"OMEGA"

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Narra Harry

—No quiero ser tu omega— dijo Louis desde la cama.

—¿Qué?—dije pensando que no lo había escuchado bien.

—No quiero ser tu omega— repitió  más fuerte.

—No puedes hablar en serio, acabo de encontrarte maldita sea — dije perdiendo todo el control sobre mi.

—No puedes obligarme—dijo y vi como sus ojos se llenaron de lágrimas.

Entonces me detuve, estaba gruñendo y asustando a mi omega.

—Lamento esto, no quise ponerme como loco, pero te he estado buscando durante años al parecer.

—¿Al parecer?—preguntó él.

—Sí, hay muchas cosas que tengo que contarte, por favor no me niegues como tu pareja.

—Tu no puedes querer a un omega roto, ni siquiera se tu nombre— dijo dejando salir sus lágrimas.

—Joder, soy un idiota, por favor discúlpame. Soy Harry, Harry Styles, vivo en California y soy policía, tengo cincuenta y cuatro años. Es un placer conocerte—dije presentándome como si fuera una entrevista de trabajo.

Louis soltó una pequeña risilla lo que hizo a mi corazón hincharse de alegría.

—Mi nombre es Louis—dijo recostandose un poco más en la cama.

—Si lo necesitas puedo ayudarte— dije cuando vi que le costaba trabajo moverse.

—¡No!—gritó— puedo valerme por mí mismo—dijo molesto.

—No...no quise decir eso—dije nervioso.

—Harry, nunca voy a poder caminar y mucho menos cambiar así que por favor sólo vete y déjame sólo.

—No te voy a dejar solo—dije.

—Vete Harry, por favor sólo vete—dijo rompiéndose y yo no supe qué hacer.

Empezó a llorar desconsolado sobre la cama así que me acerqué a él y liberé un poco de mi olor para calmarlo, Louis se acurrucó en mi pecho y continuó llorando.

Fin de la narración

Mientras tanto en el inframundo

Narra Mariam

Colins se desmayó en el restaurante, lo transporte de vuelta al castillo al ala este para así poder sacarle toda la información que necesitaba.

—Ma....Mariam, ¿Qué pasó?.

—Te desmayaste cariño, pero no te preocupes ahora todo estará mejor.

—¿E.....estoy atado?.

—Tengo preparadas muchas cosas para nosotros.

—Espera, tu lo sabes, ¿Verdad?

—Claro que sí mi amor, por algo soy la que dirige el infierno, nada se me escapa.

Fin de la narración

Anchorage - Alaska

Louis se quedó en los brazos de Harry llorando, el omega estaba roto y no había nada de que pudieran hacer.

—¿Lou?—dijo el rizado después de un tiempo.

—¿Si?

—Misael está vivo — dijo tranquilamente esperando la reacción del menor.