Clarke Griiffin tiene 23 años, estudiante de idiomas en una universidad privada, no quiere saber de sus padres, tiene gran resentimiento por el daño que causaron a su vida. Alexandria Woods es de familia humilde, trabaja en una fabrica para pagar su...
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Lexa
Tu nunca sabes porque el camino puede cambiar de repente en tu vida y llevarte a lugares y personas inesperados, para mi suerte Katherine se había aparecido en mi ruta con su fortaleza y sabiduría que me han ayudado tanto, el domingo logro sacarme de uno de los peores momentos que he experimentado en mi vida, luego de haberme atendido con un primer auxilio y rescatándome de la crisis de angustia no se comportó como mi médico sino como una amiga, como la hermana que nunca he tenido; llevo a nuestra habitación una cena que compro en uno de los restaurantes del hospital y organizo una mesa muy linda con flores, yo había despertado mucho más tranquila, después de ducharme cambie mi pijama para sentarme a cenar con ella.
Fue un momento muy íntimo , con total tranquilidad le conté sobre mi enfermedad y sobre como eso había repercutido en mi familia, también de mi lucha todos estos años por tener una vida productiva y salir adelante a pesar de ella, le comente como abandone la medicación con la falsa idea de que tenía muchos años bien y no la necesitaba, de igual forma porque quería escaparme del efecto secundario del pesado sueño para rendir al 1000% en mi final de carrera. Me escucho con respeto y tranquilidad en tanto cenamos.
- Lexa creo que fue un muy estresante final de carrera, has puesto mucho en riesgo, quizás no era necesario, pero ya lo hiciste, ahora lo importante es que te recuperes y retomes el control de tu vida. ¿Eres consciente de esto?, ¿quieres hacerlo? ¿Dejarías que te ayude?– me quede un momento pensando, buscando razones para seguir viviendo-
- Si quiero hacerlo, quiero salir de toda esta crisis, por favor ayúdame – le dije muy bajo-
- Vamos a hacerlo juntas hermosa, primero te cuento que hoy te separe una cita con un colega mío aquí del Hospital que está incluido en tu seguro médico, yo podría medicarte pero no es mi especialidad y respeto mucho esto, tu cita es el miércoles, pero en tanto la tienes e inicias de nuevo tu tratamiento antidepresivo te voy a proporcionar un tranquilizante suave que te permita pensar con más claridad y dormir.
- Y por qué no me dejas solo con tu pastilla- le insinúe-
- No señora, este es un medicamento temporal en tanto estés en crisis pero lo dejaras en un par de días. ¿De acuerdo?
- Si, está bien, lo hare así, pero no tengo dinero para medicamentos.
- Lexa tu seguro médico te incluye las medicaciones que te envíen, te cuento que la clase de medicación que tenías ya ha sido superada por otras más efectivas e incluso más económicas y con menos efectos secundarios.
- Katherine muchas gracias por ayudarme, de verdad que estás siendo un ángel para mí.
- Te dije que me gusta ayudar, para eso me hice médico, ahora hermosa yo sé que fue un fin de semestre duro pero eso no ha sido tu detonante para la crisis de esta tarde, ¿me quieres contar que paso? –dude un momento no sabía si hablar de Clarke y lo sucedido-
