"OMEGA"

11

2013

Narra Anne

Estaba en mi nuevo trabajo, el alfa de la manada me había colocado como su jefa de seguridad.

Estaba dando los últimos toques a mi informe sobre la ultima pelea de nuestros guerreros cuando el teléfono sonó.

— Hola mi amor — dije por el auricular al ver que era Ian.

— Anne, los Tomlinson han regresado.

Casi me atragantó con mi propia saliva cuando Ian dijo esa simple frase que volvió a mi cerebro un charco derretido de nada.

—Tienes que venir a casa — dijo mi omega desesperado.

Su miedo lo sentí a través del teléfono, lo único que pude articular fue un ligero sí y cerré para luego salir corriendo de vuelta a casa.

Fin de la narración

Ian se encontraba frenético caminando de un lado para el otro por toda la sala.

— Llegué — dijo Anne cuando abrió  la puerta y lo vio.

Ian en seguida se lanzó a sus brazos y lloró, Anne lo consoló y dejo salir su aroma para calmar a su omega.

Cuando esté estuvo más tranquilo pudo hablar por fin.

— Harry ha visto a Clay Tomlinson — dijo Ian tan bajo que Anne se lo hubiera perdido de no ser por su oído mejorado.

— El desapareció hace años, no puede ser posible.

— Lo vio en su misión en Las Vegas, al parecer tiene tratos con los lotófagos.

— Debemos llamar a Arthur para informar sobre lo que nos ha dicho Harry.

— Tengo miedo, Anne no quiero perder otra vez a mi hijo.

— No lo vamos a perder, si logra encontrar a su omega estoy segura de que saldrá de esa depresión que ha llevado a cuestas tantos años aunque el no lo recuerde en su totalidad, sabe muy bien que algo le falta.

— Lo sé mi amor, nuestro hijo sufre la pérdida de algo que no recuerda — dijo Ian pegándose a su alfa.

— Lo sé mi amor, vamos a llamar a Tomlinson para contarle lo que pasó — dijo Anne y ambos se levantaron y se dirigieron al despacho de la misma para llamar al alfa.

Anchorage - Alaska

— Bien, creo que es momento de que los niños conozcan Kodiak — dijo Arthur durante el desayuno.

Todos asistieron y siguieron desayunando, entré risas y bromas.

— Mami, mami Will esta lanzando comida sobre mi — dijo Eliana, hija de Gemma y Aley.

— William. Por favor deja a Eli tranquila — dijo Shawn reprendido a su hijo.

— Papi, ella lanzó primero — se defendió William.

— Dejen de jugar con la comida o no habrá postre — dijo Arthur sonriendo a sus nietos.

Gemma y Aley habían tenido una hermosa niña a la que nombraron Eliana, su cabello era rojo y sus rizos resaltaban la piel pálida y ojos cafés que poseía.

Shawn y Niall habían tenido un hermoso niño de cabello rubio y ojos celestes como uno de sus padres. Físicamente se parecía mucho a Niall pero había heredado la personalidad guerrera de Shawn. Lo nombraron William en honor al hijo menor del alfa quien desapareció hacía tantos años atrás.