Creí que lo querías, por eso siempre te haces la dura conmigo-decía intentando acercarse a mi otra vez.
-Ahm, Liam. No, no y no- sacudí la cabeza- Tú sólito creíste eso. No quiero nada contigo y no me estoy haciendo la dura. Si estás jodidamente bueno, pero no quiero a un chico hijo de puta que lo único que hace es burlarse de los demás-traté de ser sutil. Intento fallido
-¡¿Me estás rechazando?!
La puta... Ahí vamos de nuevo.
-¡A mi nadie me rechaza! ¡Nadie rechaza a Liam Lennon!-estaba enojado y celoso.-Ya veras Carla Ulliel, a mi nadie me rechaza y menos si prefiere a un ser como Gaspard Hamilton.-dijo con asco antes de salir del salón.
Me quedé un poco extrañada porque no entendía que acababa de pasar. En fin, termine de limpiar este salón, estaba hecho una mierda. Me devolví al salón de detención.
-Termine de limpiar el salón que me dijo-dije muy tranquila, cansada y esperanzada de que me pudiera decir que ya me podía ir.
-Bien. Que bueno, porque tu castigo aun no termina-me miro y podría jurar que se formaron dos cuernos en su cabeza y su sonrisa me daba tan mala espina.
La puta... ¿Por qué a mi?
Continuara...
____________________________________________________________________
Holaaaaa~, mis lindos lectores. Gracias a esa bella personita que ha estado votando por mis capitulos y dejando comentarios, me alegro que te guste mi historia :'). Bien, decidí cortar este capitulo en dos partes porque:
1-Creí que sería interesante
2-Se me acabo la inspiración y no quería dejarlo así.
En fin, voten, dejen comentarios y en multimedia tenemos a Carla limpiando el salón después de que Liam se fue, me parecio graciosa la foto u.u.
PD:Gracias por leer <3.

ESTÁS LEYENDO
Un chico diferente.
Teen FictionMi nombre es Carla Ulliel, me acabo de mudar a New York, por el trabajo de mi madre. Soy muy sociable y algo que no soporto es que se aprovechen de las personas. Cuando llegue a este nuevo instituto me sorprendio lo mucho que los chicos y chicas pue...